Capítulo 5

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  Todas las cosas que quedaron en el pasado es porque no merecían estar entre tus cosas del futuro. Y créeme, en el futuro te encontrarás muchas más cosas.  



Solo había Oscuridad veía pequeñas luces, como las de la llama de una vela, para ser exacto eran seis, y cada una tenía una tonalidad distinta, no me podía mover, solo veía esas luces, había tres cerca de mí las otras tres estaban lejos, pero una estaba más lejos que la otra. Intenté ver todo lo que había en mi alrededor y solo había Oscuridad. Luego me fijé bien en lo que estaba a mis pies y no era suelo, era más bien agua, un agua espesa como la brea. Debajo de esta había una especie de serpiente, que asomaba apenas la cabeza en la superficie del agua mirándome fijamente, era grande, de color negro con tonalidades azul, rojo y blanco, y tenía los ojos de un negro abismal como si tras ellos estuviera todo el mal del mundo. En un rápido movimiento la serpiente se enrosco a mí y me apretaba con fuerza, evitando que respire.

Abrí lentamente los ojos, estando un poco desorientando y sin poder recordar muy bien nada. Estaba todo en penumbras, al parecer estaba en el hospital, debía de ser muy tarde porque no se escuchaba casi nada, pero la pregunta era ¿cómo terminé yo en el hospital? Cuando de golpe todo llego a mi mente, y en un ágil movimiento me levanté de la cama, con un fuerte dolor en la zona abdominal y en la cara. Si lo que recordaba era verdad, he de suponer que estos dolores eran producto de aquella intensa pelea, la verdadera duda era, ¿cómo estará Logan?, él era fuerte sí, pero yo nunca perdía el control y con la cantidad de ira que yo guardo dentro, no acabaría bien para nadie.

Después de buscar en la habitación encontré la ropa que se supone estaba en mi casillero del vestidor del instituto, entré al baño de la pequeña habitación de hospital para vestirme, después de cambiarme levanté la vista y estaba enfrente del espejo, tenía la cara destrozada, maldita sea esto sí que se salió de control. Cuando terminé y estaba por salir, entró una enfermera seguida de mi madre y Andrea.

Andrea y mi madre al verme sonrieron en el acto, sin embargo la enfermera estaba más bien molesta, con el ceño fruncido. De nuevo, la luz me daba dolor de cabeza, me estaba mareando, pero como siempre mi rostro no denotaba nada. Sabía por la mirada de mi mamá que ella ya suponía que me pasaba, pero la ignoré. Cuando la enfermera empezó con el sermón de que me tenía que quedar acostado y todo el rollo, la miré con el odio más grande que podía proyectar, haciéndola callar y sonrojarse, me imagino que de vergüenza por dejarse intimidar por un menor. Tampoco le presté mucha atención y le pregunté a mi madre y a Andrea:

— ¿Qué pasó? Quiero todos los detalles, lo último que recuerdo es perder el control mientras intentaba controlar a Logan.

—Bueno, yo estaba saliendo de la piscina por, bueno, nada en específico —entendí al vuelo la indirecta, no me diría porque mi mamá estaba aquí— cuando apareció uno de los chicos, no sé cual, ya no me acuerdo. Él me dijo que Logan había perdido el control o algo parecido y que tú intentabas detenerle. Pero según me dijo él, tú también estabas raro, porque solo esquivabas los ataques y no estabas intentando pegarle. Claro que yo entendí que solo querías detenerlo, sin tener que pelear por lo de la ocasión anterior. Sin terminarlo de escuchar, salí corriendo al gimnasio, afortunadamente estaba cerca. —Yo ya suponía que me estaba ocultando algo, pero la presencia de mi mamá no le dejaba contarlo, debía ser algo o muy personal o muy raro.— Cuando llegué, vi como intentaste esquivar dos golpes de Logan pero no pudiste, me imagino que pensaste que si le debas un par de golpes se calmaría, pero no fue así. A partir de ahí, tu mirada se puso más oscura, más siniestra, tus ojos en vez de gris parecían negros y lo de Logan estaban también más siniestros, como aquella vez. Estuvieron intercambiando golpes, al principio parecía que estaban a la par, pero luego entendí que tú solo estabas jugando con él cuándo con un golpe lo noqueaste.

Yo no sabía qué hacer, estaba paralizada. Pensé que te ibas a detener, pero cuando vi que te acercabas a él para seguir, fue cuando reaccioné, y con una gran velocidad ya estaba entre tú y Logan. Tú parecías no reconocerme, te acercaste para golpearme la cara, pero yo lo esquivé brincando hacia ti y luego con un rápido movimiento te lancé al piso, mientras con mis manos sujetaba tu brazo derecho y con mis piernas tu cuello, hasta que perdiste el conocimiento. El resto lo imaginarás, llamé a una ambulancia, los trajeron al hospital, luego llamé a tu mamá y aquí estamos.

