2. Clases de tres en raya

39 4 1
                                    

La segunda hora se me pasó volando, ya que estuve jugando con Mateo al tres en raya. Bueno, perdiendo, ya que él ganó las 15 partidas.

Al salir al patio saludé a Cristina, a María y a Ana, ya que no las había visto en todo el verano. Y después busqué a mis mejores amigas en el lugar donde siempre nos encontramos, en las escaleras que llevan a la sala de informática. Pero solo encontré a Marta.
-¿Dónde está Sofia?- Dijo
-La perdí al salir de clase.- Le respondí.
Le pregunté qué tal le había ido en el campamento y me explicó todo con detalle.
-Y...¿no has tenido ningún amor de verano? -Pregunté con una sonrisa picarona.
-No...- Me dijo con un suspiro. - Tu ya sabes que yo solo tengo ojos para Charlie.
-Charlie solo tiene ojos para los escotes de las universitarias.
Me miró con cara triste, y supe que había metido la pata, pero en el fondo, Marta sabía que era cierto. Conocíamos a Charly desde preescolar, y siempre había sido un chico muy simpático y alegre, pero en 1º de la ESO, se volvió un imbecil integral.
Decidí no volver a meterme en ese lío, y cambié de tema.
-¿Con quién te sientas en clase?- Pregunté.
-Con Cris. ¿Y tú?
-Con un chico nuevo, se llama Mateo. Es muy majo.
-¿Y es mono?- Me dijo con un tono tórrido.
-¿Quién es mono?- Dijo Sofia que recién se incorporaba a la conversación.
-El chico nuevo -Le respondió Marta.
-No está mal, aunque no os hagáis ilusiones ni la una ni la otra.- Dijo fulminándonos con la mirada. -Demasiado guapo para vosotras, además, claramente le gusto yo.
Ya me había acostumbrado a ese tipo de comentarios, sabía que lo decía sin ninguna intención, pero por alguna razón, me dolieron las palabras de mi amiga.
En ese momento sonó el timbre, y me uní a Cristina y a Ana para subir las escaleras, pero una duda corría por mi cabeza, ¿Por qué me había dolido el comentario de Sofia?

Silenciosa LocuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora