Miguel:
Estaba tumbado en mi cama, me desperté antes de que sonara la alarma por los ronquidos de cheeto, ir de fiesta el día de ayer no fue la mejor idea pero vamos, de igual forma me divertí mucho.
Algo me decía que hoy iba a ser el mejor día de mi vida, por lo que después de varios minutos decidí levantarme y me dirigí al baño a hacer lo que toda persona, no tarde mucho, en diez minutos ya estaba listo y claro... cheeto seguía tumbado en cama como si nada.
me quede durante unos segundos pensando si hacerlo o no.
-¡Despierta gilipollas! llegamos tarde- mentí mientras le tiraba el agua por encima
-¡¿Que coño haces, Mangel?!-dijo mirándome desafiante
-Despertándote para no llegar tarde al puñetero instituto ¿No es obvio?
Después de eso, salí de la habitación y le grite que se vistiera, porque de lo contrario no lo iba a hacer.
*****
Por fin llegamos al instituto, era un día normal como siempre, me encontraba caminando por el pasillo en busca de mi casillero para sacar mis libros, estaba totalmente perdido en mis pensamientos cuando choque con un chico alto de ojos verdes
puedo asegurar que son los más hermosos que vi en toda mi vida.
Le pregunté si necesitaba ayuda y si era nuevo en el instituto
Él solo me dijo que no encontraba su salón
Le pregunté como era su nombre y me dijo que Rubén
Su nombre es igual de bonito que el
Lo acompañe hasta a su salón y el solo me dedico una sonrisa
joder... con esa sonrisa le haces un gran favor al mundo.
El timbre sonó, retumbado los oídos de todos los alumnos, es hora de entrar a clases.
espero verte pronto Rubén...
***
La clase fue más aburrida de lo normal, a pesar de los chistes de cheeto fue muy aburrido. El señor Patrick solo hablaba y hablaba de historia sobre ancianos y guerras, agh muy aburrido.
La verdad no le preste atención en toda la clase, tenía mejores cosas que pensar.
«Necesitaba saber más de él.»
El timbre sonó anunciando el descanso para el almuerzo, me levanté de golpe en medio de la clase a pesar de que todos continuaban sentados. No me importó, tomé mis cosas y salí apresurado de la clase, necesitaba hablar con Rubén.
Mientras avanzaba rápidamente por el pasillo, mi velocidad fue disminuyendo, el miedo me estaba consumiendo.
-¡Mangel!- escucho una voz lejos de mi, logro reconocer esa voz.- ¿A donde coño te vas tío? has salido disparando del salón.
-A ningún lado cheeto... solo quería conseguir lugar en la cafetería ya sabes, se llena muy rápido y las filas son interminables- mentí.
Me dirigí a la cafetería y tome una bandeja colocando lo mismo de siempre, sándwich, jugo y una manzana.
Sali de la fila y me dirigí a la mesa donde estaban mis amigos, todo estaba tranquilo hasta que mi corazón parecía salirse de mí cuando vi a un chico de ojos verdes sentado en una mesa sin compañía, sostenía un papel en su mano y lo miraba fijamente, parecía que estuviese tratando de ver algo más allá del papel, algo oculto.
La curiosidad recorrió todo mi cuerpo.
-Hey, crees que pueda sentarme aquí?-sonreí
-Como quieras...
-Bueno apenas se t-tu nombre...- joder, debo dejar de tartamudear.
Él rió, notaba la diversión en aquella sonrisa
-En realidad, yo tampoco te conozco.
Vi su expresión y por primera vez me detuve en fijarme cómo era su rostro.
Tenía una nariz entre recta y respingada, de un tamaño que se veía bien en su rostro. Su labio superior era fino a comparación con el inferior que era carnoso y de color un poco más oscuro.
Sus pómulos levantados le daba una forma extravagante a su rostro. El color y brillo de sus ojos podrían enloquecer a cualquiera... incluso llegarla a enamorar.-¿Puedo preguntarte algo?
- ¿Qué?- preguntó confundido
Suspire, mientras me pasaba una mano por el cabello desordenándolo todo.
- Es que en tus ojos logro ver miedo y inseguridad ¿Por qué?
-Vete, a-aléjate de mi - comenzó a susurrar desesperadamente
-Tranquilo... solo fue una pregunta de curiosidad
-Ellos me lo dijeron, n-no puedo...
- ¿Ellos?
-S-si, que solo me tuviste pena y por eso estas aquí
Lo mire realmente extrañado, sonreí de lado negando rotundamente con la cabeza
-No te tuve pena, te vi y me dije que debía ayudarte ¿Eso es tenerle pena a alguien? claro que no, tal vez es difícil porque es tu primer día pero estoy aquí porque quiero conocerte... me gustaría saber mas de ti Rubén
Rubén, por su parte, estaba blanco y respiraba nervioso ¿La abría herido su pregunta?
Él solo me miró a los ojos, sonrió ligeramente con algunas lagrimas en los ojos y se volteó para irse.
Lo ultimo que vi de él fue como su figura se perdía en la multitud.
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Hola aaa, al fin la segunda parte desde el punto de vista de Mangel!!1 espero que les guste y gracias por los bonitos comentarios, amarlos<3 en fin, los días que voy a actualizar son probablemente los findes de semana but no quiero confirmar nada.
Más adelante se viene el salseo mm no quiero decir nada pero 🗿🗿
<3
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Trust Me | Rubelangel
Fanfiction«Ellos dicen que me harás daño Mangel... no puedo confiar en ti»