No sabía qué pensar todo esto, es muy raro, yo nunca pierdo el control, y cuando digo nunca es nunca pero por alguna razón eso había pasado. Las preguntas eran ¿por qué? ¿Los sueños tenían algo que ver? Los chicos nuevos también estaban involucrados, lo sabía, pero no sé de qué manera y por último ¿a qué nos llevaría todo esto? Son muchas las cosas que tengo que hablar con Andrea y Logan. Pero primero con Andrea.

—Bueno y ¿cómo está Logan? —pregunté.

—Está bien, aunque no ha despertado, está con mi hermana y su esposo. —respondió mi mamá.

—Qué bueno, y —me volteé a la enfermera— ¿Cuánto tiempo me voy a quedar aquí? —Ella volteó a ver a mi mamá y luego dijo:

—Señora, él se tiene que quedar esta noche para revisión ¿me acompaña para que firme unos documentos del hospital?

La miré con odio, yo fui el que le preguntó ¿porque se dirigió a mi mamá? Me senté de nuevo en la camilla mientras mi mamá y la enfermera se iban. Andrea se quedó parada y cuando mi mamá por fin termino de salir, le pregunté:

—Y ¿bien? Dime ¿qué era lo que no podías decir delante de mi mamá? —Me miró un poco sorprendida pero me sonrió.

—Era obvio que te ibas a dar cuenta que no contaba algo, eres muy perspicaz. —Asentí para que me terminara de decir—. Bueno, lo cierto es que todo lo que dije pasó, lo único fue que omití algunas cosas, aquí van. Salí de la piscina antes porque mientras veía a esa tipa Cyndi creo, hacer la prueba, mi vista se nubló, me sentí mareada, y creo que me estaba desmayando porque todo lo veía negro. Luego sentí una opresión en el corazón y una sensación recorrió mi cuerpo. Solo tenía algo en la cabeza, me sentía vacía, necesitaba estar cerca de ustedes. Sabía que algo pasaba, no sé como, pero necesitaba estar con ustedes. Era como si me sintiera desprotegida sin ustedes, como si me faltara algo, no sé si me explico. —Asentí con la cabeza, porque de cierta manera yo sabía de qué me hablaba, a mí me estaba pasando últimamente. Ella prosiguió—. Y mis temores de que pasaba algo se confirmaron cuando el chico ese me contó lo que pasaba. Después, cuando noqueaste a Logan, sentí un dolor inmenso, que se acrecentó cuando te acercaste a él irradiando ira pura y fue como si mi cuerpo tomara el control. Lo único que estaba en mi mente era protegerlos a ambos, primero pensé que te calmarías al verme, pero al darme cuenta que no era así y me lanzaste un golpe, mi cuerpo se movió solo y te hice esa llave que me enseñaste después de aquella vez. Luego, hace rato, cuando estaba en la sala de espera, te sentí, no sé como, pero te sentí, a ti, a Logan y a otras cuatro personas más, pero a ti se te sentía raro, como oscuro, siniestro, fue cuando decidí venir a verte. Me encontré a tu mamá hablando con tu papá por teléfono y fue cuando llegamos y tú estabas por salir. —Bien, esto es raro, pero como suponían Andrea y Logan, todo está relacionado. Creo que es hora de contarle algunas cosas.

—Bien Andrea, al parecer ahora soy yo el que te tiene que contar algunas cosas. Empezaré por decirte, que últimamente tengo unos sueños muy extraños, con una voz que me llama, casi a diario, y hoy cuando me desmayé fue porque me pasó algo parecido a lo que te paso a ti, pero más fuerte y mientras me desmayaba escuchaba como la voz de mis sueños me decía que se me acaba el tiempo, ¿de qué? No sé, luego están los chicos nuevos, ellos tienen algo que ver pero no sé cómo, y por último, eso que sentías tú hace rato, yo también lo sentí, pero pensé que era un sueño.

Andrea me miró con una de esas risas nerviosas, que le dan cuando quiere confesar algo importante. Me miró seriamente y fue cuando dijo algo que me descolocó.

—Es bueno saber que no soy la única que sueña con una voz y que además de vez en cuando le dice cosas. —La miré algo perplejo.

—Andrea, ¿tú también has soñado y oído esa cosa?

—Bueno, sí, pero es... humm ¿cómo explicarlo? Es amable no me da miedo. —Eso me descolocó más, porque la voz que yo escuchaba me atemorizaba y a ella no, esto es raro. Sentí como un peso inmenso se apoderaba de mí, luego tenía mucho sueño. Andrea pareció darse cuenta porque dijo —Ha sido un día muy largo para solo ser el primer día de escuela y yo a diferencia de Logan y tú tengo que ir al instituto mañana. Tú tienes que descansar. 

Orígenes: Hijo De La Oscuridad ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora