Sinopsis

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Al cabo de cada año, comienzas a comprender que la sociedad puede jugar contigo, con cada uno de tus movimientos,usarte como un peón mas de su infalible plan, solo los mas listos logran cruzar la barrera que los aprisiona de un mundo monótono y aburrido, y logran ver, que detrás de aquella fachada gris, hay un arco iris luminoso, esperando por su llegada...

Para Lizeth, el mundo era una oscura nube gris, el empeño que le colocaba a cada acción no parecía ser el suficiente como para lograr lo que ella mas quería, tener éxito, triunfar en lo único que consideraba su talento, la escritura, aquella adolescente afligida no podía evitar sentir la necesidad de desaparecer, susurrar sus plegarias al cielo solo se había convertido en una perdida de tiempo, por ello, había decidido subir ella misma y encarar a aquel "Dios" que ignoraba cada una de sus peticiones.

Pero siempre sucedía algo...

O la cuerda era muy delgada, o la ambulancia llegaba justo a tiempo,siempre había algo que no le permitía gozar del descanso eterno, aquel que ella esperaba por tanto tiempo, que esta se había rendido, logro entender que sus intensos siempre eran fallidos y esperaba con ansias el momento en el que el Dios, que ella tanto alababa, decidiera elevar su alma hasta detrás de la gran cortina de nueves que no les permitía a los simples mortales, observar como era el paraíso.

Fue entonces, que su carrera despego como por arte de magia, las editoriales formaban fila esperando poder trabajar con aquella estudiante prodigio y su fascinante estilo de escritura, el sentimiento que le colocaba a cada una de sus historias llenaba de lagrimas los distintos ojos que tenían el placer de leer sus escritos, tantos sentimientos que había estado ocultando debajo de una tenue sonrisa, habían salido a la luz para ser alabados por la gente que antes los menospreciaban, se sentía como en el pedestal mas alto, había logrado por lo que tantos años trabajo.

Y entonces...es que aquel Dios, decidió hacer su aparición...

Unos minutos bastaron para que la castaña perdiera la vida, sus ojos se cerraran para siempre y gozara de aquel esplendido sentimiento del que tanto se había aferrado, en esos momentos, sus lagrimas no eran de alegría, lamentaba que por fin sus plegarias fueran escuchadas, lamentaba haber sido tan tonta, lamentaba no tener otra oportunidad para enmendar su error.

Entonces ella entendió que la vida era cruel en tantos sentidos, que por mas duro que trabajara, jamas lograría nada,"¿Porque te empeñas en hacerme sufrir?"preguntaba tratando de mantenerse despierta, aunque sea para poder despedirse de aquella gloria de la que tanto había estado presumiendo, suponía, que nadie la extrañaría, después de todo, no tenia a nadie quien la apoyara, estaba sola, en un mundo donde el dolor la había ido consumiendo lentamente hasta evaporarla por completo, "¿Me darías una ultima oportunidad?" imploro en su ultimo aliento la joven antes de cerrar sus pesados ojos

Y por primera vez, aquel Dios hizo algo bueno...

Despertandola sobre las suaves sabanas de su habitacion, con la fecha marcada en el calendario, el reloj marcando las tres de la tarde y un gran sentimiento satisfactorio recorriendo sus venas.

Y un gran deseo de venganza consumiendo su ser, y fue entonces, que ella misma le dio comienzo a su absurda tragedia, donde el final siempre era el mismo, donde el dolor siempre se sentía real, donde sus sueños eran elevados hasta el cielo.

Así le dio comienzo a este juego en donde el premio, era su propia vida...



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