flower shop;

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Me levanté gracias al sonido de la alarma, no quería llegar tarde a mi primer día de trabajo y menos cuando yo era la única empleada a parte de la señora Patrice.

Me di una ducha rápida, me coloque un vestido con flores en él y unas balerinas doradas, muy lindas por cierto,  me encantaban. Use un poco labial rosa y mascara de pestañas con un delineado delgado y largo. No iba a desayunar nada porque tenía un starbucks enfrente, podía pasar cuando quisiera.

La florería no estaba tan lejos de mi apartamento, estaba como a 20 minutos cuanto mucho, podía caminar, tenía que ejercitar estas piernitas. Recuerdo que mi mamá siempre me decía que tenía piernas de pollo; ¡Oh! hablando de mi mamá, no me han marcado ni se han dado cuenta de mi ausencia, genial.

Cuando llegue a la florería, Mrs. Patrice me dio un delantal color blanco con mi nombre en este, me explico cómo se usaba la caja, como decorar las canastas con las flores y/o como envolverlas. Ella se fue ya que tenía una cita con su doctor y dejo la florería a mi cuidado, no le iba a fallar, eso espero.

Bienvenidos a FloraQueen, espero no sonar tan india— estaba ensayando como saludar a las personas y sonreír obviamente sin verme tan falsa, ay mira moneda.

La campanilla de la puerta sonó y una voz se escuchó.

—No Luke, no tengo ni puta idea de qué tipo de flores quiere tu novia— No se escuchaba otra voz aparte de él, probablemente estaba hablando por teléfono. —Es tu novia, tú debes de saber.

Me levanté del suelo y sí, estaba en el piso. ¿Qué? ¡Había una moneda! Me limite a mirar a el chico, este tenía una piel del mismo tono que la mía, tenía una playera azul que decía Maine y unos skinny jeans negros que le quedan mejor que a mí. Mierda.

Se puso en frente del mostrador y así le pude inspeccionar su cara mejor; ojos marrones y un poco rasgados, su cabello era un café obscuro y en un mechón había pequeños rizos, como una ovejita, aw.

Colgó su celular y lo guardo en el bolsillo de su pantalón y centró su mirada en mí.

—Eres mujer, ¿cierto?—preguntó. ¿Qué pedo con este bato? 

Y la respuesta es: bueno eso creo, mi mami decía que era hombre porque hablaba como uno pero siempre que iba al baño me daba cuenta que era mujer, aparte ¡tenia bubis! ¿Qué no las veía?, Quizá no las vió porque estan pequeñas, ¡Hey! No discrimines a las planas.

—Eso creo— Contesté mientras me encogía de hombros y este sonrió, ¡alerta chico con sonrisa bonita presente!

—Lo siento, que pregunta tan tonta se nota desde lejos que eres mujer, pero estoy estresado— Contestó sonando tierno, ay.

—¿Por qué?— Pregunte amable, ser amable no le sentaba mal a nadie, las personas amables siempre son las mas agradables a mi parecer.

—Mi amigo me llamó para pedirme que le comprara flores a su novia porque él no podía ¡me marco a las ocho de la mañana! No sé qué flores comprarle pero estoy cansado, enojado y con una gran resaca— terminó con su explicación y lo mire con una sonrisa tímida en mi rostro.

Colocó sus codos en el mostrador, cubrió su cara con sus manos y soltó un gran suspiro. Bueno tengo que ayudar a este pobre chico.

—Puedo ayudarte, si no puedes elegir por unas— Opiné —¿Por qué no llevarle de todo tipo?— Esa era una buena idea, el ex-novio de Ana había hecho eso y ella murió, no literal pero murió.

Él quitó sus manos de su cara y vi sus ojos, era como si le hubiera dicho la mejor idea de todas ya que sus ojos se iluminaron y una sonrisa apareció en su rostro. Bien Ángela, inhala exhala, ayuda policía ¿Cómo respiro?

—Confiare en ti.

Fui al estante en donde se encontraban las flores y empecé con las rosas, tome una flor de cada color desde roja hasta blanca, en total fueron cuatro rosas de diferente color, después fui a donde estaban los lirios de estas tome tres una blanca amarilla y rosa pastel. Cargue la cubeta en la que metía las flores y camine con ella hasta la sección de los tulipanes, mis flores favoritas de estos si tome un poco más porque pues son tulipanes, todos aman los tulipanes de esa clase de flores tome todos los colores existentes que en total son ocho y así me fui con los claveles, gerberas, iris etc. hasta el punto de tener 65 flores.

Empecé con la tarea de quitarle las hojas y/o espinas a los tallos, para que así sea más fácil de acomodarlas, puse un cilindro transparente pero no tan grueso y por fuera de el empecé a acomodar las flores alrededor, las flores que sobraron las metí dentro del cilindro para hacer un hermoso arreglo floral.

Me llevo menos de dos horas en hacer eso, el chico que vino a pedirlas se había ido hace unos minutos y no dijo a donde, saque un listón rosa pastel y lo puse alrededor de las flores y con el que sobraba le hice un moño, hay que lindo me estaba quedando, hasta me lo quería quedar.

—Traje pizza, creo que debes de traer hambre— Dijo el chico que apenas iba entrando, le estaba dando unos pequeños retoques al florero. Me encantó como me había quedado —Wow, sí que es precioso— Sonreí orgullosa.

—No debiste molestarte— realmente no debía, en unas dos o tres horas seria mi descanso, podía ir a comprar algo o pedir algo. Qué vergüenza.

—Nunca te había visto aquí— se sentó en el suelo y yo me senté a un lado de él, procurando sentarme como señorita porque traía vestido, bueno siempre me siento como hombre pero no puedo sentarme así delante de uno, va a pensar mal.

—Es porque no soy de aquí— Reí —Acabo de llegar.

—Por eso tenías un acento extraño, ¿de dónde eres?

—México— contesté. —Hey ese era mi pedazo.

—Ahora es mío— Le dio una mordida y me miró con una sonrisa burlona. Le saque la lengua y él rió, ew con la boca llena no, pero como quiera reí con él.

Minutos después nos terminamos una caja de pizza juntos, mi estómago dolía, que pena ha de pensar que era una muerta de hambre por eso me acabe la mayoría de pedazos pero no, así era podía comer mucho y al último terminaba sufriendo pero mientras comía me sentía feliz.

Una melodía familiar se escuchó, yo concia esa canción era de mi banda favorita the 1975. El sacó su celular de su bolsillo y pulso el botón de responder, al momento de que se puso el celular en la oreja se escucharon gritos, creo que alguien está enojado.

—Si lo siento, aquí están, se me hizo tarde Luke— más gritos se escuchaban en la otra línea. —No es mi culpa que no tengas auto— cubrió con su mano derecha el micrófono del celular y volteo a verme —¿Cómo se dice fuck you en español?

—Chinga tu madre— Contesté con una risa.

—Chinga tu madre Luke— Dijo y colgó. Guardo su celular en su bolsillo y se dirigió a donde había dejado el ramo de flores —¿Cuánto será?

—Son 65 flores, serían 32 con 5 centavos— Él saco su billetera y saco varios dólares de ahí. —Gracias.

—Gracias a ti bonita, si no fuera por ti Luke me hubiera colgado— Contestó con una risa y se acercó a despedirse dándome un beso en el cachete.

Esperen, ¿Qué? ¡Alo novecientos once! esto es una emergencia, un chico guapo me dio un beso en la mejilla.

—Nos vemos después, bonita— Dijo antes salir del local.

Flower shop «CthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora