"El Crimen Perfecto"

Capitulo 3. "El reencuentro"

El frio helaba como era esperarse en una noche de noviembre, el aire helado hacia que mis ojos se enrojecieran y mi cara se congelara poco a poco

Caminaba.....paso tras paso sin rumbo alguno, tenia la mirada fija en el suelo y mi mente divagaba entre mi pasado, solo veia mis Converse y mis pantalos desgarrados de las rodillas, solo caminaba..... Hasta que levante la vista y me di cuenta donde estaba.

Inconscientemente llegue justo al parque donde caminaba con mi padre aquella noche.... La noche en que murio asesinado.

Me frene de golpe y todos esos recuerdos llegaron a mi cabeza.

Podia jurar que veia a mi padre caminando cargandome entre sus hombros con una gran sonrisa en su rostro y caminando hacia nuestro hogar, podia ver lo feliz que era de pequeño, sin temor alguno y con la inocencia que caracteriza a un niño...... Y ahora....con un gran odio en mi corazon, con pena en mi alma, la unica razon de vivir era para matar...... Me había convertido en un monstruo, poco a poco se fue desvaneciendo las silueta mia y de mi padre.

Quede en medio del parque observando como se esfumabam mis recuerdos cuando de pronto....
A lo lejos escuche el rugir de un auto acercándose hacia mi. Rápidamente me escondi atras de unos arbustos que se encontraban ahi en el parque.

Se acerco rápidamente, era un carro Mustang modelo 69 color negro brillante y con unas franjas blancas que cubrian desde el cofre hasta la cajuela. Sus vidrios estaban totalmente polarizados, era imposible poder observar quien lo conducía.

De pronto se escucha el "clic" de la puerta del piloto que se abria lentamente.

Estaba paralizado, agache la cabeza para que no pudieran verme. Podia mirar solo un poco entre las ramas de los arbustos.

Salio un hombre del carro....Era alto traia una sudadera sin mangas, como si las bajas temperaturas no fueran un problema para él.
Cerro la puerta del Mustang y otros dos hombres más se bajaron de aquel carro, ambos vestian con unas camisas de manga larga color negro y uno de ellos llevaba un chaleco de mezclilla, los tres tenian algo en común: Todos llevaban unos guantes de piel..... Como si fuesen a cometer un crimen y no quisieran dejar evidencia alguna.

Eso me puso los nervios de punta.

Podía ver lo que llevaban puesto de ropa, sin embargo no lograba observar sus rostros.
Los tres se dirigieron hacia la cajuela, el tipo que traia la sudadera sin mangas coloco las llaves sobre la herradura de la cajuela, pero antes de abrirla solto una mirada a los otros dos hombres, estos observaron hacia todos lados y asintieron con la cabeza.

No habia una sola alma en aquel lugar, solo aquellos tres tipos y yo.
Dio vuelta a la llave y abrio la cajuela.
Sacaron a un hombre que venia atado de pies y manos y con una capucha sobre la cabeza, lo dejaron caer de golpe sobre el pavimento y quitaron la capucha de su rostro.

-Te lo adverti Dave, te lo adverti-. El hombre que habia abierto la cajuela le dio una patada justo en el rostro del hombre que estaba amagado.

-Perdón Rex pero entiendeme la policia estaba tras de mi yo ya no podia hacer nada, estaba entre la espada y la pared amigo!-. Decia aquel hombre llorando y escupiendo sangre de la boca.

Rex........ Me quede pensando, porque me era tan familiar ese nombre.

-Amigo!? Me acabas de llamar "amigo"!!? Oigan chicos esté imbecil me llamo amigo a mi?- Decia en tono de burla.- Si, pues los amigos no traicionan como tu lo haz hecho conmigo-. Alzo la voz y se acerco hacia su victima.
-No te traicione Rex pero las cosas se pusieron dificiles era delatarte o que me metieran a la carcel-. En su voz se podia sentir que estaba atemorizado, quien sea que fuese aquel hombre era de temerse.

-Asi que preferiste delatarme a ir a la carcel verdad?
-S..si...si si eso fue lo que hize-. Tartamudeaba a causa del miedo.
-Okey....entonces no iras a la carcel....pero te espara algo peor-. Saco su pistola y apunto hacia su cabeza.
-La traicion tiene su precio Dave... el precio de tu traicion sera tu muerte-. Quito el seguro del arma y corto cartucho.

Reaccione. Rápidamente me levante de aquellos arbustos para echarme a correr pero algo me detuvo...... Pude ver sus rostros perfectamente. Ahora todo estaba claro....El hombre que apuntaba con la pistola, era alto, no tenía cabello y.....tenia la misma calavera......la misma calavera que el asesino que mato a mi padre....

-No por favor Rex no me mates hare lo que sea por ti, te lo juro Rex-. Decia aquel hombre llorando.

Rex..... El nombre, la calavera, la maldita misma cara. Estaba todo claro.......estaba enfrente del asesino de mi padre....