¿Ahora todo será diferente?

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12.48  pm

El día estaba empezando, los rayos del Sol invadían la habitación lo que me provocaba querer abrir mis ojos, pero a la vez tenía la sensación de no abrir los ojos nunca más, de no despertar nunca más, no quería saber dónde estaba, tenía miedo de saber quiénes me estarían viendo, tendría esos ojos juzgándome y eso me aterraba, pero en algún momento tendría que abrir mis ojos. Tomé un poco de valor y decidí que los abriría lentamente, lo primero que vi fue un techo blanco que jamás había visto, luego mi vista se posó en alguien estaba sentado a junto a mi, la persona tenía una silla al lado de la camilla en dónde me encontraba, aquella persona parecía estar dormida y no podía distinguir muy bien quién era. No había nadie más en la habitación, pero me sentía agotada, no sabría que decirle a mi madre cuando la viera y Kat, me preguntó sí sabrá lo qué pasó. Solté un suspiro y al mirar hacia la puerta vi como se abría lentamente, la persona asomó la cabeza y al verme me despierta me dio una sonrisa, no reconocía muy bien a la persona, pero cuando ya había entrado completamente noté que era una enfermera...

-Hola, ¿Cómo te sientes? -

Ella me dio una sonrisa y empezó a examinarme. Quería contestarle, pero las palabra no lograban salir de mi boca. La enfermera se acercó a mí y me acarició un poco la cabeza.

-Llegaste muy grave, pensé que no ibas a sobrevivir, pero después de una semana al fin abres los ojos. Tu mamá y tu amiga no sean ido del hospital, ellas en serio de preocupan por ti -

La enfermera me dio una sonrisa y me dijo que iría a buscar a mi madre. Miré hacia la persona que estaba dormida, era Kat que apenas se estaba despertando; cuando se dio cuenta que yo también estaba despierta se levantó rápidamente de la silla y me abrazó, mientras me abrazaba sentí como ella empezaba a llorar...

-Lucy, lo siento, lo siento tanto... -

No entendía muy bien, no tenia ni idea de porque Kat se estaba disculpando, pero ella nunca me había hecho algo malo y aún así ella me pedía perdón. Con la poca fuerza que tenía le puse mi mano sobre su cabeza y le di una pequeña caricia, ella levantó la vista lentamente, sus ojos estaban llenos de lágrima, le di sonrisa y luego en un leve susurró le dije "Que todo estaba bien". Kat se levantó y se quitó las lágrimas que tenía, me miró y me sonrió; antes de que ella pudiera decir algo más mi Madre había entrado y al verme corrió a abrazarme.

-Lucía, casi me matas de un susto, pero agradezco tanto que todavía estés aquí conmigo -

Kat sonreía mientras veía la escena, pero luego dijo que iría al baño. Mamá dejó de abrazarme y me miró, su mirada era de tristeza, pero de cierto modo ella se veía muy contenta de verme; se quedó un momento mirándome.

-Lucy, ¿En qué estabas pensando? -

Mamá parecía decepcionada, me partía el alma verla así. Quería decir el porque lo había hecho, pero sentía miedo de que ella supiera lo que realmente pensaba sobre mi misma, me aterraba que ella supiera que yo me odiaba...

-Hija, no te voy a presionar a que cuentes, pero como madre quiero lo mejor para ti. Sólo quiero que sepas que te amo, no importa qué sea, yo siempre te amaré y te daré mi apoyo al 110% -

Mi madre me dio un beso en la frente mientras me acariciaba la cabeza, dijo que iría a buscar al doctor. Antes de que ella se fuera por completo me miró, nuestras miradas se juntaron y de mi boca salió un leve susurró, casi inaudible, pero ella me había escuchado.

-Mamá, lo siento... -

Ella sólo me dio una sonrisa y me dijo que me amaba. Luego de eso salió de la habitación, no podía saber o explicar realmente lo que sentía mamá o Kat, pero al verlas siento una opresión en el pecho. Cerré mis ojos un momento y sin darme cuenta de ellos ya estaban cayendo unas cuántas lágrimas, quería ponerme llorar, pero antes de que pudiera Kat había vuelto.

