Desperté solo en el hospital, se me hizo raro que Kary no estuviera conmigo. No sabía cuánto tiempo había pasado, yo lo sentí como sólo unas pocas horas, lo último que recordaba era ver a Ángel cargándole hacia la camioneta.
"Mi amor por fin despertaste!"
"Mamá, donde esta Kary?"
Nada, no recibí respuesta, eso me puso muy mal, quería saber donde estaba, quería verla.
"Mamá, dime."
"Cariño, es algo complicado."
"Dime."
"La secuestraron."
Miedo, impotencia, coraje, preocupación, todo se me vino encima estaba sola en alguna parte de la ciudad sin mi, sabía que había sido el hijo de puta de Brandon, ese carbón me las pagaria.
"Háblale a Angel."
"Si, Axel no te pongas mal, la están buscando."
"Pues están haciendo mal su trabajo porque aquí no la veo."
Ya había pasado una semana, no sabía nada de Axel ni de Ángel, moría de miedo, no sabía cuando llegaría Brandon, me había violado dos veces, no quería que Axel supiera, ya no me sentía lo suficiente para el.
"Buenos días."
"Hola."
"Porque tan seca?"
"Quiero irme de aquí ya."
"Te ayudaré a salir de aquí."
Acabo la frase y me cargo, salimos del cuarto en el que me tenían, todos querían saber a donde me llevaba, el solo decía que me violaría llegamos a una camioneta me tapó los ojos y empezó a manejar, iba a amarrada pero por fin había salido de ahí, cuando por fin se detuvo la camioneta escuche que se abrió la puerta y después frío, el sonido del carro yéndose, no tenía idea de donde estaba. Escuchaba agua a lo lejos, llanto, pelea, lo único que pude hacer fue gritar, todo quedo en silencio solo se oían mis gritos, poco tiempo después estaba en brazos de alguien.
Tenía qué llevarla al hospital, Axel aún no sabía que la teníamos, el tenía que saberlo tengo que tranquilizarlo, llegamos en veinte minutos al hospital, ella seguía sin hablar ni moverse. no quiero ni pensar que tanto le hicieron, ella no merecía eso, ella jamás tendría que haber terminado en esa situación.
"Hey, chaparra, vamos a que veas a Axel.
"Que? No, no me puede ver así."
"Necesita verte."
Me baje de la camioneta, estaba tan débil no podía caminar sola, Ángel me ayudo a subir al cuarto en donde estaba Axel. Llegamos y le pedí a todos que nos dejarán solos, tenía que decirle.
"Mi amor estás bien!"
"Si."
"Ven, déjame abrazarte preciosa!"
No se movió sólo veía las lágrimas salir de sus ojos mi niña! Ese maldito me las pagaría y muy caro!
"No pequeña no llores, todo va a estar bien, ven por favor te necesito entre mis brazos."
"No, Axel ya no soy suficiente para ti."
"Porque dices eso?"
"Me violo! me violo dos veces Axel, ya no soy suficiente para ti."
Ese maldito hijo de puta va a morir! Como se atrevió a tocar a mi mujer, a mi niña morirá.
"No digas eso pequeña, ven aquí"
"Mi amor! Tenía mucho miedo! Pensé que jamás nos volveríamos a ver!"
"Shh ya paso chiquita ya paso, estamos juntos, estoy contigo y eso nadie lo cambia."
"Te amo."
"Te amo mi niña."
Se quedo dormida en mis brazos, me sentía tan impotente la hizo sufrir y yo no pude evitarlo pero eso hijo de puta oirá de mi me las va a pagar, de eso me encargo yo. Despertó tres horas después, se veía hermosa recién levantada.
"Hola pequeña."
"Ay mi amor lo siento me quede dormida aquí."
"No importa, te ves hermosa sabías?"
"Me encantas. Amor le diré a Ángel que me lleve a casa si? Quiero cambiarme."
"Sí preciosa ya en unas horas salgo de aquí y te veo en la casa."
"Esta bien mi amor allá te espero."
Lo bese, extrañaba demasiado sus labios. Nos fuimos directo a la casa, me cambie, me bañe y me puse la pijama. Moría de sueño le avise a Ángel que dormiría y le dije que el también descansara se veía muy cansado. Cuando desperté Axel estaba a mi lado viendo tele, me voltee hacia el y lo abrace.
