One Shoots

» Matt [mix] part 2

Un escalofrío recorrío mi cuerpo haciendome estremecer,de tan solo pensar como reaccionaría Matt.

***

Matt

Fuí tan estúpido de decirle eso,no debí de engañarla,ella tenía prácticamente todo,ella era perfecta y yo la cambié por otra.

Pasé mis manos por mi cabello frustrado tratando de pensar si ir a buscarla o no,nisiquiera sabía donde iría,de seguro ella nisiquiera me querrá ver,le cause mucho dolor,pero eso ya pasó debo remediar las cosas y recuperarla.

Busqué mis llaves en la mesa grande a un costado de la sala cuando pude ver una prueba de embarazo,que idiota fuí esto era lo que quería decirme y simplemente no la escuché.

Ahora más que nunca debo buscarla,debo arreglar las cosas y poner en orden mi mente.

Manejé sin rumbo por unos cuantos minutos hasta llegar a la casa de Cameron.

Llegué y toqué el timbre,seguido me abrió él.

— Como pudiste engañarla,ella te amaba demasiado. — dijo con odio

— ¿Me dejas verla?. — le enseñé la prueba de embarazo

Hizo un gesto de asombro y me dejó pasar.

Subí rápidamente las escaleras hacia la habitación de Cam para luego encontrarla en su cama dormida con mi camisa.

Si pudiera la besaría y se lo haría aquí mismo pero la situación no lo amerita.

Me recosté alado de ella para rodearla y comenzar a darle besos por el cuello causando que se despertara.

— Matt qué haces aquí.
— tartamudeó nerviosa

Debe ser por lo que acabó de pasar.

— Por esto. — saqué la prueba

— Matt escucha yo..

— Sí,se que es mi hijo.
Y lo siento tanto amor,fuí un gran idiota en abandonarte en estos momentos,no tenía ninguna razón para engañarte,tú lo tenías todo.
Y se que la dañe muy feo y talvez no me vayas a perdonar o no me vayas a dejar ver a mi hijo — no me dejo terminar ya que ya estaba encima mío besándome

— Me alegro de que reaccionaras de buena manera y no me hayas dejado.

— ¿Qué?,¿crees de verdad que te hubiera dejado con un niño sola?,ese es mi hijo,jamás lo dejaría. — hablé

Terminando de hablar ví como ella me miraba sonriente con esa gran sonrisa de la que me enamoré.

La besé ya no resistía sin hacerlo,estos días por idiota me perdí a la mejor mujer del mundo por estar con otra perra.

El cálido y tierno beso fué dejando de ser tierno y el ambiente y la tensión crecían, empezaba a hacer calor,deje de besar su boca para dirigirme directo a su cuello para marcar mi territorio, bajé a sus clavículas para besar su barriga por encima de la camisa la que fuí quitando lentamente para luego continuar mi camino de besos volviendo a empezar desde sus clavículas fuí bajando hasta que algo me estorbaba y era su sostén,el que quité con rapidéz,se sentía como nuestra primera vez,eso solo lo lograba causar ella,causar que siempre que la besara se sintiera como la primera vez que la besé,seguí bajando hasta llegar al broche de su pantalón el cuál quité con desesperación,antes de llegar a quitarlos no sé como lo consiguió pero quedó encima de mí. — Es mi turno,cariño. — susurró

Empezó besando mis labios para luego ir hasta mi barbilla,luego comenzó a morder el lóbulo de mi oreja, bajo hasta mi cuello donde sentí que dejaba marcas,desabrochó mi camisa y comenzó a besar mi pecho de la única manera en la que ella sabía hacerlo,al terminar ahí bajó hacia el bulto en mis pantalones en donde empezaba a dolerme la erección,bajó mis pantalones de una vez por todas haciendo que mi erección bombee cada vez más fuerte,antes de que la liberara conseguí voltearla y comenzé a besarle y estaba listo para quitarle esas bragas de una vez por todas y embestirla como nunca.

— Em,cariño,lo siento,no podemos. — dijo algo apenada

— ¿Qué?,¿porqué no?. — dije histérico, no es que sea un adicto a hacerlo pero yo tenía un serio problemilla ahí abajo

— Las embarazadas no pueden tener relaciones sexuales,lo siento mucho.
— dijo

— ¿Y lo vas a decir ahora?, ¡¿cuando mi amiguito esta que explota?!. — volvió mi histeria

— Pues yo también estaba muy exitada no me culpes,además no tengo la culpa.

— ¿Y ahora como resolveré esto?. — apunté hacia mi erección

— No lo sé,cariño,¿agua fría?
— me dedicó una mirada inocente,pero sabía que en el fondo se estaba riendo la muy desgraciada

La besé en la frente y me acosté con ella tratando de calmarme y calmar por allá abajo.

— Oye,no estamos en nuestra casa,estamos en la cama de Cameron.

— Mierda.