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Era una cálida noche en la ciudad de Paris, todo era pacífico. Últimamente no habían tantos akumas, eso era relajante para los grandes héroes de Paris.
Esa noche estaban en la torre Eiffel, se volvió una linda costumbre juntarse ahí todas las noches desde ese día. Ladybug se hallaba en las piernas de Chat quien le pasaba distraídamente la mano por su cabellera.
Inconscientemente ambos estaban pensando en lo mismo.
-Flashback-
Marinette iba demasiado atrasada a casa, tenía muchos deberes y debía juntarse con Chat. Aunque le costara asimilarlo, estaba cediendo a sus encantos.
Iba tan distraída que no vio a un rubio acercarse igualmente distraído, haciendo que ambos chocasen en una pose un tanto comprometedora. Al chocar Marinette cayó encima de él.
Marinette se levantó totalmente sonrojada, sus sentimientos por el seguían ahí intactos y más ahora. Adrien por su lado estaba un poco confundido, esa escena le recordó muchísimo a Ladybug, y muy sonrojado igual.
La chica se arregló un poco y salio corriendo, dejando al rubio en el suelo mucho más confundido.
-Fin Flashback-
Ladybug sacudió su cabeza, solo fue un accidente nada más. Al hacer ese movimiento Chat se asustó pensando que su lady se había enojado por acariciarle el pelo. Ladybug se sentó haciendo que quedaran frente a frente.
- ¿M'Lady?
- Perdón Chat, estaba pensando en cosas locas.
- ¿Se puede saber qué?
Pregunto coqueto acercándose peligrosamente. Sus labios se rozaban y sus respiraciones chocaban, sin pensarlo Chat unió sus labios en un beso dulce.
Al separarse Ladybug abrazo a Chat escondiéndose en su pecho mientras este acariciaba su cabeza.
- Chat.
- M'Lady.
- Ese beso no afectara nuestra amistad, ¿cierto?
A Chat le dolió un poco el rechazo de su lady. Debía sacarse sus dudas de una vez por todas.
- M'Lady, ¿Tú me quieres?
- Claro que si gato tonto.
- No en ese sentido, tú sabes a que me refiero.
- Y-yo...
- Entiendo, no te preocupes. –Chat beso su cabeza y se levantó- Adiós m'lady.
Tomo su bastón y se fue dejando a Ladybug totalmente confundida y culpable. Esta tampoco perdió tiempo y se fue a casa. Todavía estaba analizando lo sucedido, ¡Lo rechazo!
Se dejó caer en el pequeño diván de la habitación dejando caer unas lágrimas, había rechazado a Chat Noir, su Chat. Todavía no entendía bien sus sentimientos hacia él, pero ahora todo estaba claro. Ella lo quería mucho, tal vez no tanto como Adrien.
Mientras en la mansión Agreste, Adrien estaba en su cama deprimido. Debía admitir que estaba un poco enojado con su lady, ¿por qué le dio falsas esperanzas?
AL otro día se levantó de muy mal humor, muy mal humor. Plagg decidió no molestar. Al llegar a la escuela ni saludo a Nino. Marinette se preocupó y decidió esperar al receso para hablarle. Para su suerte el chico se quedó en el salón.