-Lucy, te tengo algo... -

-¿En serio? ¿Qué es? -

-La enfermera me dijo que te dejaron esté regalo -

Kat me entregó unas cuántas cartas, en el sobre venía mi nombre, con sólo mirarlas supe que eran las cartas anónimas que había estado recibiendo desde hace un tiempo, al saber que está persona no pensaba en rendirse conmigo me hacía sentir especial y a la vez como una completa tonta.

-¿Y esa sonrisa? ¿Sabes quién las escribió? ¿Puedo saber? -

-No tengo idea de quién sea -

-Eso seguro es una mentira, pero supongo que en algún momento sabré quién es...-

-Digo la verdad, no tengo idea de quién es, pero espero averiguarlo pronto -

Kat me dijo que pronto tendría respuestas, sólo había que esperar. Quería leer aquellas cartas lo antes posible, pero con Kat aquí no sería lo correcto, así que decidí ponerlas de lado y hablar con Kat sobre lo que me había perdido; ella me contó que está semana había sido algo complicada. Kat venía a verme a menudo, pero más que todo venía a apoyar a mi madre; ella no tocó mucho el tema sobre cómo es que pasó, pero me dijo todos los problemas que tuvo mamá al verme en aquel estado. Sabía que Kat no lo decía con la intención de decirme que todo había sido mi culpa, pero aunque ella me dijera que todo era del pasado yo tenía claro que todo había sido mi culpa.

-Lucy, no tengo idea del porqué y quizá no deba saberlo, pero como tu mejor amiga voy a tratar de ayudarte -

Kat me dio un abrazó y nuevamente se puso a llorar. Luego de eso Kat se fue su casa, cuando ella se fue me sentí algo sola, pero a la vez sentí que podía liberar mis pensamientos; solté un suspiró y sin pensarlo mucho tomé las cartas para poder leerlas. Al terminar de leerlas sentí como la puerta se abría y al mirar hacia ella pude ver a mi madre con una sonrisa.

-Cariño, mira lo que te traje... -

Ella estaba entrado con unos cuantos tulipanes; mis favoritos. Mamá los dejó en la mesa de noche que estaba cerca de la camilla y me miró con una sonrisa.

-¿No son hermosos? La enfermera dijo que alguien los dejó para ti, ¿Algún admirador? -

-No tengo nada de eso, tal vez Kat las envió... -

Mamá me miró dudosa, pero no preguntó más. Empezó a hablarme sobre que pronto estaría de vuelta en casa, sobre cómo saldríamos adelante ahora, pero sobre todo que todo iba a cambiar para bien; no estoy muy segura sobre sí de ahora en adelante todo será mejor, pero creo que debería de intentar dar lo mejor. El día había pasado rápido y la noche había llegado, Mamá dijo que por hoy iría a casa, pero que estaría mañana temprano; cuando se fue Mamá sentí de nuevo la soledad, pero sin darme cuenta la enfermera había entrado a mi habitación.

-Hola ¿Cómo te sientes? -

-Hola, estoy bastante bien -

-Eso es magnífico. Creo que los regalos de hoy también te hicieron sentir mejor... -

-¿Sabes quién los dejó? -

La enfermera me dio una sonrisa y dudó un poco en sí darme una respuesta.

-La persona dijo que quería mantener el anónimo, lo siento -

-Lo entiendo, ¿no dijo nada más? -

-Dijo "Te quiero mucho, Lucy" -

La enfermera me miró directamente a los ojos cuando dijo eso, parecía que ella misma me estaba diciendo aquellas palabras. Antes de irse ella me dio una sonrisa y me deseó buenas noches.

-Antes de que se vaya,por favor, quiero saber su nombre... -

-Lo siento, Lucy. Mañana podremos hablar más -

La enfermera se marchó después de decir esas palabras; aunque no me dijera su nombre, aquel rostro era muy lindo, no podría olvidarlo fácilmente. Mis ojos se cerraron lentamente después de que ella se fuera, está noche esa enfermera estaría en mi mente....

Así te amo, tú eres perfecta  🌸EDITANDO🌸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora