~Invierno Soleado~

Capitulo 3. Parte 1.

Un chico de baja estatura se encuentra viendo la televisión. Toma de la mesa de centro su taza que contenía un delicioso café. Pone la taza en su labios y toma un trago, siente como ese caliente y rico líquido entra por su boca y deslizandose por su garganta dejándolo con un sabor a moka. ¡Oh! Su favorito.

De pronto suena su teléfono, lo coge y sin ver quien era contesta.

-¿Hola?

-¡Hola Hyung!-responden al otro lado de la línea, una voz que al más bajo le provocan mariposas en el estómago.

Deja su taza de nuevo en la mesa y pone toda su atención a esa hermosa voz.

-¡Taeminnie! Que alegria- en su rostro se dibujo una gran sonrisa, esas que sólo una persona le ha sacado a diario-¿a que debo el honor de que bella persona me llame?- pregunta con tono coqueto.

Se escucha al otro lado una risita, tan tierna, lo que ahora provoca en el más bajo un zoológico en su estómago.

-¡Hyung!-le reprende el menor y ahí sabe que lo ha sonrojado. Se rie.

-Esta bien, esta bien.

-¡Ufff!- bufa el menor-Bueno, te hablaba para saber si querías salir conmigo a tomar un café, hace mucho que no nos vemos, además el invierno le está dando toque a la ciudad y queria ver ese toque contigo, claro, si es que no tienes planes para hoy.

-¿Y Yoongeun? ¿No le hará daño si sale con este frío?- pregunto, pues el frío si que congelaba, y no es que no le gustara, le encantaba el frío pero ante todo estaba la salud del pequeño hijo de Taemin, el cual amaba con todo su ser.

-No te preocupes Hyung, lo he dejado con mi madre, hace mucho que no lo ve y pues le hice visita, me dijo que se quedaria con él hoy y que yo me fuera a divertir para que no estuviera aburrido- y sabe que el menor rodó sus ojos, lo que hace que ria un poco más.-así que te llame, para salir, pero si tienes planes hoy no hay pr...

-No, no, no- le interrumpió el mayor- Claro que saldré contigo Taeminnie, sólo deja me cambio y pasó por ti ¿vale?- pregunto el mayor con alegría.-¿estas con tu madre?

-Si, estoy en su casa

-vale-checo su reloj, era medio día- te recogo en media hora, ¿te parece?- pues la casa de la madre del menor no estaba tan lejos de la suya.

- Vale Hyung, te espero, nos vemos en un rato.

-Nos vemos en un rato Minnie- y colgó. Dejo el celular en la mesa de centro.

Sin más se fue contento hacia su cuarto para cambiarse, no se baño pues lo había hecho el día anterior en la noche. Se puso una playera negra, un pantalón gris, se peino y dándose el visto bueno salió de su habitación. Se dirigió hacia la mesa donde había dejado su teléfono, lo cogió y lo aguardo en la bolsa delantera de su pantalón.

Se dirigió hacia la salida, donde agarró las llaves, tanto de su casa como de su auto, del perchero que se encontraba ahí agarró su abrigo y se lo puso. Muy feliz, salio de su casa y se dirigió hacia la cochera, abrió la entrada de esta y se acercó, escogió unos de los dos autos que tenía, uno negro y uno rojo; eligió el primero, se adentro al auto y lo saco de la cochera. Salió hacia la calle y se fue, dirigiéndose a donde se encontraba su hermoso Minnie.

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Se estaciono en la entrada de una hermosa casa, ni tan grande ni tan chica, pintada de un azul celestes el cual le daba vida junto con su pequeño pero bien cuidado jardín.

Miro su reloj y comprobó que se había tardado lo que acordó, media hora. Salió del auto y aún feliz se dirigió hacia la puerta de aquella hermosa casa.