#4 La banda

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Fuimos a mi casa, recogimos los instrumentos y nos encaminamos al concierto. Alex se veía guapa, llevaba unos jeans desgastados y una sudadera negra, con toda la tranquilidad del mundo, tome su mano. Ella reaccionó rápidamente como lo esperaba.
-¿Que carajos haces? - Preguntó molesta mientras se soltaba de mi agarre.
-Lo siento, es la costumbre. - Dije tranquilo.
-¿La costumbre de tomar de la mano a una chica que tiene novio?
-Él no es tu novio. - ¡Toma esa! - Sabes, me da igual si quieres tomar mi mano o no. - Dije fríamente.
-Esta bien, no me tomes de la mano, no lo hagas nunca más.
-Si, lo que sea. - Camine más rápido. Iba y venía. Cruzaba avenidas y uno que otro callejón obscuro. Después, Alexis no pudo seguirme el paso.
-Oye, no seas idiota. - Dijo recuperando el aliento. - Espérame.
-Eres muy lenta.
-Es mi gordura - Bromeó. Y por un momento, me hizo reír.
-Anda, date prisa. - Le sonreí.
Caminamos un rato, hasta que estuvimos en el lugar del concierto. - Antes que nada, déjame advertirte, que los chicos de la banda...
-¡Jordan! Al fin llegas grandísimo imbécil. - Dijo Carlos. - Wow. - Repasó su mirada con Alex, de un lado a otro, como queriendo desnudarla con la mirada.
-Si vuelves a mirarme de ese modo, voy a darte la paliza de tu vida. - Amenazó la chica.
-Tan guapa y agresiva. - Se lamentó Cristian.
-Mírate, eres guapísima y tienes ese comportamiento. - Negó divertido Andrés.
-¿Que esperaban que les dijera? - Retó Alexis - Oh, claro, pueden mirar mi trasero, pasarse por mis pechos y después pueden hacer el intento de llevarme a la cama. ¿Esperaban algo asi? -Todos se quedaron en silencio. No se si por la astucia, o el descaro de la chica.
-Hasta que por fin tienes una novia decente. - Me felicitó Carlos. La preciosa chica enrojeció.
-Si, idiota. ¿Como es que consigues tantas chicas? - Alabó Cristian.
-¡Vamos por unas cervezas para celebrar! - Sugirió Andrés.
-Yo no tomo. - Dijo Alex.
-Te compraré un jugo - Le sonreí.
-Genial. - Dijo animada. - Le llamaré a mi papá para pedir permiso. - Alex se alejó para hablar por teléfono.
-Maldita sea, Jordan. ¿Donde consigo una novia como la tuya? - Dijo el idiota que era mi mejor amigo, Cristian.
-Ella no es mo novia. - Dije tranquilamente mientras escupía esas palabras como veneno.
-Y eso te duele hasta el culo ¿Verdad?
-Cierra la boca.
-Podrías conquistarla.
-No. No puedo. Ella... Ella ya está con alguien, bueno... es complicado.
-No me digas que se va a casar.
-No seas idiota. Ella tiene una relación a distancia.
-Entonces, no puede estar siempre con el otro cabrón. Pero tú si. - Insinuó. - Puedes estar con ella, siendo dulce y tratandola bien... ¿Entiendes?
-No podría destruir su relación.
-Bueno, entonces quédate siendo el idiota que nunca será su novio y que esta enamorado de ella. El idiota que sólo será el mejor amigo.
-Estamos aquí para el concierto. No para hablar de mi situación amorosa. Además. Apenas la conozco.
-Eso es lo más jodido. - Suspiró. - Tu nunca traes a una chica a un concierto.
-Ya lo sé.
-Estas en el puto agujero.
-Sólo cierra la boca.
-Espera... ¿Donde esta Alexis? - Preguntó muy asustado.
-Mierda ¡Ya perdí a la chica... Literalmente!
-A la mierda el concierto... vamos a buscar a la chica. - Entramos al escenario, para que los demás nos ayudaran a buscar a Alex. Joder. Esto no era bueno, estaba perdida, Alex no estaba. Mierda. Mierda...
-Oigan, ¿Han visto a la chica que venía con Jordan?
-No. - Dijeron al mismo tiempo.
