Whatsapp RoChu /Hetalia/

#4

No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes 3/4

De repente, el asiático se sentó en el sofá de golpe, frotando sus ojos antes de ver su celular.

01:00am,
Era algo tarde, pero sabia que tenía algo que hacer...algo importante tal vez, en eso, se quedó viendo fijo al mueble frente a el donde colocaba libros y algún que otro decorado, en medio de eso divisó una muñeca matryoshka que le regalo Ivan hace unas semanas atrás.

Ivan....por alguna extraña razón, sintió curiosidad de que estaría haciendo el ruso en este momento, mientras se levantaba e iba hacia la repisa, tomo la matryoska en sus manos y comenzó a jugar hasta que, sin darse cuenta, término abriéndola por lo cual, comenzó a sacar y abrir cada muñequita rusa cada vez mas pequeña, hasta que llego a la ultima y en esa halló una nota bien doblada, nota que nunca descubrió hasta este momento.
Y es que cuando recibió el regalo, solo lo dejó ahí y nunca mas lo tocó.

Con interés y una extraña ansiedad de que algo muy importante se estaba olvidando, desplegó el papelito para leer, en una linda y algo desordenada caligrafía dos simples palabras que escribió escritas por el ruso.

Fueron esas dos palabras las que ayudaron a darse cuenta al chino, que en este momento, el no debía estar ahí, que prometió algo y debía cumplirlo o terminaría decepcionando a alguien que, aunque le cueste admitir, era alguien muy importante para el.

Sin mas, tomo su chaqueta y corrió a la puerta, sin embargo, al abrirla se encontró de frente con una tormenta.
Maldijo mentalmente y colocándose la capucha del abrigo, corrió en dirección hacia la plaza.

Sin embargo, al llegar ya no había nadie y por supuesto que no habría, ya era tarde en la madrugada a demás que estaba lloviendo demasiado.
Lo único que encontró fue el ramo de flores en el suelo con una tarjeta.

"De Ivan
Para Yao"

El castaño apretó su puño, Ivan si había ido ahí....y él, como un maldito lo había dejado plantado, ¡demonios! ¿Como no se dio cuenta de lo que el ruso sentía? ¿Porque rayos no le creyó?

Quizás aun podía hablar con él, y con eso en mente corrió de regreso a casa, sin siquiera molestarse en secarse o cambiar sus ropas empapadas por la lluvia, fue directo a tomar su celular olvidado en la mesa.

Ningún mensaje...

Sin mas, busco el chat del de ojos amatistas y comenzó a escribir.

Yao: Ivan?
> Estas bien?

> Llegaste a casa?

> Dime que estas bien?

>Responde! Por favor...

> .....

> Yiwan...

> Duibuqi

Por otra parte, en su habitación de hotel, el ruso se encontraba acurrucado en las mantas de la cama, ignorando el sonido de su celular.

Si Yao de verdad no lo quería, y el solo estaba molestando a su amor....entonces lo dejara en paz.