¡¿Gaara...!? – unas lagrimas salieron de sus ojos, era la primera vez, que le veía llorar, se apartó de mí y me sonrió, mientras que en su alrededor se formó, como si fuera nieve que caía alrededor de él.
¿... que es esta... nieve de papel...? ¿De dónde... viene...? – le pregunte, pero el solo me beso otra vez...
Te quiero, Sai... - Esa nieve nos envolvió a los dos, mientras veia ante mí, como Gaara iba desapareciendo lentamente, se acercó a mí para besarme de nuevo, pero no llego a tocarme desapareció, dejando ante mi solo un pequeño muñeco de papel...
¿Qué había pasado? ¿Qué es...? – vi como Naruto corría donde estaba Sasuke, mientras yo solo cogía ese pequeño muñeco. Les vi se estaban besando, un dolor se formó en mi pecho, pero no porque ellos estuvieran besándose, si no porque recordé el mío con Gaara.
Sasuke se apoyó en sus brazos y me miro hacia donde estaba yo, levanto la mano. -¿¡Sai!? ¡CUIDADO...! - me gire y vi como ese hombre se lanzaba hacia mi cuello, aprisionándolo con sus grandes manos.
¡MALDITO CRIÓ, HE SALIDO HERIDO POR TÚ, CULPA! – yo solo lo miraba, intentaba respirar, no mostraba miedo y eso le enfurecía. – ¡QUÉ MIRAS CON ESA CARA, CRIAJO DE MIERDA!
Por... tu... culpa... - me miro confundido, mientras yo intentaba hablar. Le cogí los brazos con fuerza y ese hombre me miro furioso. – él...
¡Ha! ¿Es por ese maldito Kamisama? que crió más estúpido él ha hecho lo que tenía que hacer, protegerte. – le miro estaba con una sonrisa en la cara, una rabia se creó en mí y el manto de antes se formó de nuevo en mis pies y miles de agujas de formaron atravesando el cuerpo de ese hombre. –¡¿haaa...?! –grito, saliéndole sangre por la boca, nariz y ojos, mientras esas agujas lo sujetaban para que no cayera. Me libere de su agarre, le mire como si no valiera nada.
Sasuke llegó a mí, sorprendido. – ¿Estás bien? - mientras Naruto miraba él muñeco de mis manos.
¿Él ha vuelto a Hakushi? ¿No? – pregunto Naruto y yo le mire confundido.
¿Qué has dicho, Naruto? - le pregunte sabía que era, pero no podía comprenderlo.
¿Sai, eso significa que...? – comencé a negar con la cabeza, era imposible, ¿verdad? ¿Él no podía esta...? –Sai, será mejor vayamos a casa y hablemos con Kakashi. – me dijo Sasuke, pero yo solo podía pensar que lo que ellos decían, no podía ser verdad, él no podía a ver muerto...
Lleguemos a la casa y durante todo el trayecto, Sai estuvo callado mirando ese muñeco, todo el rato como si, así pudiera volverlo a la normalidad, pero como Kamisama que era, sabía que una vez llegado a ese estado. Solo había dos opciones una dejarlo descansar en paz o traerlo de vuelta, pero comenzaría desde cero, es decir, sin ningún recuerdo de su existencia anterior.
Iruka indicó que Kakashi en esos momentos estaba ocupado, con alguien que había venido a verle y nos dejo esperando en una habitación cercana, yo creo que Sai estaba en estado de shock.
Kakashi entró por la puerta y Sai le miró como se sentaba en un cojín delante de nosotros, se fijó en el muñeco que Sai llevaba en sus manos y nos miro a todos.
Lo siento, pero no puedo traerlo. – dijo serio y se preparó para levantarse, cuando Sai le sujetó.
Como que no puedes, eres el marionetista puedes traer a cualquiera que esté ahí abajo, por tanto, puedes traer a Gaara. – Kakashi le miró sin ninguna expresión y se soltó de su agarre.
Más que no poder, lo prometí no traerlo. – dijo Kakashi muy serio, Sai le echo un vistazo sin entender a que se refería. – Gaara tenía previsto volver a Hakushi por su propia voluntad y además su remplazo ya está casi terminado.
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Mi Kamisama
FanfictionSasuke va a cumplí su 17 cumpleaños lo que no sabe, es que los miembros de su familia al cumplir esa edad tiende a sufrir cambios y se le da el poder del Kotodama (言霊,"espíritu de las palabras") y un ser llamado Kamisama (紙さま," señor...