2.

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××

-No entiendo, no te conozco, no sé porque haces esto.

-Ay, querida... -negó con la cabeza- yo tampoco entiendo porque estabas semi desnuda bajo aquella capa, ¿querías insinuarte a mi hermano?

-...¿Hermano?

-Si, Gaara, el Kazekage, aquel "señor" -volvio a reír- él es mi hermano, vamos, ¿te gusta?

-¡No! -____ se levantó brusco de su cama-. No sé quién eres, sólo vete de mi habitación.

-Oh vamos, ¿así me lo agradeces? -se levantó también y quedó cara a cara con la chica-. Te di ropa, y combina con tus ojos, querida... ¿me repites tu nombre?

-____, me llamo ____.

-Querida ____... Yo soy Temari, el señor Kazekage es Gaara, también tenemos otro hermano pero espero que no te le cruces en toda tu vida, es mala influencia... cuentame, ¿Por qué estás aquí?

Se volvió a sentar en el borde de la cama y tanteó un lado para que ____ se sentara junto a ella.

Negó con la cabeza.

-N-No... Temari-san, has sido buena conmigo, y te lo agradezco, pero no hagas preguntas, por favor -se abrazó a si misma, y en serio se sentiría mal contarle lo que hizo a la persona que recién conoce y que fue tan amable al regalarle ropa, que incluso "combinaba con sus ojos".

-Cualquier cosa, no creo que sea muy grave, estás aquí, en una habitación con cama y baño, y con una gran vista al cielo, podría ser peor y lo sabes -respondió la rubia, ya imaginándose mil cosas malas que aquella chica haya podido hacer.

«¿Asesinato? se ve débil. ¿Infiltración? podría ser, aunque no tiene banda ninja...»

-Y-Yo... robé, Temari, en serio lo lamento -se inclinó a modo de disculpas- tu hermano, el Kazekage, dice que mi castigo es un cuestionario... pero me tengo que ir.

-Ya veo... -asintió-. Hablaré con él entonces -se levantó y caminó hasta la puerta-. Aunque no me sorprendería que él te pidiese que te quedarás aquí, eres guapa... y sé como es mi hermano, desde el primer día te debería haber metido en prisión, algo tienes, ____.

Salió y cerró la puerta tras de si, no mucho después se lograron escuchar unos murmullos afuera, ____ curiosa pegó su oreja a la puerta para escuchar mejor.

-¿Qué hacías ahí a dentro, Temari? ¿hay alguien? ¿¡es una chica!?

-¡Calla, Kankuro! y si atreves a poner un solo átomo de tu cuerpo dentro de esa habitación, cortaré cada uno de tus miembros... y hablo de todos.

Logró escuchar una risa nerviosa y luego los pasos de ambos alejarse a quien sabe donde.

Se sentó en su cama y miró en exterior, Temari tenía razón.

No recordaba mucho de lo que le habían enseñado alguna vez en la academia, ni siquiera recordaba como se llamaba la aldea en la que está ahora mismo o su kage, o al menos eso si gracias a Gaara, el Kazekage.

Pero de lo que si estaba segura y cualquiera lo estaría, es que un robo se penaliza y no con unas simples preguntas como las que el pelirrojo le hacía, debían encarcelarla, al menos por unas semanas.

Pero agradece a Dios si hay uno que el tal Kazekage fue lo suficientemente amable con ella por dejarla ir a cambio de responder su cuestionario.

Pero no podía seguir esperando, ya era tiempo de irse, pues estaba segura que ellos estaban cerca.

××

Gaara sentía los frescos soplos de viento mover su rojizo cabello.

Pensaba mil cosas a la vez, quizás algo nomal en un líder, en especial en uno de una aldea tan grande como lo es Sunagakure.

Jigoku. [Gaara] #DattebayoAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora