One Shoots

» Taylor [sad] part 1

Ya no se qué está pasando con Taylor,¿alguna de ustedes recuerda a ese tierno Taylor al que no le importaba las cosas materiales,o presumirlas por los medios?

Cada vez que veo una de sus redes siempre es una foto de la mansión o del Ranger Rover.

Cada vez me trata más engreídamente,como si fuera el rey de todo,siente tener poder sobre las personas,manejar todo a su antojo,de cuando acá se la pasa ensuciando su casa rompiendo botellas,tratando mal a las personas que limpian,tratandome mal a mí,a mí,la persona que más lo defendía de todos los que le trataban mal,según él.

¿Para qué me quiere aún a su lado entonces?

Si nisiquiera me da mi lugar,trae a toda clase de perra a la casa,solo le interesa gastar,gastar y gastar.

Yo sinceramente ya no se qué hacer,ya casi ni lo veo,siempre sale con Trey, es más nisiquiera sé si me engaña.

Era lo único que se pasaba por mi mente,mientras estaba en la habitación de Taylor,tratando de no llorar. Me encontraba en el suelo del armario,con una caja de recuerdos en mano,un millón de fotos nuestras impresas y regalos de aniversario.

Escuche ruidos abajo.

Taylor o un ladrón,uno de dos.

Bajé las escaleras Para encontrarme un Taylor muy pasado de copas.

Qué lindo,el no me presta atención y a mi me tocará aguantarlo mañana cuando se empieze a quejar de su resaca y además tener que cocinarle darle un buen baño.

Mejor no hago nada. - pensé

- ¡Te dignaste a llegar a dormir Caniff! - grité sarcásticamente

Este hizo una mueca al escuchar mi voz en un volumen tan alto.

- No empiezes. - se tomó la cabeza mientras se tambaleaba y trataba de sujetarse a algo

- ¿Y ahora con cual de todas las perras te fuiste? - lo miré de reojo restandole importancia

Este me mira incrédulo.

- Con la de siempre,con la que te engaño. - contestó siendo obvio

No sabía si creerle o no,pero algo si decían,y era que los borrachos y los niños siempre dicen la verdad.

- Mientes,tú deseguro tienes más de una. ¿O qué? ¿hicieron trío?

- Pues si no me crees adelante,hueleme,mira las marcas. - gritó enfadado

Me acerqué y si,tenia marcas de labial,chupetones, arañazos,y olía a perfume,pero no del barato.

- Yo no aguantaré una cosa así más. - logré decir con un hilo de voz. - Puedes largarte con todas las perras que quieras. - dije gritando con lagrimas de rabia en mis ojos

- ¡Como si ya no lo hiciera!,tengo todo el dinero del mundo,mira esta casa,esos autos,todo es mío,puedo hacer lo que se me pegue la regalada gana,sin estar atado a nadie,sin mi no tendrías un techo,y esas "perras" son hasta mejores que tú,en la cama y en todo.

Agarré mi dignidad y le di la cachetada más fuerte que podría haber dado en mi vida entera a alguien,jamás le había pegado a Taylor,es más nunca hubo razón,pero no permitiría que me faltara el respeto,cuando ni sus fans lo han hecho.

- Mira hijo de tú mamá,si esas sucias son mejores que yo en todo pues ahora eres libre de hacer lo que te pique la gana con ellas,a ver cuando se te acabe todo el maldito dinero a ver,quién estará ahí para tí,cuando quieras apoyo,cuando estes a punto de decaer,quién estará.
- grité con ira. - ¿Porqué Taylor?,¿porqué dices estas cosas tan hirientes,dónde esta esa persona dulce de la cual me enamoré?,esa alma tan terca y celosa,te entregué todo de mi,siempre te apoye hasta cuando no estaba de acuerdo, te dí mis mejores abrazos y palabras para los momentos en los que decaías,te entregué alma,vida y corazón,siempre confíe en tí a pesar de lo que me advertían,y al final terminaste siendo como todos decían,me prometiste que le romperías la cara al que se atreviera a tan siquiera insultarme y aquí estas tú.

Sollozos de mi parte era lo único que escuchaba y eso me dejaba peor,me ponía mal ver a Taylor desinteresado en todo lo que le dije,no como en las películas que vuelven y se abrazan,se besan y el chico pide perdón,no,el Taylor del cuál me enamoré desapareció.

No quería seguír llorando,empezaba a quedarme seca,ya lo único que sentía era rabia,maldigo el día en el que empezó a ganar tanto,y más cuando le empezó a importar tanto,ya no lo reconozco.

Me levanté,decidida a seguir mi vida,subí aquellas escaleras,tome las maletas con las que llegué y tomé solo la ropa que me había comprado con mi dinero,las prendas que me había regalado él las deje colgadas ahí,me imagino y las venderás o se las dará a sus amiguitas,amigotas mejor dicho,porque no debe haber ninguna plana. Lo mismo hize con los zapatos,joyas,y demás ropa.

Antes de bajar tomé mi teléfono y marqué un uber,al terminar heché un último vistazo a la gran casa,me venían muchísimos recuerdos,tanto buenos como malos,no tenía queja,estos 3 años de relación Taylor me hizo la mujer más feliz del universo,talvez se aburrió de tanto yo,y salió a buscar nuevas...aventuras.

Suspiré relajada,ya no quería llorar y estaba haciendo un gran esfuerzo por lograrlo.

Caminé hacía la salida.

Al bajar estaba Taylor,ojalá hubiera subido a darse una ducha o algo,no quiero que empieze otra pelea de nuevo.

- Toma. - me lanzó las llaves de su auto. - Mañana me lo devuelves

Es un cínico.

Le tiré las llaves de regreso con furia

- No nececito tú estúpido auto,ni tú estúpido dinero. En la habitación solo me llevé la ropa que compré con mi propio dinero,no te preocupes por los anillos,los perfumes,las joyas,la lencería y los vestidos caros,todos estan en su lugar,es tuyo.
- dije esto último para salir de aquella casa

- Espero no volver a verte,Taylor Caniff.

Salí de esa puerta sin aún saber donde me dirigiría,pero era lo que menos me importaba. Deje toda esa mierda atrás y me sentía mejor que nunca al restregarle su dinero en su maldita cara.