"Me hacías falta en la cama amor."
"Lo se princesa tu a mi también."
"Te amo, te amo y jamás lo dejare de hacer, sin importar lo que pase."
"Yo tampoco lo dejare de hacer mi reina. Necesito ir al trabajo preciosa."
"Ya tan pronto? Acabas de salir del hospital."
"Lo sé pero me necesitan allá."
"Esta bien pero vuelve rápido por favor."
"Sí preciosa no te preocupes."
Salí de la casa en busca de aquel cabron que la hizo sufrir. No me tarde en encontrarlo, me vio y no le di tiempo ni de hablar, saqué la pistola y le disparé, justo en el corazón, me di la media vuelta, subí al coche y me largue.
"Que se muera el cabron."
"Mi amor ya llegue."
"Menos de tres horas amor, es récord."
"Te prometí volver pronto."
"Lo se, mi amor no se qué tengo, no se me quita el sueño."
"Dormiste algo en lo que estabas....con el?"
"Muy poco."
"Por eso tienes tanto sueño, ve duerme chaparra, me sirvo agua y voy."
"Si mi amor."
"Oye por cierto te ves tan linda modorra."
"Haha calla barbero."
"Hola chiquito."
"No empieces Brenda."
"Ay pero me hiciste tanta falta."
"Quitate."
"La bata? Mm bueno."
"No! Brenda no!"
Estaba totalmente desnuda debajo de la bata.
"Pierdes tu tiempo Brenda."
"Que? No te gusta lo que ves?"
"No. Con permiso."
Lo agarre del brazo y lo besé, intento quitarme y moví su mano a mi culo.
"Brenda! Te dije que no, quitate!
"Vas a ser mío Court, quieras o no."
"Pff."
La vi y me calme, mi princesa, tan en paz, tan hermosa, tan mía. Como la amo, es perfecta. Me acerque a ella y la bese, la desperté.
"Perdón preciosa, no quería despertarte."
"No, no pares."
Seguí besándola y ella me metió debajo de las sábanas con ella, el beso se ponía cada ves más intenso, su lengua reclamando la mia, mis manos reclamando su cuerpo, llenándolo de caricias, de besos. Mierda como me calentaba mi mujer, metió sus manos debajo de mi camisa, acariciaba mi espalda y yo recorría sus muslos despacio provocándole jadeos. Cuando por fin toqué su parte íntima ella arqueó la espalda gimiendo de placer, amaba verla tan encendida, dejándose llevar por el placer que le provocaba. Seguí acariciando su intimidad, sus gemidos se hacían más fuertes sentía que se ponía cada ves más caliente a través de su ropa interior, hice esa pequeña pieza de ropa a un lado y me encantó lo que vi, era mi mujer totalmente entregada a mi, lista para mi, dejándose llenar por mis dedos, moví mis dedos dejándola vacía para quitarle lentamente la ropa. Me llene de sus pechos, los bese, los mordí, los lamia, provocándole gemidos tan ricos.
"Axel hazme tuya ya! Si sigues jugando así conmigo me vas a volver loca de tanto placer."
"Segura?"
"Si, te quiero sentir dentro de mi."
Me puse en medio de sus piernas, acaricie su intimidad de nuevo, siempre tan lista, tan mojada, perfecta. Le besé el cuello y lentamente la hice mía.
"Axel!! Mm Axel!!! Mm no pares!"
"No lo haré preciosa."
Sus uñas rasguñando mi espalda, sus gemidos, sus orgasmos, que mujer tan más perfecta. Empezó a gritar y rasguño más fuerte mi espalda cuando nos llegó el orgasmo. La amaba, era mía y eso nadie lo cambiaba.
"Otra ves."
"Lo que tu digas princesa."
Volví a besarla.
"Pero ahora un poco diferente."
"Dime como."
Se levantó movió las almohadas y se puso a gatas.
"Así. Te quiero aquí."
"Mm con gusto."
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Mis amores!! Volví, espero que les gusté el giro sexual que di, les gusta? Díganme lo que piensan y si quieren que siga con eso. Subiré más seguido lo juro! Los amo :*
Kary

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Enamorada del narco
RomanceVolvieron sus dos personas favoritas, que irá a pasar entre ellos?