-¿Como que no?
-No, no la he visto.
-Ni yo.
-Tampoco yo.
-Joder, voy a llamar a la policía, para que la busquen. - Dije espantado, nervioso y muy, muy cagado de miedo.
-911. ¿Cuál es su emergencia?
-Si. Hola... Se perdió mi... novia... - Intente controlar mi miedo. - Tiene los ojos marrones y un lunar por los labios, su cabello es lacio de color negro. Y se llama...
-Oigan, ya no hay papel en el baño. - Dijo la chica bonita.
-¡Alexis! - Corrí hacía ella y la abracé.
-Jordan. - Dijo confundida
-Maldita sea. ¿Donde carajos estabas?
-En el baño. - Dijo tranquilamente.
-Estaba jodidamente preocupado.
-Sólo es el baño.
-Es que de pronto ya no te vi...
-Eres un exagerado.
-Oye Jordan, vamos a hacer la prueba de sonido.
-No te muevas de aquí. - Le pedí.
-Mucha suerte - Sonrió.
Asentí ante su lindo gesto. Maldición. Ella era preciosa. Ella era especial y claramente ella no era como el resto de chicas. Luego de la prueba de sonido, comenzamos a tocar. Alex nos miraba fascinada. Bailaba de un lado a otro, disfrutaba de la música, gritaba y aplaudía y eso me encantaba. Me encantaba cuando disfrutaba.
Al término del concierto, Alexis se veía cansada.
-¿Quieres ir a tu casa? - Le pregunté.
-Si. De hecho... Ya voy un poco tarde de la hora que había acordado con mi papá.
-Creí que te quedarías hasta que fuéramos por unas cervezas. - Dijo Cristian.
-Lo siento... Ya es tarde y tengo que irme.
-No puedes dejarme así... - Insistió.
-De verdad lo siento. Ya es tarde.
-Podemos ir por cervezas el sábado. - Sugirió Cristian. - Es mi cumpleaños.
-Bien, iré. - Dijo entusiasmada.
-¿En serio? - Pregunté incrédulo.
-Claro. - Afirmó. - Quedaré de acuerdo con Jordan. -
-Muy bien... Nadie haga planes para el sábado, lo pasaremos con la novia de Jordan. - Celebró Andrés.
-No soy su novia... - Dijo Apenada.
-Podrías ser mía - Dijo Cristian.
-O mía - Dijo Andrés
-Podrías salir conmigo... - Dijo Carlos.
-Estoy con alguien... - Dijo tranquila. Era increíble. El tal Alejandro quizá no le era fiel y aquí estaba ella, rechazando a todos para poder estar con alguien a quien nunca había visto.
-Vamos, Alexis. Te llevaré a casa.
-Puedo ir sola...
-¿Estas loca? Ya es muy tarde, no te dejaré ir sola...
-Se cuidarme.
-Claro que si, enana.
-Oye soy bajita pero no débil.
-Anda... No te tomaré de la mano, lo juro.
-Esta bien.
Caminamos a la avenida para tomar un taxi.
-Me encanta tu música. - Dijo ella.
-Que bueno que te gustó.
-Eres un genio con la guitarra. - Alabó. La mire incrédulo.
-¿Te das cuenta que es el primer halago que me has hecho desde que te conoci?
-Bueno. - Dijo sonriendo. - Es que eres un cretino.
-Pero soy genial
-Eres un cretino arrogante, ególatra, y un genio musical. Definitivamente, consigues muchas chicas.
-Hay una que esta fuera de mi alcance.
-¿Que? ¿Acaso hay alguien que se resiste a tus encantos? - Se burló.
-Si. - Dije mirando sus ojos. - Y se te da muy bien. - La risa se le había acabado.
-No seas idiota, Jordan. - Dijo ella. - Me acabas de conocer.
-Ya lo sé. - Acaricie su mejilla. - Y eso es lo que más me jode.
-Déjame. - Susurró. Se puso firme y abrió la puerta de su casa. - Hasta mañana. - Y cerró la puerta.
Y ahí me quedé, nervioso sin saber que hacer, deseando que ella estuviera enamorada de mi. Odiando desde lo más profundo de mi ser a Alejandro.
Deseando no estar enamorado de ella

Mejor AmigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora