Max, quien hasta hace unos segundos permanecía estático en su lugar, por inercia avanzó hacia la chica. Nicolas volteo a verlo y le lanzó una dura mirada, Max retrocedió, entendiendo el mensaje.
-Vámonos, Max - dijo Nico abriendo la vieja puerta de madera. Dio la vuelta al percatarse de que el chico aún seguía en su lugar, observando a Samantha, SU Samantha -. Max he dicho que nos vamos.
-Max... Por favor -Sam susurró con voz entre cortada. Tenía un hilo de sangre que bajaba por su mejilla y los ojos llorosos, con los cuales imploraba a Max que haga algo -. Sácame de aquí.
El subió su brazo, dispuesto a acariciar la cara lastimada de la chica. No quería verla así, no podía.
-La tocas y corto tu mano -dijo Nico con voz grave pero Max no paró. Sabía que no podía hacerle nada, era un imbécil -¿Quieres ser tú el próximo encadenado?... ¿O tu madre?
La mano de Max bajó de inmediato, suspiró y le dedicó una mirada de disculpa a la chica encadenada.
-Muy bien -musitó Nico satisfecho -. Ahora Vámonos.
Salió de la habitación, seguido de Max; aunque este último antes de irse miró a Samantha, y sin emitir sonido, le prometió:
Te buscaré.
N/A: ahora esperen otro siglo a que suba el siguiente.
Jaja no, mentira... Pero es verdad.
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Mi Acosador
Short StoryPensé que él había quedado atrás, que la relación ya estaba superada. Pero al parecer, Nico nunca se fue. Él si de mi mente, pero yo nunca de su corazón. Por eso se convirtió en mi acosador.
