Eran las siete de la mañana, y se oyó un grito en la casa.
-¡Madre! ¿qué ocurre?- Dijo Fergus corriendo hacia donde su madre se encontraba.
-Fergus, tu hermano Jakob no esta en su cuarto y lo he buscado por toda la casa y no lo he encontrado. - Dijo la madre inquieta y con lagrimas en los ojos.
-No te preocupes madre, tranquilízate, yo me encargo de buscarlo. Seguro que no ha ido muy lejos de aquí. -Dijo Fergus tratando de tranquilizar a su madre.
-Está bien pero no vuelvas muy tarde con él.- Dijo la madre mirando fijamente a los ojos de su hijo.
-Bien, pues me marcho. - dijo Fergus.
Tras haberlo buscado por todas partes, se fue a la casa del mejor amigo Jakob.
-¡Hernán! ¡Asómate a la ventana! -Dijo Fergus, enfrente de la casa de Hernán.
Hernán se asomó a la ventana y dijo. -¿Qué ocurre?
-Por lo que veo estabas durmiendo, ya te vale estar durmiendo a las diez y media, en medio periodo de festivales.
-Si. Como has dicho estaba durmiendo, pero tengo mis razones. Anoche mi madre nos mandó a mi padre y a mi a llevar unos sacos al molino. ¡Pero como pesaban esos malditos sacos!
Pero, a lo que iba. ¿A qué ha venido usted aqui?
-Pues he venido a preguntarte si sabias donde esta mi hermano. -Dijo Fergus. -Pues, si te digo la verdad no lo se... Pero, ahora que lo pienso probablemente Glen si que lo sepa. -Dijo Hernán, y Fergus comentó a continuación. -Si lo supiera ya le habría preguntado, pero tampoco se donde se ha metido.
-Pues si no recuerdo mal ayer cuando estábamos Jakob y yo con él, nos dijo que..., iría al taller de hierbas, para preparar unas mezclas para unas bolsitas de incienso y otras de pétalos de flores. ¡Ah! Ahora que lo pienso. Puede ser que Jakob halla ido a ayudarlo.
-No puedo negarte que puede ser posible que halla ido, porque conociéndolo es probable que si fuera. Bien, muchas gracias ya nos vemos esta noche en la fiesta.
-Si. Voy a ver que hago, aunque no hay ganas de hacer nada.
-Adiós.
-Adiós.Mas tarde Fergus llegó a la casa de Glen, la cual estaba conectada al taller de hierbas.
-Glen. ¿Estas ahí?
-Si, pasa, está abierto.
(Entra al taller)
-Y ¿qué le trae por aqui su alteza?
-Estoy buscando a mi hermano. ¿Sabes donde puede estar?
- Pues, si te digo la verdad acaba de estar aquí, pero se ha ido hace unos minutos.
-Pero. ¿Sabes donde está ahora?
- Aaaa. Si, acaba de ir al lago mayor a buscar unas hierbas que me hacen falta y se me han acabado.
-Vale. Muchas gracias ahora creo que voy a ir a buscarlo, porque mi madre está muy preocupada.
-Vale. Pues luego os espero a los dos.En el lago mayor. Se encontraba Jakob recogiendo unas plantas medicinales, las cuales el anciano Glen le pidió que llevara al taller.
Fergus se acercó sigilosamente sin hacer ningún ruido. Pero Jakob, siendo un gran cazador, ya que en muy poco tiempo se convirtió en uno de primera clase. Obteniendo las mejores calificaciones en todas las asignaturas que tenía, siendo justo con todas las personas y siendo un cazador de primera clase. Debido a las anteriores razones, Jakob se dio cuenta de inmediato de que tenia a alguien detrás, pero lo más sorprendente era es que sabia y reconoció a la persona sin ni siquiera mirarla o que pronunciará palabra.
Tras una no muy larga charla entre Fergus y Jakob, se retiraron al taller a dejar las plantas. Se despidieron de Glen y más tarde se fueron a su casa, a descansar.
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La llamada del cielo y del infierno
CasualeUna luna maldita para la tierra, un destino por decidir, un futuro por crear y una historia por escribir. ¿Cómo acabará esta historia?