- Capítulo 1 -

7.5K 99 8
                                    

- NOTA -

Antes que nada, daré un aviso a cualquier persona ajena a la simpatía por el amor entre personas homosexuales, que tenga algún problema con el shipping 'Larry Stylinson' o cualquier otra pareja que se comporte de manera homosexual que aparezca en este fan fiction.

Por favor, tan sólo retírate. 

Siento la molestía a los lectores.

____________________________________________________________

Como me era costumbre, me encontraba corriendo por el extenso pasillo de mi secundaria; con los pequeños auriculares negros volando por mi cuello, mi mochila colgando de mi antebrazo y llevando puesta cada cosa que se me interpusiera en el camino.

Divise la puerta del salón de Química, desacelere súbitamente para frenar a dos minúsculos centímetros de la puerta, evitando una colisión contra ella y un dolor en la frente por lo que resta de la tarde. Mi pecho subía y bajaba incesante, mi respiración era agitada, y mis zapatillas seguramente se quejaban. Exhalé una gran acumulación de aire y tomé el pomo de la puerta empujando su peso y mi mano temblorosa.

- Discúlpe. - Murmuré con mi escaso aliento - se me hizo algo tarde. - Justifiqué a la profesora que me veía con su cara de perro diaria. No me animaba a ver a los ojos de los demás en el salón, quería ahorrarme ese pequeño momento de vergüenza.

- 15 minutos tarde, Tomlinson. - Recordó la profesora cara de can examinando mi vestimenta seguramente algo desarreglada.

- Lo sé, no volverá a ocurrir. - Murmure nuevamente con la cabeza gacha. Claro, no volvería a pasar. Me lo repetiré infinidad de veces hasta que yo mismo me lo crea.

- ¿Puedo pasar? - Pregunte tímidamente, temiendo su respuesta. Asintió volando los ojos. Esbozé un intento de sonrisa, generando una mueca penosa. Cerré la puerta detrás mío, la mayoría de las miradas ya no eran hacía mi, tranquilizándome. Tomé asiento al lado de la única persona en la que podría confiar en este estúpido salón.

- Hola. - Sonreí a Gemma que me miraba de brazos cruzados. - ¿Qué? - Susurré, ya sentado a su lado; lo que menos quería era llamar la atención de la cara de can, que dicho sea de paso, ya estaba regañando a otro alumno por hablar más fuerte de lo debido. Ugh.

- ¿Qué? ¿¡qué!? - Gritó entre susurros - ¿¡Estas son horas de llegar Louis William Tomlinson!? - Su cara reflejaba enfado, le dedique una sonrisa traviesa, como cuando un niño roba una galleta.

- Lo siento, me quedé dormido. - Me excusé. Mala excusa, si, pero era la verdad.

- ¿¡Eso te parece una excusa!? - Susurró nuevamente. Sinceramente, no. Expulsé un suspiro agotado y negué con la cabeza y mi mirada gacha. Estaba mirando el suelo cuando una lágrima resbaló por mi mejilla, dejándose explotar a un lado de mis zapatillas. Sentí la presión de la palma de Gemma en mi hombro.

- ¿No dormiste anoche? - Pregunto. Negué con la cabeza otra vez. Un nudo se formó en mi garganta.

- ¿Tuviste problemas con...? - No termino la oración, yo ya había llevado mi frente en alto, me había tragado el nudo en mi garganta, las lágrimas estaban controladas y mi armadura me había cubierto. Mire a Gemma fríamente, ella entendió que no quería tocar el tema.

- Gemma hagamos la actividad. - Dije fijándome en la pizarra y evitando cualquier relación con ese tema. Gemma asintió dudosa y me explicó lo que me había perdido.

El día pasó así... Con mi autoestima por los suelos. Gemma hablaba conmigo, bueno, con mi presencia. Mi mente vagaba de aquí para allá y viceversa. Pensando en mis problemas, en los de las demás personas, pensando en la vida de aquel grillo y también de la golondrina que revolotea por allá.

- Ya. Louis, últimamente se me ha dado la idea de tener hijos. - ¿La golondrina cuánto tiempo de vida tendrá? Me gustaría ser un pájaro. No tendría tantas preocupaciones como al ser un adolescente fracasado con problemas.

- ¿Sí? -. Balbuceé.

- Sí, y tú eres el único hombre, ya sabes, cerca mío hasta ahora. Digo, serías un gran padre-. ¿Y los grillos? ¿viven acaso más de un día? ¿las golondrinas comen grillos? Si lo hacen no me gustaría ser una golondrina. El grillo debe tener su familia, hijos, etc. Pobre.

- Claro. -. Asentí.

- ¿Tendremos sexo en tú casa o en la mía? -. Biología. ¿Quedó tarea de biología? Tengo que encontrarme con Peach para terminar el trabajo ese.

- Cualquiera. - Agite mi mano en el aire.
¿Peach no tenía viruela? Tendré que avisarle a...

- ¡Louis! - Chilló Gemma sacándome de mis pensamientos.

- ¿Qué? - Pregunté algo alarmado.

- Te acabó de ofrecer tener hijos conmigo y aceptaste. Sin mencionar que aceptaste con ello tener sexo en tú casa. - Dijo revisando sus uñas. Un rubor esparció mis mejillas.

- Lo siento, es que... - Excusa, excusa.

- Ya, no quiero oír excusas Tomlinson. - Sentenció Gemma - no quieres hijos conmigo. - Lloriqueó falsamente, reí.

- ¿Y qué me decías? - Pregunte ya en mis cinco sentidos. Ella se incorporó y aclaró su garganta.

- Pues verás. ¿Recuerdas a mi hermano? - Pregunto mirándome con una ceja enmarcada.

- Uhm... ¿el que vive en Chesire? ¿con tú padre? - Dije haciendo memoria.

- El mismo. Al que voy a ver todas las navidades. - Señaló - Pues, vendrá a vivir aquí. En Doncaster, con mamá y conmigo. - Se encogió de hombros y pateó una lata de refresco vacío.

- ¿Eso es malo o...? - Reí al ver su expresión de 'ugh'.

- Es neutral. - Hizo una mueca - ¡Es que es un niño! Y... Y... Molesta. - Se cruzó de brazos y sopló un cabello en su frente.

Sonreí.

Por lo que siempre hablaba de ese chico; era molesto, un niñato, pesado, etc. Me imagino a alguien de estatura baja parecido a Gemma viendo que hacer para que ella se salga de sus casillas.

- ¿Vendrá contigo a la escuela? - Pregunte. Ella asintió pesadamente.

-¡Sí!- Se quejo revoloteando sus manos por el aire - ¿Porqué la suerte no está de mi lado? - Dramatizó. Reí.

- ¿Cuándo llegará? - Pregunté, Gemma pensó la respuesta.

- Mañana. Me avisaron el viernes y eso. ¿Puedes creer? Mañana tendré que esconderme de él hasta en el retrete del baño. - Sollozo.

- Exagerada. - Sonreí y salimos al fin de allí para dirigirnos a nuestros respectivos hogares.

_

Hola, este capítulo fue vagamente editado desde su primera publicación.
Saludos ;)

- Mary.

Enchanted || Larry Stylinson (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora