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Cualquier humano diría que jugar al escondite es inofensivo, que es un juego de niños que consiste en esconderse para que uno más los busque. Todos decían lo mismo, pero una persona en especial no lo creía. Para él era un juego entre la vida y la muerte.

Daniel, un viejo veterano había tenido una gran juventud llena de aventuras. Había viajado desde muy joven a diversas partes del mundo siempre buscando algo nuevo por ver. Pero lo que él no se imagino fue encontrarse con algo sumamente importante, aquello que estaba buscando toda la vida. Mas sin embargo ya no tenía fuerzas para seguir por lo que lo abandono.

Durante sus últimos 10 años de vida estuvo enseñando a su nieta y a sus amigos de ella a jugar a las escondidillas o escondite como algunos dicen. Los padres de los niños lo veían como algo normal, pues solo era un juego.

Cada tarde después de la escuela llevaba a los niños a una cabaña a las orillas del bosque, donde jugaban hasta tarde. Siempre a lo mismo, llegaban y comían una manzana bebían agua y el que tuviera menos semillas de manzana era el que debía contar.

Él les enseño a esconderse en donde no se puede ver y buscar en donde no se puede hallar. Con el paso del tiempo ellos se volvieron expertos en el juego.

Daniel era un viejo sabio, él hacía de todo para que los niños aprendieran sobre la vida.

Siempre decía:

"Témele a tu propia sombra, porque no siempre debes confiar en ella, algún día te sorprenderá y no estarás preparado"

"El miedo no existe, es solo una forma de despreciar a aquello bueno"

"Si después de los tormentos encuentras la salida, no confíes puede ser una trampa, mejor asegúrate de estar atento"

Lecciones de vida para los pequeños.

En un mundo como este hay que estar atento a cualquier situación, no confiar en las sombras que cargamos y tomar las decisiones correctas en el momento correcto.

Ig: giowattpad

JUEGO MORTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora