We spent our darkest days howling at the moon // Thorki

Tres

Cuando Thor va a trabajar, no sabe qué es lo que Loki hace. Nunca sabe qué es lo que Loki hace, la mitad del tiempo no puede imaginar ni siquiera en qué está pensando. Loki desaparece por días enteros, a veces por semanas, y aparece de nuevo como una tormenta de nieve: directamente sobre ti e ineludible. Thor siente un innegable bulto en el pecho cada vez que Loki regresa.

Trabaja en un café en la ciudad. La luz siempre es tenue ahí, el olor a café orgánico es fuerte. Todo Hipster en Seattle va ahí para pasar el rato. Hay una tienda de discos arriba y Thor puede escuchar el sonido de Gregory and the Hawk a través de las ventanas. En un momento dado, el café queda casi completamente vacío. Hoy está vacío.

"Escuché que Loki está de vuelta en la ciudad" dice Sif, encontrando a Thor en la cocina.

"Sí," dice Thor, sonriendo, "Volvió ayer en la noche."

"También escuché que ambos se bebieron el cuñete de Fandral solos. "

Thor se ríe.

"Hicimos hincapié en ello."

Sif sacude la cabeza y continúa hacia los hornos. Tiene chocolate caliente en todo su uniforme, cortesía de las torpes manos de Thor.

"¿Esta vez se quedará?" pregunta ella.

"Eso pienso."

"Bien," dice ella "Porque siempre eres miserable cuando él se va."

"No lo soy." Dice Thor.

"Sí que lo eres. Actúas como un perrito al que acaban de patear. Me hace querer golpearlo en su lindo rostro."

"No actúo como un perrito." Sus brazos están cruzados, se da cuenta de que debe lucir como un niño malcriado en esa posición, pero no le importa.

"Uh hu. " dice Sif. "¿A dónde fue Loki esta vez?"

"No lo sé," responde "No pregunté." Él nunca pregunta, incluso aunque en serio quiere saber. Espera por Loki, siempre espera por Loki, mantiene su celular cerca hasta que Loki le llama del aeropuerto. O de la estación de autobuses. O de la estación de tren. Thor siempre va por él y lo lleva de vuelta al departamento y ellos actúan como si nada hubiese sucedido. No pregunta a dónde va Loki y Loki no se lo cuenta, Thor no le dice que eso lo mata, lo hace sentir que sólo está esperando por el día en que Loki se marche de nuevo.

Sif frunce el ceño. "¿De verdad? ¿Al menos te compró algo genial?"

"Loki no es de los que dan regalos."

Ambos escuchan el crujir de la puerta principal del café abriéndose.

"Yo iré," dice Sif. "¿Terminas de limpiar el microondas?"

"Está bien."