Maybe, If you...

Capítulo 12

Jin limpió cuidadosamente, asegurándose de que no quede ningún cristal en el piso. No quería que alguien saliera herido. Acto seguido preparó, el tan especial emparedado de Tae (mantequilla de maní, mermelada, unas cuantas botanas a un lado) y por supuesto, lo que no podía faltarle nunca, una lata de coca cola.

Solo esperaba que el chico siguiera en la sala.

Tomó el plato con una mano y el refresco con la otra, dirigiéndose  hasta la sala, donde el menor se encontraba sentado en la misma posición en la que lo había dejado, con la vista fija en el televisor.

-Te he traído tu emparedado-. Anuncio, extendiéndole el plato junto con la soda. TaeHyung, después de unos segundos, estiro los brazos, para tomar lo que el mayor le ofrecía.

-Gracias-. Susurró, regresando la vista a la televisión.

Jin se mantuvo de pie, detrás del sofá, pensando:  Ahora ¿Qué debía hacer?

Su mirada se dirigió hacia la televisión y la sonrisa se formó en sus labios cuando distinguió que era lo que el menor miraba con tanto interés. Jin recordó que aquella película era una -de las muchas- favoritas del menor. TaeHyung la había mirado infinidad de veces, en los últimos cinco años que llevaban viviendo en grupo. 

Que buenos recuerdos.

Las palabras de YoonGi hicieron eco en su mente. No podía esperar más. Debía intentar solucionar el asunto. 

"Vamos, tú puedes". Se animó.Carraspeo un par de veces intentando llamar la atención del menor. Pero por supuesto, Tae fingió no escucharlo.

- ¿Puedo sentarme contigo?

El silencio reino durante algunos segundos, después de que la pregunta fue lanzada. Por un momento, Jin dudo en no haber hablado lo suficientemente alto, como para que el menor lo escuchara. Su duda desapareció, tan pronto escucho suspirar al menor.

-Creí que iba de salida-. ¿Auch? Eso había dolido, pero se lo merecía -. Está bien. No se sienta mal de dejarme solo. No es como si no lo hubiera hecho ya-. Intento corregirse el menor. No fue su intensión sonar grosero, pero su boca no estaba dispuesta a trabajar con su mente en ese momento. Estaba algo molesto -. Lo siento, Hyung-.  Tae parecía arrepentido y avergonzado.

-Supongo que lo merezco-. Jin sabia a lo que Tae se refería, por lo que no se ofendió en absoluto-. Pero bueno, mi salida se canceló-. Mintió, soltando un sonoro suspiro. Él era consciente de que sería complicado regresar a donde se encontraba con Tae, antes de todo; estaba dispuesto a intentarlo. Debía hacer las cosas poco a poco-. Si necesitas algo, estaré en mi habitación.

Jin dio media vuelta dispuesto a retirarse, cuando la voz del menor lo detuvo.

-Hyung-. Le llamo el menor. Tae sabía que estaba siendo masoquista, pero una parte de añoraba pasar tiempo con el mayor-. Es-está bien si se queda-. Ya después se lamentaría.

El mayor fingió pensárselo uno segundos y asintió. Sonrió ampliamente cuando Tae se pegó a un extremo opuesto del mueble, dándole lugar al mayor.

Jin rodeo el mueble hasta el espacio vacío y se dejó caer.

El tiempo transcurrió entre observar la película, y por momentos, al lindo castaño, quien no se había movido ni un centímetro de su posición. A la vista del mayor, Tae lucia como un tierno y asustadizo gatito. El mayor tenia claro que Tae no se sentía cómodo con su presencia.