Aprendiendo A Ser Un Nerd ©

Capítulo 1

¿¡ERAS GAY!?

17 de agosto, 2009

Aún recuerdo mi primer día en una de las universidades más prestigiosas del país: "Shelyft University" y estaba sumamente ansioso; Estaba decidido a empezar mi nueva vida. Ya no más drogas, alcohol ni problemas, sólo mis estudios y yo.

***

Me levanté a las 04:30 a.m. de la emoción, me incliné hacia adelante para poder encender la pequeña lámpara que se encontraba en mi buró y así poder orientarme.

Decidí darme una ducha, me metí a la regadera y al sentir el agua caliente en mi cuerpo, sentí cómo éste se relajaba al instante, disfruté esta sensación hasta que recordé que me debía poner shampoo, ¿acondicionador? No gracias, no quería llamar la atención de forma errónea... Para empezar, no quería llamar la atención, o al menos, ya no más.

Al salir del baño y entrar nuevamente a mi habitación, recordé que ahí estaban esas malditas porquerías que me darían el apodo más estúpido e infantil que la humanidad ha creado: unos lentes hippster de armazón negro se encontraban en la esquina de mi buró, me los coloqué y... ¡Wow! ¿Con que así se ve el mundo?. En fin, terminé de vestirme, algo simple, no quería destacar y salí decidido del cuarto en el que he pasado tantas cosas.

***

Fui a la cocina, tomé un jugo de manzana y me llevé un pan a la boca. Salí de casa pitando sin siquiera despedirme de mi familia y llegué a la central de autobuses.

El camino en bus generalmente es muy tranquilo, pero esa vez ocurrió algo que me tuvo pasmado casi toda la tarde ese día; Me coloqué mis audífonos y decidí escuchar una canción cualquiera, mientras la música inundaba mis sentidos, observé a la gente pasar felíz y tranquila, muy pocos llevaban prisa ya que apenas eran las 05:30 a.m., seguí viendo a las personas cuando mi mirada se topó con una chica muy linda a la cual recuerdo aún con toda claridad: cabello castaño, ojos color café, sonrisa encantadora y tez blanca, mi mirada no se apartaba de ella hasta que un chico atlético, fornido y atractivo al ojo femenino se le acercó y la besó.

Vaya, que día.

***

Me encontraba frente a la entrada de la universidad y justo en ese instante comencé a cuestionarme ¿era eso lo que quería? ¿Aún era posible rehacer mi vida? ¿Tendría "recaídas"? Sólo había un modo de averiguarlo, di un paso adelante y oficialmente era un universitario.

Caminé un poco para adentrarme en mi nueva Universidad y decidí dejar mis cosas junto a un árbol cercano el cual su sombra abarcaba (en ese entonces) por lo menos 5 metros y me recosté cerrando los ojos un momento para poder organizar mis ideas.

Abrí los ojos y me levanté lo más rápido que pude al ver que mi reloj marcaba las 09:00 a.m. ¡ES MÁS QUE TARDE! me llevé mi mochila al hombro y salí disparado hacia mi salón de clases.

Los pasillos estaban en completo silencio, no había
nadie ahí. Cuando después de estar 10 minutos buscando encontré mi salón, abrí la puerta de un golpe y esta azotó en la pared a mi derecha, logrando que todas las miradas se posaran en mí, incluida la de la maestra Greavent.

-Joven Alex, ¿se puede saber por qué usted ha llegado tan tarde?- ¡MIERDA! Por las prisas olvidé inventar una excusa en el camino, así que sólo me quedaba decir la verdad:

-Maestra, en realidad había llegado poco después de las 05:50 a.m. pero me quedé dormido bajo un árbol y me desperté hace apenas...-dirigí la vista a mi reloj de muñeca-... 15 minutos.