Destino

1.6K 134 26
                                    

Taehyung estaba paseando por el parque, mirando a los niños pequeños empujarse y perseguirse unos a otros mientras jugaban. Sin embargo, otros compartían sus secretos bajo las sombras de los árboles. Mientras lo hacían, todos disfrutaban de la comodidad de tener 5 años de edad. Taehyung por el contrario no tenía a nadie con quien conversar, era simplemente otro chico más, solitario en el parque. Cuando Taehyung estiró sus brazos hacia arriba para estirarse, un pequeño trozo de papel voló y golpeó su rostro. Él se asustó y movió su cuerpo para comprobar si era una abeja. En lugar de un insecto, se encontró con el pequeño trozo de papel.

– ¿Hmm...?- Taehyung inspeccionó la nota arrugada suponiendo que esta le había golpeado al azar, le dio la vuelta y divisó 10 dígitos. Se quedó ahí debatiendo consigo mismo sobre si debía quedarse con el número o tirarlo a la basura. Le dio la vuelta un par de veces más y al final decidió que un poco de diversión no podía hacerle daño a nadie. ¿verdad?.

Al entrar a casa, el olor a pizza invadió las fosas nasales de Taehyung y su sonrisa no cabía en su rostro mientras bailaba por el pasillo hacia la cocina.

– ¿Cuál es el evento especial de hoy?- Taehyung se desplomó sobre la silla emocionado mirando la pizza.

– ¿Que te hace pensar que algo tiene que suceder cada vez que comamos pizza?- Su madre le preguntó de espaldas, dando medía vuelta para ver a su hijo. Taehyung alzó sus manos al aire en señal de rendición. Logró su objetivo, hacer reír a su madre. Después tomó un trozo de pizza y esperó a que le dijese las noticias.

– Bien, bien – Ella rodó los ojos y sonrió ampliamente. – ¡Nos dieron un gatito! - Su madre empezó a aplaudir con entusiasmo.

El trozo de pizza que estaba a punto de entrar en la boca piadosa de Taehyung, ahora fue lanzada de nuevo contra el plato. Taehyung se levantó de la silla con un salto mientras gritaba y se puso a bailar.

– ¡¿De verdad?!- Preguntó y se tiró al suelo. – ¿Dónde está? Quiero cogerlo.- Comenzó a arrastrarse por todo el lugar. Su madre se echó a reír y se dirigió a otra habitación. Luego volvió con un gatito naranja y esponjoso.

Lo cogió de las axilas y Taehyung lo observó desde todos los ángulos. Al averiguar que el esponjoso animal era macho, volvió a la mesa y lo posicionó en su regazo.

– ¿Cuál va a ser su nombre?- Dijo Taehyung acariciando su pelaje.

– ¿Que hay de Neko?- Su madre sonrió al nombre mientras los ojos de Taehyung se iluminaron. Cogió de nuevo al gatito y comenzó a achucharlo.

– ¿Quien es mi pequeño Neko? ¿Eh?¡Oh, si, tu lo eres! - Le daba besos esquimales en la nariz mientras le tenía abrazado. Terminó las porciones de pizza rápidamente y se llevó a Neko a la habitación para jugar con él. Por desgracia no tenía ningún juguete para gatos, por lo que decidió crear uno él mismo.

Después de buscar en su habitación algo para entretener a su nuevo amigo y al no encontrar nada, las llaves fueron su última esperanza. Las sacó del bolsillo y las levantó en el aire. Neko se puso en postura y se abalanzó hacia estas. Taehyung rió y siguió jugando más tiempo con él hasta que una de sus patitas cayó sobre su rostro.

– ¡Au!- Quitó la pata que estaba en su cara y regañó a Neko suavemente. – ¡No! Neko, eso no se hace.- Hizo una mueca antes de recordar que tenía el número de teléfono en su bolsillo. – ¡Ah, si! ¡Gracias por recordármelo Neko!.- Taehyung acarició el cabello del animal y sacó el número del bolsillo junto a su móvil. El pequeño gato siguió caminando por la habitación, pateando todo a su paso.

Estaba muy concentrado y se aseguraba de no borrar nada al entrar en la sección de los mensajes.

TaeTae:

Finding youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora