Otro comienzo de año ¿Cómo lo sé? Porque la maldita alarma no ha dejado de sonar por más de media hora.
- Matt, cariño. – grita mi madre desde el primer piso. – levántate, se hace tarde.
- Ya voy. – me dirijo a la ducha para poder despertar, les aseguro que si no fuera por el agua fría llegaría como zombie a clases.
No me demoro más allá de 10 minutos en ducharme y vestirme. Cuando llego a la cocina me encuentro con las mujeres de mi vida, bueno con dos de ellas, ya que falta una.
- ¡Hermano! - corre a mis brazos Lexi, mi pequeña hermana. - ¿le hablaras? – pregunta muy bajito en mi oído.
- No molestes a tu hermano. – la regaña mamá. – te hice tostadas.
- Pequeña eso jamás pasara. – le doy un beso a mamá y tomo una de las tostadas. – debo irme, tengo que pasar por la rubia.
- Mándale saludos a Brooke. – oigo que dice mi madre antes de que cierre la puerta.
Brooke una rubia hermosa, no la típica zorra que todos piensan, ella es corazón de abuelita, siempre pensando en los demás y en el bien común, saca buenas calificaciones, capitana de porristas, se podría decir la chica perfecta.
En el camino a su casa, pienso en cómo sería mi vida si me atreviera a hablarle a Lizz. Ella es una de las chicas que compone mi círculo de amigos pero, a pesar de eso, casi ni hablamos, solo me atrevo a mirarla en secreto y cuidarla desde la oscuridad.
- Pensé que no llegarías- dice mientras sube al auto- estaba por llamar a Cameron.
- Aun no entiendo si él es tu casi novio, porque él no pasa por ti- digo mientras pongo en marcha mi amado bebe- yo no soy tu chofer.
- Sabes que no me gusta usar mi auto. – dice ella incomoda.
- Algún día tendrás que superar eso.
- Lo mismo podría decirte sobre Lizz, pero sabemos que no sucederé ni en un millón de siglos.
- Te odio.
- Eres mi mejor amigo y siempre has pasado por mí, así que hasta que términos el instituto tendrás que venir tu- dice con una sonrisa de inocencia.
- Solo porque te amo lo hago.
- Si lo haces por eso, porque no lo haces por Lizz- dice mientras levanta una ceja.
- Vas a comenzar de nuevo- digo un poco fastidiado- sabes que jamás en la vida vamos a estar juntos, menos después de lo que le paso con él.
- Pero no debes perder la esperanza, no estas con ella porque no te la quieres jugar y prefieres mirarla como un psicópata- dice frunciendo el ceño- ¿sabes qué? Este es nuestro último año, vas a estar con ella cueste lo que cueste.
- ¿Cómo piensas hacer eso?
- Eso querido amigo... déjamelo a mí- dice con una cara totalmente picara.
- Oh no. – niego lo más rápido que puedo con la cabeza. – conozco esa maldita cara y no permitiré una de tus malditas locuras.
- Siempre has amado mis locuras. – levanto una ceja mientras la observo. – está bien, sé que te dan miedo, pero esta resultara.
- ¿Qué me garantiza esta locura? – tal vez funcione.
- Que Lizz sea tu novia. – sonríe de oreja a oreja.
- Piensas hacer que pierda la memoria y decirle que yo era su novio. – comento sarcástico. – o mejor hipnotizarla para que se enamore de ti.
- No estoy tan loca para hacer eso, solamente serás su admirador secreto.
- Esta definitivamente loca.
- Mira ella no sabrá quien eres y si no funciona, no sabrá que hiciste el ridículo.
- Me encanta tu optimismo.
- Gracias. – rueda los ojos. – hablando en serio, te ayudare a conquistar ese corazón.
- Será un largo año...
Recuerden que la novela está en edición, por lo que algunos capítulos serán reescritos ya que están pesimamente narrados, con faltas de ortografía o sin coherencia.
atte. Prisci
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Soy un estúpido tímido
Fiksi RemajaMuchas veces pasas enamorado de la misma persona durante años sin que se de cuenta. Aveces simplemente eres uno más del montón. O eres un simple amigo. Y eso soy para ella, un chico el cual tiene los mismos amigos que yo, con el cual comparto cie...