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(Cap. #4) "Noviazgo"

Era domingo diecinueve de noviembre del 2014, una noche fresca un poco oscura pero con un clima frío y delicioso, al ser las siete y cuarenta de la noche me encontré con Simón en la Municipalidad de mi cantón, teníamos planeado que él me ayudaría a estudiar Ciencias ya que era una materia que se me dificultaba un poco, y él ya era universitario claro. Recuerdo que el traía puesto una chaqueta de cuero negra muy hermosa y un pantalón negro y yo tenía puesta una blusa azul de manga larga y un pantalón apretado como color blanco; esa noche reímos y hablamos como locos, claro que después de que me explicará mi gran duda de Ciencias, el mejor profesor que podía tener.

Después de tantas risas y besos tomo una postura de seriedad, lo cual me asusto ya que él nunca lo hacía y comenzó a mirarme nervioso, pero, me dio mucha risa verlo así entonces él sonrió al igual que yo y me dijo:

-¡Tengo que decirle algo!

-¿Ok que pasó? -Le agradecería que me lo dijera ya, mi autobús pasa en unos minutos y creo que me dejará aquí!
-Respondí yo.

Él tomo mi rostro con sus grandes manos, me acerco y me miró, beso mis labios, tocó su nariz con la mía y miraba mis ojos de una manera única y especial tanto así que todo alrededor dejo de importar, solo me concentraba en ver sus ojos, sus hermosos ojos color cafés, y aquella sonrisa tan perfecta y hermosa, estaba perdida en su mirada y esa profundidad que ocultaba algo, una historia de un hombre con secretos profundos y aterradores, pero había algo más yo lo se, lo sentía.

Recuerdo que me miró a los ojos y me dijo:

-¡Bruja hermosa! -Y sonrió.
-¡Zombie guapo! -Respondí yo con otra sonrisa.

Eran nuestros dulces sobrenombres amorosos que nos decíamos, mi cabello era muy desordenado y literariamente aveces parecía una bruja, y él , siempre tenía una cara de sueño por el trabajo y la Universadad así que parecía un zombie cuando lo veía.

Al estar ahí congelados en esa postura viendo sus ojos y él los míos, paso mi autobús, y aparte la mirada y lo vi, vi como se iba y me abandonaba ahí sola con él. Sólo sonreí levanté mi mano y le dije adiós al autobús. Él sonrió burlosamente y me dijo:

-¡Tranquila! -Juro que le voy a pagar taxi para que llegue a su casa temprano.
- Mientras agarraba mi cintura.

-Pues eso espero Simón, ha sido su culpa que yo este aún aquí, ud solo dice bobadas y no me dice eso "tan importante" que tiene que decirme.
- Respondí yo mientras lo abrazaba.

-¡Bueno pues decirle bruja no es una bobada, al parecer es la verdad!
-Sonrió respondiendome.

-¡Bueno ya! Es hora de que ud señorito Murillo me diga que es lo que me tiene que decir, recuerde que en dos días comienzo a trabajar y pues, necesito dormir todo lo que pueda, después no podré dormir tarde.

-Lo siento si, estoy nervioso no suelo hacer este tipo de cosas pero bueno, aquí voy, ¿Le gustaría iniciar una relación conmigo?

-¡Simón! ¿Me está hablando enserio?

-¡No boba! Vea a la cámara escondida -Dijo con una expresión arrugando la cara muy gracioso.
-Es obvio que hablo enserio.

-Ok en mi defensa ud solo dice bobadas y hace bromas,así que aveces dudo de estas situaciones y estas preguntas suyas.
-Respondí yo mientras cruzaba mis brazos.

Me abrazo y dijo:

-Hablo enserio Yuli, no estoy jugando.

- Pues siendo así.
¡Sí! ¡Claro que sí! Me encantaría iniciar una relación con ud.
-No era tan difícil decirlo al parecer, la verdad estoy feliz, creo que, nos irá bien.

-Eso espero, no me gustaría perder el tiempo, ya bastante difícil fue decirlo.

-Lo noté, pero se que nos irá bien, siempre y cuando la relación siga sincera, fuerte, y con la comunicación que tenemos.

-¡Claro que si, hermosa!
-Me dijo mientras me besaba.
-Todo estará bien.

Ambos nos quedamos ahí mirándonos y sonriendo, reíamos de como todo sucedió, desde sus bobadas y sus nervios, hasta mi respuesta estúpida, y su broma de la cámara escondida.

Aún recuerdo ese día, abrazados mientras nos besabamos, en un mismo sentimiento de felicidad, por comenzar una nueva etapa de vida, llamada noviazgo.