Sangre De Mi Sangre| Season 2| Fanfic Nian

Capítulo 06.- Nina, Eres tú

POV Sylvia

Todo está saliendo a la perfección. Tal y como le prometí a Nikki. Solo faltaba el paso final, la muerte. Pero para eso faltaba aún.

Ya había dado el primer paso con Nina. Separarla de su querido esposo y de su adorada hija. Lo hice enviando esas fotografías con las cuales Paul, mi querido cuñado ayudo.

Mi hermana me habló de él cuando la fui a visitar en prisión, al parecer él había sido su gran amor y seguían manteniendo contacto a pesar de los años. Cuando hablé con Paul y le conté el plan, él estuvo de acuerdo en llevar a cabo la venganza de mi hermana.

Y eso era lo que estábamos haciendo, vengarnos de la familia Somerhalder y mientras yo hacía mi parte él hacía la suya manteniendo alejada a Nina en aquella clínica de rehabilitación. Afortunadamente para nosotros fue muy beneficioso que ella perdiera la memoria.

Cuando le conté lo sucedido a Nikki, se puso muy feliz y me abrazó como nunca antes nadie lo había hecho, lo cual me hizo sentir muy bien ya que ella no era de la clase de persona que muestra sus sentimientos.

Ahora era uno de esos días de visita en prisión. Estaba esperando en la sala de visitas a que mi hermana apareciera. A los pocos minutos ella tomó asiento frente a mí.

—Pensé que no querías verme.
—Dije al verla a los ojos.

—Esperaba la visita de Paul no la tuya. —Musitó con desdén.

—Bueno hermanita debo recordarte que él está muy ocupado con Nina. —Le digo mientras observo el moretón que tiene en el ojo izquierdo.

— ¿Has hablado con él? —Me pregunta con curiosidad.

—No, no he hablado con él. ¿Qué te pasó en el ojo? —Le cuestiono con interés.

—Una maldita zorra me golpeó cuando le quité su cigarrillo.

—No deberías buscarte problemas aquí Nikki. —Le digo un tanto preocupada por ella.

—Da igual de todas formas no duraré mucho tiempo en este maldito lugar.

—Se acabó el tiempo de las visitas. —Se escuchó gritar a un oficial.

—Me tengo que ir pero le diré a Paul que te venga a ver cuanto antes. —Le susurro al oído mientras la abrazo.

—Gracias y tú sigue con lo tuyo hermanita. La próxima visita quiero todos los detalles. —Me dice separando el abrazo.

—Así lo haré, no tengas duda.
—Le digo finalmente para después irme.

Pov Natalie

Después de ese desafortunado reencuentro con Sylvia y Ryan papá me trajo al trabajo con él, terminaría de firmar algunos documentos que tenía pendiente y después iríamos a la heladería.

Me quedé esperando en la pequeña sala del recibidor, tomé mi móvil para buscar entre mis contactos el número de mi abuela y una vez que lo encontré la llamé.

— ¡Hola Natalie! —Me saludó con una voz un tanto ronca.

— ¡Hola Abuela! ¿Qué le pasó a tu voz? —Le cuestiono preocupada.

—Tengo un poco de gripe. ¿Cómo estás? ¿Va todo bien por allá, acaso han tenido noticias de tu madre? —Me pregunta.

—No abuela, sabes que de ser así te habríamos informado.

—De ti lo creo pero no sé si pueda decir lo mismo de tu padre.

—Él está muy arrepentido y yo también. Mamá no se merecía lo que le hicimos.

—Yo aún no puedo creer que Ian haya desconfiado de ella. Si Nina no estuvo con nadie más estando separada de ustedes durante 17 años, mucho menos lo haría teniendo a su familia.

—Ahora lo sé pero esas fotos parecían tan reales, era lógico dudar. Y papá estaba tan cegado por sus celos y su rabia que no supo razonar y yo tampoco.

—Cuando nos sentimos heridos decimos muchas cosas y no medimos nuestras palabras. Solo espero mi hija se encuentre bien.

— ¿Cuándo regresas? Te echamos mucho de menos.

—Espero estar por allá la próxima semana. Tengo unos asuntos que arreglar acá en parís de tu abuelo y regreso lo antes posible.

En ese momento vi salir a papa de su oficina.

—Está bien abuela, acá te estaremos esperando. Tengo que colgar, cuídate, te quiero mucho. Besos. —Colgué y miré a papá. —Era la abuela, la llamé para saber cómo estaba. —Digo levantándome del pequeño sofá.

—Qué bueno, me da mucho gusto. Ya hablaré después con ella. Ahora vámonos que nos cierran la heladería. —Me dijo con una sonrisa.

Mientras tanto en una heladería.

Pov Nina

Habíamos llegado ya a la heladería y habíamos pedido nuestros helados. Mientras esperábamos, nos sentamos en una de las mesas para conversar un poco.

—Habiendo tantas heladerías en la ciudad y escogiste esta. —Me dice un tanto molesto.

—Bueno es que ya he pasado por aquí antes y el helado que hacen es delicioso. —Digo con una sonrisa en mis labios al ver llegar a la señorita con nuestras copas.

—Bueno, sí tú lo dices debe ser así.

Comenzamos a comer nuestro helado cuando escuché una voz pedir de la misma manera mi helado.

—Sí por favor con dos bolas de chocolate y una de vainilla.
—Dijo aquella voz tan sexy.

No pude evitar seguir mi instinto y ver de quien se trataba. Cuando miré a las personas me di cuenta de dos cosas. La primera era aquella chica a la que ya había visto antes y que decía que yo era su madre y la segunda era la persona portadora de aquellos ojos hermosos con los que llevaba soñando.

—Nina. —Mencionó el hombre de los ojos bonitos. —Nina, eres tú. —Dijo de nuevo y me tomó por sorpresa cuando me abrazó.

2/3 Maratón