Epilogo

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»Epílogo


Lancé mi birrete al aire emocionada. ¡Había conseguido graduarme al fin! No podía estar más feliz. Rosita llegó a mi lado y me abrazó con fuerza, mientras llorábamos por la emoción.

- Estoy tan feliz de que te hayas casado con Daryl.- sonrió.- Así no perderé contacto contigo.

- ¡Vaya! Muchas gracias.- fruncí los labios.

- ¡Te adoro!- chilló, mientras nos volvíamos a abrazar. Después posó una mano sobre mi vientre.- Quise decir: los adoro.- dijo en susurro bajo.

- Gracias tita.- dije modificando el tono de voz. Sonreí.

Nos volvimos a abrazar hasta que llegaron nuestras familias y nos turnamos para abrazar y besar a cada uno de ellos. Cuando me arreglaba el vestido, unos fuertes y conocidos brazos me rodearon la cintura con fuerza. Sonreí y recosté mi cabeza de su pecho.

- Felicidades, licenciada.

- Muchísimas gracias, colega.- me di la vuelta lo besé con ternura.

- Eres hermosa.- dijo contra mis labios. Yo sonreí y lo besé de nuevo.

- Te ves condenadamente bien en ese traje gris.- gemí.

Él sonrió grande, dejándome disfrutar de sus hermosos hoyuelos. Después lo tomé de la mano y lo aparté del tumulto de gente.

- Tengo que darte una noticia.

- ¿Cuál?- dijo rodeando mi cintura.

- Bueno... la cosa es que...

- ¡Carol! ¡Daryl!- llamó Clarissa. Sonreí y Daryl hizo una mueca.- ¡Vengan para la foto!- volvió a gritar.

Sonreí por milésima vez y caminamos tomados de la mano. Nos entretuvieron como media hora con las famosas fotos hasta que Daryl se molestó e insistió en llevarme a otro sitio. Ya caminando por el campus de la universidad, me miró a los ojos.

- ¿Qué tenías que decirme?- rodeó mi cuerpo desde atrás y me besó él cuello.

- Ya va... -me di la vuelta y lo miré a los ojos.- Estoy embarazada.

Él abrió la boca, los ojos casi se le salen de las cuencas y de la nada me cargó y me empezó a dar vueltas como un loco. Yo solo podía reír y agarrarme con fuerza a él. Una vez que me puso en el suelo me abrazó con fuerza y me dio muchos besos por todo el rostro.

- Te amo.- sonrió contra mis labios y puso su manos sobre mi vientre.- los amo, los amo muchísimo.

- Nosotros también te amamos.

FIN.

Gracias a todas las personas que leyeron esta  corta historia. Espero que les haya gustado.

Muchas gracias, besos.

So Rude - One ShotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora