Capitulo 04

1.3K 68 21
                                    

He estado caminado de un lado a otro todo el día; tengo que buscar la manera de salir de aquí pero se me es imposible; tengo dos gorilas armados observando todo lo que hago, pero por lo menos no estoy con una mordaza.

-Hola soy Beatriz.-dice una muchacha como de mi edad y esta acaba de entrar con una bandeja con comida.Es rubia y ojos claros- el señor Alan ha enviado comida.-dice.

-No quiero, sólo quiero una cosa y es irme a casa, el cabrón ese si va matarme que me mate, ese maldito idiota.-digo exasperada.

-Niña es mejor que te acostumbre te tendrá aquí hasta que quiera.-dice para luego retirarse pero deja la bandeja encima de una mesa y algo de ropa la cual no vi de donde la saco.

(...)

Han pasado varios días y ya he perdido la noción del tiempo me han dicho que puedo bajar al jardín pero no quiero, no he vuelto a ver al idiota de mi captor durante todos estos días.

-Hola niña berrinchuda, adivina quien está al teléfono.-dice entrando a la habitación siendo él, frío y sarcásticojuro que no he visto a un hombre más frío que él,definitivamente no tiene corazón.

-¿Me has visto cara de adivina o qué?.- digo y el sonríe de lado pero trata de ocultarlo con su dedo índice.

-Mira mocosa a mi no me hablas así sino quieres pagar la consecuencias o no te dije ya que con un chasquido de dedos ya estarías muerta mejor toma el teléfono y respóndele a tus padres.-dice con el tono más intimidante que he escuchado en mi vida y me pasa el celular.

- Papá.-digo con lágrimas en los ojos.

-Hija te sacaré de ahí, ya veras que pronto estarás con nosotros.-dice mi padre.

-Papá te quiero; no me olviden.-digo pero cuando iba a seguir Alan me quita el móvil.

-Ya he cumplido, ella está bien soy un hombre de palabra hasta pronto.-dice y cierra.-Hoy cenas conmigo.

-No quiero.-gruño.

-No te pregunté, cenarás conmigo y punto.-dice.

-Si señor.-digo con temor este hombre sí que me intimida, su móvil suena.

-Si diga...Claro el negocio está cada vez mejor...Nos vemos mañana y cerramos el trato.... Les conviene no te preocupes...Hasta mañana.-dice pero no logro escuchar lo que dice la otra línea.

-Ja negocios llaman negocios a vender drogas y arruinarle la vida a miles de personas.-digo(yo y mi bocota, mi boca será mi perdición).

-Soy un hombre de negocios.-dice muy calmado y luego cierra la puerta de un portazo.

Estoy en la cama en aquellas cuatro paredes que son lo único que he visto durante días me hace tanta falta mi vida, mi familia, mis amigas, mi novio.

No sé porque Alan Noker tuvo que aparecer en mi vida y arruinarla por completo.¡Qué he hecho yo para merecer esto!.

-Hola Vali.-dice Beatriz la cual se ha convertido en una amiga para mí en estos dias, ella es muy tierna y amable ni sé cómo lo soporta.- Esto lo manda Alan.-me muestra un vestido hermoso.

-Yo no me pondré eso no quiero nada de él.-digo
.
-Valentina obedece no quieras conocer al monstruo que habita dentro del señor Alan aunque mi madre dice que el es un hombre bueno yo todavía no he visto una pizca de esa bondad.-dice

-Ese monstruo ya lo conozco.-digo con ira.

-Créeme que no es así, no te arriesgues a conocerlo y haz lo que te pide.-dice.

-Esta bien Beatriz,tú ganas.-me rindo.

-Ahora cámbiate y prepárate que es casi la hora de la cena.-dice.-Los monigotes de afuera bajaran contigo.-ambas sonreímos.

Pongo el vestido en la cama y entro al baño a ducharme.

Pov Alan.

Me he echado un problema encima al tener esa niña aquí ¿En qué estaba pensando cuando la traje? No puedo permitir que mis impulsos me manejen, la pudiera matar pero gracias a ella soy quien soy, soy ese hombre de negocios aunque ella no lo recuerde, es mejor que me prepare y vaya hasta la mesa ya es hora de cenar y me he pedido que la escuincla cene conmigo.

Bajo y ya la mesa está puesta Beatriz la hija de Verónica la mujer que siempre me ha cuidado aunque no lo necesito yo no le temo a nada.

Mi lema es matar sin mirar a quien, matar porque es necesario en este mundo,matar sin remordimientos ni culpa, simplemente hacerlo aunque normalmente mis hombres son quienes lo hacen pero no me tiembla la mano si es necesario.

Me siento en la mesa y espero que la mocosa de Valentina baje, mi móvil suena.

-Si George.-digo el ahora ocupa también el lugar de Richy el hombre que mató el estúpido del novio de Valetina. George siempre ha estado ahí para mi. Pero yo no confío en nadie.

-Señor, los submarinos están listos toda la mercancía están dentro también la constructora es cada vez más grande.-dice, si el también se encarga de la pantalla para evitar investigaciones.

-Bien pues salen en la madrugada y punto ahora bye hablamos mañana de otros negocios.-digo y cuelgo y justo en ese momento baja Valentina las escaleras.

Se ve hermosa; aunque me mira con un odio penetrante,pero no me importa, a mi nadie me ha querido y no necesito que alguien lo haga.

-Hola.-digo con mi típico tono frío.

-Hola Noker.-dice escupiéndolo con odio.

-Bien mocosa es hora de cenar que lo disfrutes y no digas nada de lo que te puedas arrepentir.-digo seco y frío

La frialdad es parte de mí.

La cena transcurrió normal ella no había dicho palabra alguna, ambos empezamos a ligar bebidas lo que no es bueno, ni siquiera para mi que estoy acostumbrado a la bebida.

-Javier y Joker yo llevaré a la mocosa hasta la habitación y ustedes se quedan en el lugar de siempre.-digo en forma de orden.

-Yo puedo ir sola.-dice irritada.

-Si pero aquí mando yo niña caprichosa.-digo y la tomo del brazo para guiarla hasta la habitación.

-Suéltame.-dice mientras hace fuerzas para zafarse pero no lo logra.

-Hemos llegado a tu habitación.-digo y la miro de arriba a bajo no puedo negar que deseo a la caprichosa.

-¿Qué me vas hacer?.-dice y puedo notar el temor en su voz, sonrío malicioso y me acerco a ella le pasó mi dedo índice por sus labios y pude notar el deseo en sus gestos.

-Se que te encantaría pero no acostumbro a violar mujeres, sobrán quienes quieren mi pene en su entre pierna.-digo para luego alejarme y cerrar la puerta.

-Eres un idiota, un patán, te odio.-la escucho gritar.

Voy a mi habitación me ducho y pongo pijama para luego tratar de dormir y lo hago.

-Papi no le hagas daño a mi mami.-digo.

-No te metas bicho raro sino quieres que te pegue también además tienes que aprender hacer un hombre.-dice para luego seguir golpeándola.-Y tú eres una zorra.-se refiere a mi madre.

-¡Noo!.-Y despierto esas pesadillas nunca me van a dejar en paz....

🙈🙈🙈 Aceptó sugerencias gracias por leer, hasta el próximo capítulo voten,comenten 😘😘😳😳😳.

¿Qué piensan, les está gustando?.

Dedicaré el próximo capítulo a quienes comenten 🙈🙈.

El chico que nunca esperé © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora