La sorpresa

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Pasando los días se me ocurrió perseguirla para que habláramos. Pero me llevo una sorpresa, esa chica rara, e invisible del instituto tenías vicios, a los que les llamaría cigarrillo y alcohol. -Me vio espiándola, juro que entré en pánico al instante.

-¡Hey! ¿Qué pretendes James Blackwell? -A la vista se notaba algo borracha, porque se tambaleaba de lado a lado pero disimulando que lo estaba.

-Yo... Yo sólo pasaba por aquí y te encuentro aquí, ha sido una casualidad absoluta. -Mi voz temblaba, y ni yo me creía esa gran mentirota, así que menos se la iba a creer ella.

-¿Ah sí? La verdad no creo que sea necesario que me mientas en mi propia cara, ¿Me estaba s persiguiendo, verdad? Ni yo sé para qué pregunto, cuando ya sé la verdad... ¿Qué pretendes James Blackwell?

-No pretendo nada malo, pero... ¿Tú qué pretendes al alejarte cada vez más de mí? -Se me le acerqué lentamente. -Pude mirar por primera vez sus ojos, reflejaban oscuridad a simple vista.

-Si me alejo de ti es por defensa propia. -Sonrió repentinamente cerrando sus ojos.

-¿Defensa propia?, ¿A qué te refieres con defensa propia? Si cada vez que me acercó a ti por buenas intenciones sólo recibo rechazo de tu parte. Me pregunto si me odias, porque me da la impresión de que sí. -La miré fijamente a los ojos.

-Sí, defensa propia, por tu culpa estos últimos días he sido una insegura por tu culpa, por ti, por tu curiosidad que me altera, que desordena mi mente, simplemente pienso de ti James Blackwell, es que eres un imbécil. -Dijo sollozando.

-Siempre supe que eras hostil, pero nunca tanto, ¿Si te robo un beso en este momento qué harías?

-Mi bofetada no te la despegaría nadie cariño, pero no tiene sentido seguir hablando contigo de algo así, me despido, adiós. -Tomó sus cosas y se fue.

-No entiendo tu actitud de una niña pequeña. -Le grité cuando ya iba a 1 cuadra adelante que mío.

-¡Oh, que bueno! -Respondió entre carcajadas.

Veo que disfruta al hacerme sufrir pensé en ese momento, espero que llegue bien a su casa suerte... Suerte Meg Johnson

Mi ángel oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora