III

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Fin del show. Starless bajaba del escenario entre las aclamaciones de la audiencia. No dudó ni un momento en seguir a su novio, pero apenas pusieron un pie abajo, las chicas de Majhestics y los integrantes de Aftershock los rodearon.

-¡Te la rifaste allá arriba, ovejita! -Ángelo le revolvía el cabello y le rodeaba el cuello con un brazo.

-Te dije que era bastante bueno -era Milo- Shaina, perdiste. Quiero mi dinero en efectivo.

-¡Maldición!

-Te dije que no lo hicieras -espetó Marin sin inmutarse.

-¡Esto hay que celebrarlo! -instó Kanon.

-¡Tú pagas los tragos!

-¡Ni m*dres, Ángelo!

Gruñó de la frustración al ver a las tres bandas alejarse y perderse entre la audiencia que se dispersaba, pero no iba a desistir de su propósito. Sólo debía aprovechar la oportunidad perfecta para sacar de ahí al anteriormente peli-lila, sin escándalos ni escenas. Sin embargo, y como todo en la vida, algo se interpuso en su camino.

-¡Vaya, nunca pensé que tu novio fuera tan bueno! -era Aioria.

-Tiene lo suyo -espetó Afrodita con simpleza-, pero debe trabajar más en su técnica si pretende competir contra Saga y Kanon alguna vez.

-No duden de que lo hará, sobre todo si el mismo Saga le enseña -ahora era Kardia-. Se ve que quiere ligárselo en serio y con todo.

-¡Señor Kardia!

Eso había colmado su paciencia. No iba a dejar al muchacho un segundo más junto a ese tipejo. Empero esos segundos perdidos le costaron muy caro, pues divisó una escena que casi le quema las retinas: Saga acorralaba a Mu entre la barra y su cuerpo, mientras lo devoraba a besos, a la vista de todos y sin pudor alguno. La furia bulló como veneno por todo su sistema, mandando al drenaje sus planes de tratar todo pacíficamente. Avanzó hasta donde estaban y, sin pensarlo, apartó al peli-azul de un jalón para propinarle un buen puñetazo.

-¡¿Qué car*jo te pasa, cabr*n?!

-¡Vuelves a siquiera tocar a mi pareja y te mato! ¿Me oyes?

-¡Shaka!

-¡Uy, ya te cayó el chahuistle (1), oveja!

-Mu, nos vamos.

El peli-plata obedeció sin replicar. No obstante, y para disgusto del oji-azul, Saga no se quedó con la boca cerrada.

-¡No tienes que obedecerle, no es tu madre!

-Soy su pareja, te guste o no, y eso no va a cambiar nunca.

-Eso no lo decides tú sino Mu.

-Mira, ya estás empezando a cansarme...

-¡Puedo explicarlo todo, pero por favor no peleen!

-No tienes que darle explicaciones, no lo entendería.

-Saga, esto ya no te concierne a ti sino a Mu -espetó Shura.

-¡Es mi amigo! ¡Todo lo que le pase me concierne!

-¡Cómo ching*s, Saga! -intervino Ángelo- Deja que se arreglen y luego te lo ligas si terminan.

-Ya quisieras.

-Está bien -gruñó el vocalista principal de Aftershock-, pero si lo lastimas te las verás conmigo.

El camino de vuelta a su apartamento fue bastante pesado para ambos. Ninguno había emitido palabra en todo el trayecto, pues el uno pensaba en cómo explicarle las cosas al otro, y el otro se preparaba para lo que fuera a escuchar. No fue hasta que los dos estuvieron en la sala cuando llegó la hora de la verdad.

La otra vida de MuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora