Emily: Soy Tu Nueva Niñera

Capítulo 6: Grito desgarrador

Jacob escuchó el disparo y rápidamente bajó al cuarto donde estaba Emily y Ashley. Cuando llegó, vio a Ashley atada en la silla, sin ojos y con un disparo en el agujero del ojo derecho, éste se acercó a ella.

-No no no no, perdón hermanita, perdón por no haberte ayudado- Dijo Jacob sin poder hablar bien, le subió un nudo por la garganta que le impedía poder hablar, rompió en llanto, no veía por ningún lado a Emily ni a Christopher.

-¡Mataste a mi hermana!, ¡Perra estúpida!- Gritó Jacob.

Después de que él dijo eso, Emily apareció por atrás y lo sujetó muy fuerte, le pegó en la cabeza hasta dejarlo inconsciente.

Luego de unos minutos, Jacob despertó y estaba atado de ambas piernas y ambos brazos en una mesa. Emily tenía objetos cortantes y de punta en la mesa (cuchillos, cartonera, clavos, destornilladores, etc.).

-¿Me dijiste perra estúpida?- Preguntó Emily muy sádicamente.
-¡Si!, ¡mataste a mi hermana!, ¡¿Donde está Christopher?!- Gritaba el chico.
-En mi auto, me lo llevaré a casa, pero antes tengo que deshacerme de la peste, osea tú- Dijo Emily.
-¡No te saldrás con la tuya!- Gritó Jacob.
-Pues ya lo hice- Respondió la joven- Veamos que tenemos aquí.

Emily sacó un cuchillo muy grande.

-¿Este te gusta?- Preguntó Emily a Jacob.
-Jódete.

Emily empezó a cortarle la polera al niño y le bajó los pantalones junto con el calzón.

-¿Sabes para qué se usa eso?- Preguntó la joven, refiriéndose al pene del niño.
-No- Respondió muy asustado.
-Lástima que nunca sabrás, que pena- Dijo Emily.

Puso el cuchillo en el glande del niño y poco a poco empezó a enterrarlo, el joven gritaba muy desesperadamente, le sangraba mucho.

-¡Me obligan a hacer esto! Solo quiero a tu hermano, pero no puedo dejar testigos- Dijo Emily.

Sacó el cuchillo y lo puso en el ombligo y comenzó a cortarle desde ahí hasta el pecho.

-¡Detente por favor!- Gritó desgarradamente el niño.
-Tus súplicas no sirven de nada niño- Dijo la niñera.

Le enterró el cuchillo en el estómago hasta matarlo, comenzó a sangrar por la boca y luego le sacó las vísceras y las botó al suelo.

Los padres de los niños ya estaban a 10 kilómetros.
Emily se lavó las manos y subió a su auto, allí estaba Christopher.

-Muy bien Christopher, ahora vamos a dar un paseo, tus hermanos están dormidos- Dijo con un tono agitado.