Capítulo 9

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Compañeras, sueños y Charlas entre girasoles

—Veo que se divirtieron sin mi chicos. —nos separamos rápido y nos levantamos del piso.

—Solo desahogo mis penas con dulce y alcohol. —digo riendo y miro a Mike quien también sonríe

—Ajá... —nos mira extraño y Mike ríe— Si sabes que no puedes comer todo eso ¿verdad? —ella ríe y yo me encojo de hombros para no darle tanta importancia al asunto

—Keish, aquí está la carpe... —una chica entra al apartamento, pero cuando nos ve se detiene.

Ella mira de Mike a mí. Luego, se queda mirando a Mike. Se siente una tensión increíble en el ambiente, pero Keish decide cortarlo.

— Aria, ella es mi compañera de trabajo y mi excuñada, Fanny —ahora entiendo su mirada puesta en Mike— Fanny, ella es mi mejor amiga, Aria.

—Hola —rápido sé que ella y yo no nos llevaremos jamás. Me saluda con un beso en la mejilla— Keish me ha hablado de ti. Dice que eres

ese amor imposible de Mike. — Qué rapidita es para demostrar su hipocresía y marcar territorio. Prefiero fingir indiferencia.

—Ehhh... ¿Disculpa? —pregunto confundida

—Stephanie —Mike le da una mirada de advertencia a la tal Fanny.

— ¿Qué? —sale a la defensiva— Solo le dije lo que tu hermana me dijo. —él sacude su cabeza y se va a la terraza. Ella me dedica una sonrisa plástica mientras se sienta en el sillón.

— ¿Vas a trabajar? Pensé que estabas de vacaciones.

—Sí, pero Fanny necesitaba contexto sobre una publicidad que se hizo anteriormente y que volverán a realizar y la que la había trabajado fui yo. Así que la hice venir para enseñarle.

—Bueno, iré a mi cuarto —le dejo saber a Keish

— ¡Heyyy! —alarga la palabra— Tienen que ponerse a limpiar todo esto— señala el piso. Ruedo los ojos y me dedico a limpiarlo.

Hago oídos sordos a lo que Keish habla con su excuñada. Termino de limpiar y me voy al cuarto. Veo la hora en el reloj, 6:19pm. Prendo el televisor y empiezo a cambiar de canales. Mis ojos comienzan a pesarme y los cierro un momento.

—Sabes que sientes algo por mí. Siempre lo haz sentido.

—No, tal vez si lo sentí, pero no ahora. Recién corté con Guillermo. No puedo estar en otra relación.

—Yo haré que cambies opinión. —se fue acercando a mí.

—Mike, por favor. No me hagas esto difícil.

— ¡No! —exclamó— Tú deja de hacer esto más difícil. No te permites sentir algo por mí. Tienes miedo. —rozó su nariz con la mía— Déjame mostrarte que soy diferente.

—Mike...yo... —acerca sus labios a los míos y cierro mis ojos, pero una luz muy brillante llega a mis ojos y los abro.

— ¡DESPIERTA! —grita alguien y brinco en la cama

— ¿Qué rayos te pasa? —alzo mi voz y abro los ojos para ver a Keish corriendo las cortinas, detrás de estas se ve un día muy soleado.

— Te llamé y no contestabas. —salió del cuarto.

Me levanto y voy al baño. Mientras me cepillo los dientes escucho mi celular sonar. Debe ser Guillermo, otra vez. Me doy una ducha rápida y cuando salgo me envuelvo en una toalla. Tengo ganas de salir hoy. Aún con la toalla envuelta en mi cuerpo voy al cuarto de Keish.

EL DESTINO (Prontamente en físico)1ra parteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora