Era en esos momentos donde deseaba volver a mi infancia, cuando te caías y te lastimabas las rodillas y llorabas por unos segundos, luego una dúlce voz (mamá) te levantaba limpiaba tus rodillas y te decía "no es nada, levantate campeona y sigue jugando, eres muy valiente" de pequeños nada nos ofende ni nos lastima, a esa edad se piensa en jugar ya que la mentalidad de un niño es muy inocente.Pero había crecido y la crueldad y maldad empezaron aparecer, duele aceptarlo pero así sucedia cada vez más y más, conforme iba creciendo era mas doloroso y mas difícil; pasamos años deseando crecer pero cuando crecemos deseamos volver a ser niños!! Volver a esa inocencia donde a la mayoría no nos tocaba la maldad... ¡Pero lastimosamente no se podía y había que aceptarlo!
Todo comenzó cuando ingresé a la escuela, muchos recuerdan esa etapa como la mejor y la mas linda! Pues yo no, enserio fue muy difícil para mí. Recuerdo que desde el primer grado de escuela sufría bullyng, eran todas las niñas de mi salón en mi contra, escuchaba a diario comentarios y ofensas como " eres fea, eres dientona, no queremos que juegues con nosotras, aléjate, nadie te quiere " y cosas similares, eso sucedío en la escuela, no se quieren imaginar lo que suceció en el colegio...
De niña mi padre y me madre trabajan, mis hermanos y yo quedabamos a cargo de nuestra hermana "mayor" se pueden imaginar ¿Que tan bien puede cuidar una niña de unos dieciséis años a otros niños de nueve, siete y cinco años? ¡Ah y sin olvidar a mi hermano especial, con dificultad al caminar, sentado todo el dia en una silla especial y un veinte por ciento de retraso mental tan solo tenía dieciocho años pero su mentalidad era la de un niño de cuatro años! Ahora comprendo todo, fue difícil cuidar a cuatro niños sola; aclaro que mis padres no fueron malos padres, simplemente en esos tiempos era muy complicada la situación y pues ambos tenian que trabajar.
Volviendo al tema de la escuela, mi hermana era la que me arreglaba y pues hacia lo mejor que podía, siempre me acomodaba el cabello igual todos los días, lo separaba en dos partes, luego lo amarraba y colocaba dos prensas, recuerdo un día al llegar a mi escuela, una de las maestras llamada Kelleny siempre pasaba me saludaba y me decía " que bonita vienes hoy" aunque yo sabía lo despeinada que me podía ver, pero me hacía sonreir con su hermoso comentario; una vez las niñas de mi escuela me pusieron un apodo, que por cierto ahora amo y me encanta, me llamaban "patito feo" admito que al principio que lo decían era doloroso, lloraba y me preguntaba ¿Porque son tan crueles, yo no me involucro con ellas, por que me molestan tanto? Claro, por que yo era una niña sola, que se sentaba sola, comía sola, jugaba sola, siempre sola, a diferencia de ellas que eran cuatro y todas estaban en mi contra, cada vez que hablaban sobre mí, dejaban una cicatriz en mi vida, una tras otra...
Ese día me encontró llorando la maestra Kelleny, y pregunto, que era lo que sucedía conmigo, yo le comente que estaba cansada y triste de que las niñas me molestaran tanto, y que me llamaran "patito feo" aún recuerdo cuando ella sonrió y me dijo: ¿Nunca has escuchado el cuento de " el patito feo"? A lo que gire mi cabeza negando que no lo había escuchado, ella sonrió aún mas y me dijo: "Al final de la historia el patito feo se convierte en un cisne, un hermoso cisne, no te preocupes que crecerás y cada día te verás más hermosa y ellas admiraran tu belleza, pero antes quiero regalarte algo."
Nos dirijimos a los salones de arriba donde se encontraba su escritorio, en uno de sus cajones ella saco un cepillo gris, salío, me lo entregó y dijo: ¡Guárdalo y ándalo siempre, te ayúdara cuando te despeines y quieras arreglar tu cabello, cuídalo!
Lo aunduve varios años hasta que lo perdí, lastimosamente fue así, pero me ayudó un poco, claro que eso no evitó que las niñas siguieran sus molestias, pero cambio un poco mi vida.Nunca olvidaré las cosas que hacía para obtener "amigas" siempre dejaba que me dieran ordenes y me trataran como una pequeña empleadita, por sentirme sola y no tener con quién jugar deje que esas cosas pasáran, habían momentos en los que llegaba llorando a casa y mi madre furiosa me decía que no me dejaría jugar más con ellas por que eran malas conmigo, después de un rato llegaban aquellas inocentes niñas a buscarme para jugar, y mi madre salía y les pegaba su buena regañada y les decía que tenían que disculparse conmigo primero, pero era inútil, su maltrato seguía y yo se lo ocultaba a mamá con tal de que ellas no se alejáran y yo no quedara sola de nuevo; eso fue un poco sobre mi infancia.
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Storie brevi"Es algo complicado de entender, sólo leyendo lo podrás comprender" "ESCRIBIR NO SOLO SE TRATA DE ABRIR UN CUADERNO Y PONERLE PALABRAS, ES UN SENTIMIENTO DE CREAR UNA VIDA FUERA DE ESTA" Kathy Zamora