Querido Poemario...

Sin Nombre...

Y sí, a la respuesta que gana apuestas el menda contesta que sí.
No hay salida, alternativa a las heridas que sentí.
A llorar rompí, sí, me hundí, pero todo el tiempo lo cura.
Golpe uno, pero perduro, acompañado de la locura.
Pues la cordura no es más que un lastre, otro desastre sin factura.
Su estructura no es dura y hasta el viento erosiona y tritura.
Es la confitura, la dulzura de palabras.
Para ganar a las palabras dadas para macarras, da la cara.

A cada tiempo que pasa arrasan casas de paja muchos lobos, sólo quiero que si muero que el mundo entero no me vea cual mongolo.
Sólo, amigo, es ley de vida, sin bebidas ni saliva, mi ida está completa, si amor tengo en mi vida.
Quería comerme el mundo y el mundo me comió~por la cabeza.
Moraleja, sueña en el triunfo, y en un discurso por si pecas.
Dale duro, sé maduro, pero seguro y a tu manera.
Si esperas a más de un tren, men, acabarás con cien problemas.