Nikolas
Una semana después...
Trabajo y mas trabajo.
-Esto es interminable...-me digo a mi mismo mientros leo unos documentos antes de firmarlos.
Esta empresa lo era todo para mi padre y jamás permitiría que se fuera abajo, todavía recuerdo cuando entraba a su despacho y lo encontraba con cientos de papeles y documentos justamente como estoy ahora, pero en ese momento yo era un niño, queria jugar con el, queria me enseñara a leer, que se quedara a dormir cuando tenia una pesadilla, que estuviera ahí en mis cumpleaños. Que patetico. A mi padre solo le importaba su estupida empresa y aunque quisiera dejarla, no podria, es como si lo desonraria, ademas dí mi palabra y eso es algo que tiene mucho valor para mi..
Entre a mi casa luego de llegar de comprar mi nuevo cochesito azul, queria enseñarselo a mi papá, queria que viera lo bonito que era y eso hice; fui hasta su despacho y lo encontré como siempre; con muchos papeles por todos los lados y su vista en la computadora
-Papá, mira lo que he comprado con mamá- dije enseñandole mi nuevo cochesito- es genial, se usa con controles remoto.
-Que bueno hijo- dijo sin siquiera mirarme.
-¿podriamos jugar un momento?-dije esperanzado
-Ahora no hijo, tengo que firmar muchos papeles...quizás despues- dije sin mirarme aún.
-¿seguro que jugaras conmigo?-dije aunque sabia que no lo iba a hacer pero tenia esperanza de que algun dia jugariamos hasta el cansancio.
-Si Nikolas ahora dejame solo, necesito concentrarme...
Pero nunca lo hizo, siempre ponia una excusa tras otra.
Sacudo mi cabeza tratando de borrar esos pensamientos, nunca tuve atención de mis padres, siempre estaban ocupados en sus propias cosas.
Ya ha pasado una semana desde que Layra llego a mi casa y todo parece ir bien; todos estan encantados con ella y ella tambien con ellos, pero conmigo es diferente, me evita a toda costa como si me tuviera algún tipo de vergüenza.
El trabajo se me esta haciendo eterno, apenas entro a trabajar y ya quiero salir, pero estas semanas han sido muy difíciles ya que la empresa tiene la gala de presentación del nuevo proyecto y necesitamos la presencia todos los accionistas y por esa razón todo debe de quedar perfecto y ahora mismo estoy revisando los ultimos detalles; la gala será en tres semanas, se hará en la misma empresa y necesitaremos una decoradora, la mejor de todas.
Cuando ya son las seis de la tarde, estoy desesperado por irme, quiero estar en mi casa y no se la razón o bueno, si... Quiero verla, hacerla enojar y ver sus reacciones, no se porque pero me gusta molestarla así incluso se ve mas atractiva.
Recojo todo en mi oficina y salgo de esta, afuera se encuentra mi secretaria en su escritorio y me dirijo hacia ella.
-Angela, guarda todos los contratos que faltan por mi firma, mañana necesito que convoques una reunión con todos los accionistas para hablar del contrato con alemania y de la gala de el próximo mes, tambien programa una cita con el señor Thomas Kepner, necesito hablar con el sobre su hija, me tiene harto- le informo y ella asiente y escribe todo lo que le digo- ah, y lo mas importante quiero que contrates a la mejor decoradora, quiero que todo el evento se vea impresionante, tambien contrata en buffet y los músicos que te pedí la semana pasada. Todo debe qiedar perfecto.
-Si señor, como diga, ¿algo más?-inquiere observandome.
-Por el momento no, hasta luego- digo despidiendome, ella me mira con los ojos muy abiertos y la boca en forma de "O"-¿pasa algo Angela?- digo con tono neutro.