Inerte, así me siento ahora. Estoy quieta rezando para que el avión no se vaya abajo, supongo que el miedo es normal ya que es la primera vez que viajo en avión. Lo único que quiero es bajarme pero sería algo tonto que una chica de 17 años se tiré de un avión en pleno vuelo, más aún si esa chica vomita en su propio asiento que es lo que voy a hacer.-Cualquier cosa no dude en llamarnos, estamos a su disposición
-Gracias- deberían botarme del avión ahora mismo
Al subir quería que nadie supiese de mi existencia para que no se dieran cuenta del miedo reflejado en mi rostro, y ahora al pasar todos voltean a mirarme recordándome como la chica que vomitó en su asiento. Y no veo por qué cuestionarlos ya que tienen razón, no me costaba nada usar esas bolsitas que por cierto tienen un aroma suave.
Tengo una bonita sensación al pasar por el asiento que ensucié, me cambiaron por el que está dos sitios atrás. Ahora tengo más confianza al caminar dentro del avión, es un gran pero insignificante avance. Parece ser bueno porque realmente quiero ir al baño.
Mi mamá, siempre reluciente y con un fuerte carácter, prepara la lonchera mientras me cambio para ir al colegio. En realidad es ella la que me cambia, yo sólo me hago la dormida. Tocan la puerta y mi mamá no tiene más remedio que abrirla.
- Que disfrutes el viaje - me dijo esbozando una sonrisa
De repente el hombre forcejea a mi mamá y se tira abajo con ella.
La última parte del sueño hizo que me despertara, son las 6 de la mañana según el reloj de la pantalla del avión. Quiero dormir otra vez y terminar ese sueño para darle un buen final pero como la suerte siempre está de mi lado suena el celular. Era Clara, mi amiga.
- Steph, ¿cómo estás?
- Como crees, es mi primer vuelo - respondí asqueada
- Si, imagino esas enormes ganas de vomitar
- Clara! —regañé a mi amiga por su mal comentario
—Está bien, sólo bromeaba - dijo defendiéndose
—Bueno, falta una hora para aterrizar
- De eso quería hablar
- No entiendo
- Tu tío, el hippie... —sonreí
- No es hippie, sólo es protector y amante de los árboles —me sentí rara defendiéndolo
—Me llamó y dijo que no podías quedarte en su casa este verano
- Qué? - hijo de mi abuela
- Me preguntó si podías quedarte en mi casa y acepté
—¿Y por qué no me llamó? ¿Y por qué te llamó a ti?
- ¿Steph? Es tu tío, no esperes a que se comporte como una persona normal
- Sí, lo sé - supongo que eso viene de familia- Y entonces...
- Steph estaremos las vacaciones juntas!- dijo celebrando telefónicamente aunque creo que esa palabra ni siquiera existe
No sé que decir, la quiero pero vivir con ella sería para mí un dolor de cabeza.
- Esto es genial, espérame en el aeropuerto a las 8
- Ah si, también te quería decir algo
Miedo c:
- Dime
- No voy a poder recogerte porque... los domingos por la mañana suelo cuidar niños y como tu tío me llamó hoy por la madrugada...- sonó algo vacilante
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Perdida en Australia
Teen FictionLas vacaciones pueden ser divertidas con la persona indicada, pero no es el caso Steph. Al vivir en la casa de su mejor amiga, tendrá que lidiar con un problema, él.