La Nieve De Verano (Sesshomaru y tu)

Capitulo 4

POV Sesshomaru

-Miauuuw- maulló la pequeña y comenzó a removerse y estar inquieta cada que la intentaba sostener, se movía de un hombro o otro, sonreí de medio lado- Te pareces a ella- esas fueron como palabras mágicas, se dejo de mover y por fin se sereno.

Voltee a ver la cara de la pequeña gatita y aquellos bellos ojos azules me recordaron a la sacerdotisa que conocí hace ya más de 100 años.

Contemple el cielo azul durante unos minutos y parecía que la gatita también lo hacía, en los ojos pequeña reflejaban una tristeza... pero eso ¿es normal con los animales?

Camine alrededor del lago contemplando como se reflejaba la luna en el lago, sentí una inmensas ganas de dormir, no luche contra ese deseo. Me recosté bajo un árbol cercano al lago.

Los recuerdos invadieron mis sueños aquellos a los que por muchos años intentaba reprimir.

Flash Blach

Era una tarde fría, me encontraba herido después de haberme enfrentado a un demonio serpiente el cual lo subestime pues después de haberlo matado me había hecho un corte en el costado izquierdo.

Me sentía humillado, ¿Cómo es posible que el gran Sesshomaru pudiera haber sido herido por un demonio inferior?

Por mi arrogancia no pude haber prevenido aquel ataque.

Camine hasta llegar a un lago mis piernas no respondían y me desplome cerca de un árbol mis ojos pesaban demasiado...

Creo que me desmaye una hora más o menos ya que cuando desperte empezaba a oscurecerse.

Mi armadura se encontraba destrozada al igual que parte de mi ropa también mientras mi estopa tenia pequeños rastros de sangre, a lo legos sentí dos presencia.

La primera desprendía un olor a flores de cerezo mezclado con canela e inciencio, y la otra tenía un olor como a jazmines.

Para esos momentos no había abierto los ojos y sentí que aquella presencia se acercaba más y más a mí. Llego a una distancia considerable y un diminuto grito se hizo presente por parte de la presencia de olor a jazmín está a su vez salio corriendo la otra simplemente le susurro algo que no alcance a escuchar.

La presencia de con olor a flores de cerezo mezclado con canela e inciencio se acerco mas y mas a mi hasta quedar alado mío, algo me impedía hablarle algo no me dejaba moverme ni abrir los ojos solo disfrute aquel exquisito olor.

Después de unos minutos llego la otra presencia grito por lo alto.

-_____-sama ya e traído lo que me pidió- no se acerco y sentí como "_____" se paraba e iba hasta allá.

-Dile al sacerdote que llegare mas tarde y si te pregunta dile que encontré a un viajero muy mal herido y cuidare de el- la voz de ella me parecía muy conocida era casi igual a la de... no esto no es posible ella es una humana y la _____ que conozco es un demonio tiene que ser una coincidencia.

_____ se volvió a acercar a mí y la otra chica se fue lejos.

-Que pretendes hacer con eso- al abrir los ojos me encontré con unos ojos tan azules como el cielo nocturno, una cabellera negra azabache atado en una trenza que llegaba mas allá de sus rodillas, en su frente había una marca era una flor de 4 pétalos con un traje de sacerdotisa.

A su lado descansaba un cuenco con agua y plantas medicinales ella acerco su mano a mi costado izquierdo lo reviso e hizo una mueca de desagrado.

-Valla que al demonio al que te enfrentaste es muy fuerte no crees- ella tenía un rostro muy serio.

Me lavo las heridas y fue retirando la sangre seca que estaba en mi piel estábamos en silencio pero creo que a ninguno nos importaba eso.

-Que clase de demonio te ataco- preparaba hojas medicinales y me las puso en mi costado izquierdo.

-Uno serpiente- ella pareció alarmarse y comenzó a buscar algo en mi... cuerpo -Que buscas- no lo pude evitar la curiosidad pido mas que yo.

-Los demonios serpiente tienen un veneno que para los demonios perros como tú son muy peligrosos- comense a recordar que mi padre me había advertido sobre eso -ahí está ella-

Estaba observando mi pecho en una parte en la cual había rastros de sangre.

-Primero purificaré la herida, después sacare el veneno pero tendré que hacer un sello para que no afecte a tu energía demoníaca y pueda curase pronto- posó su manos en mi pecho y una luz morada emanaba de sus manos.

Un pequeño sonrojo adorno sus mejillas se acerco a mi pecho y succiono el veneno después lo escupió, hizo esto varias veces hasta que ya no había más veneno.

Mis ojos comenzaron a pesar nuevamente me quedé dormido.

Al abrir mis ojos me encontré en un cuarto, estaba en buen estado repleto de ese embriagante aroma de cerezo mezclado con canela e inciencio.

La escasa luz que entraba por las puertas daba a entender que era de noche, me encontraba sobre un futon y la parte superior de mi ropa había desaparecido siendo sustituido por vendas.

Intente parame pero un peso en mi pecho me lo impidió, mire que estaba una chica plácidamente durmiendo.

Fin del Flash Black

Me desperté agitado era un recuerdo que atesoraba pero que a su vez odiaba.

Me intente parar pero mis recuerdos parecen que pesaban o que los había atraído al mundo real.

Me estremecí al sentir y un peso en mi pecho, volvió a mi aquel olor a cerezo mezclado con canela e inciencio.

Mire lentamente hacia donde estaba aquel peso, ahí estaba aquella gatita que dormía plácidamente, algo me inquietaba y era que para ser un sueño aquella sensación no desparecía predominaba en mi.

Y lo más curioso es que la gatita desprende el mismo aroma que aquella sacerdotisa.