Epílogo

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"Todo el país está de duelo a causa de los atentados producidos el jueves 11 de marzo..."

"(...)comenzó a las 7.20 horas del 11 de marzo de 2004. A esa hora estallaron 10 bombas en cuatro trenes. Murieron 191 personas y hubo 1.700 heridos."

"Fue uno de los días más negros de la historia. Muchas personas fallecieron este 11 de marzo como consecuencia de la barbarie terrorista. En la jornada siguiente, miles de personas salieron a la calle, pese a la intensa lluvia, para mostrar su condena a los atentados. Fue una de las protestas más multitudinarias que ha habido en el país..."


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- ¿Cuál es tu nombre? - pregunta el moreno al sentarse junto al chico de cabello negro, quien como siempre escribía en su diario.

Él levanta la cabeza y lo mira, Vic no puede evitar quedar atrapado por la exótica belleza de esos ojos grandes que el pelinegro tenia.

- Kellin.

Su voz era suave y delicada, más hermosa de como se la había imaginado.

- Soy Vic.

- Lo sé.

Kellin se sonroja inmediatamente después de que las palabras se escapen de su boca.

Primero su voz no quería cooperar y ahora habla demasiado.
Teme que Vic crea que fuera un loco o algo.

Pero en su lugar, Vic solo sonríe.

Kellin baja la cabeza, evita por vergüenza ver aquellos bellos ojos que le encantaban, para ocultar su sonrojo.

De momento a otro, el silencio los atrapa. Vic nota la mano de kellin sobre el asiento, muy cerca de la suya y sin pensarlo dos veces la mueve con ligereza hasta que ambas se tocan. Teme que Kellin aparte su mano, pero es él quien mueve su mano para entrelazar sus dedos con los de Vic.

Y ambos lo sienten, como si sus manos se complementan tal como dos piezas de puzzle hechas la una para la otra.

Un túnel se acerca y cuando los cubre por completo, brindándole oscuridad, Kellin alza su rostro y utiliza su mano libre para encontrar el rostro se Vic y con aquella valentía que lo domina por un momento une sus labios con los de el moreno, quien no duda un segundo en corresponderle, mientras acaricia la suave mejilla de kellin con delicadeza en un acto de piel cariño, sintiéndolo. Ambos se sienten el uno con el otro, se demuestran demasiado sin necesidad de palabras como fue siempre, una relación llena de sentimientos y carente de palabras.

Y el universo es suyo, flotan rodeados de estrellas sintiendo la lluvia en el espacio exterior y aman mientras se entregan, los últimos soplidos de sus corazones.

Antes de que la oscuridad los tome por completo.

Train [kellic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora