Capítulo 29

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-Y tu quien eres para decirme como debo tratar a las personas? -criticó- tu no eres nadie __________ -miró fijamente los ojos de ella.
-No te estoy diciendo como debes tratar a las personas Riker, solo que tus actitudes así me molestan -argumentó ella.
-Pues que mal por ti -sonrió- así soy yo, y si no te gusta -la miró- no me importa.

Tenía que ser tan arrogante?, eran esas, precisamente esas actitudes las cuales ________ no aguantaba.
Ella solo suspiró y se encaminaba nuevamente hacia la cocina.

-¿Iras a coquetear con tu nuevo amigo Alex? -mierda por qué decía eso ahora?
-Eso es algo que a ti no te importa no? -criticó enojada.
-A lo mejor eres igual que las demás -que trataba de decir con eso?
-Y como son las demás? -preguntó ____ acercándose a él.
-Son unas putas más -dijo de lo mas calmado, ________ lo miró y no pudo aguantarse, una cachetada sonó en la mejilla de él.
-A mi no me tratas así, no me juzgues, tu conoces mi nombre, no mi historia -lo fulminó con la mirada y salió de allí.

Como se atrevía a llamarla así, nunca nadie la había tratado de esa manera, porque tenía que ser él?, esto es oficial, ________ estaba sintiendo odio hacía él.
Enfurecida entro a la cocina azotando la puerta, sin percatarse que Alex se encontraba sentado en una silla comiendo un durazno.

-Oh, lo siento -se disculpó ella después del portazo.
-Veo que estas un poco enojada...se puede saber por que? -preguntó.
-Hay cosas que no valen la pena contar -acotó ella tomando un vaso de agua.
-Bueno, no insistiré -guardaron silencio un par de minutos- creo que al tal Riker no le caí muy bien -articuló.
-No te preocupes, él es así, es frío, desagradable, necio, arrogante un completo imbécil -criticaba con rabia.
-Vaya, veo que lo aprecias demasiado -rió- tan pesado es el tal Riker? -preguntó.
-como no te imaginas -detalló ella.
-Y porque es así? -preguntó nuevamente.
-Hay cosas que te enteraras con el tiempo, yo no te puedo decir nada sobre él, yo se porque él es así, pero no me corresponde decirte Alex, lo siento -argumentó apenada.
-No te preocupes _______, no me importa tampoco.., él no me importa -dijo lavándose las mano y secándoselas con un paño.

Lamentablemente ella no podía decir lo mismo, no podía decir, "no me importa Riker", porque realmente, aunque este muy dentro de ella, sí le importaba, desde que hubo ese primer beso entre ellos, desde aquellas miradas que se cruzaban. Simplemente no podía decir aquello aunque quisiera, aunque el halla dicho que esos besos fueron un error, ella no los calificaba así, para ella no fueron un error.

Estaba despidiendo a Alex en el patio, quien se iba en su coche, intercambiaban mirada y sonrisas, podría haberlo conocido hoy mismo, pero era como si lo conociera de toda la vida, la confianza que tomaron fue demasiado buena.

-Bueno ______ ya me tengo que ir -dijo depositando un tierno beso en la mejilla de esta- nos vemos mañana.
-Vale, que te valla bien.

Lo vio subirse en su auto y salir por completo de la casa de los Lynch.
Alex era un muchacho muy distinto, era muy atento con las personas, demostrativo, tenía un carisma demasiado agradable, y lo mejor era que la entendía a la perfección y siempre era él mismo. Eso suponía ella.

Entro a la casa, que se encontraba en completo silencio, subió las escaleras para ir a la habitación de Rydel quien ya había llegado de la oficina y ni siquiera la saludó cuando llegó, eso le pareció completamente extraño. Cuando llegó a la puerta, tocó, pero su amiga no abrió por lo cual entró sin el consentimiento de nadie.
La vio tendida en su cama boca abajo, se acerco a ella, y no le gustó para nada la tristeza que presentaba su rostro en esos instantes.

-Ryd, que te pasa? -preguntó ella sentándose en la cama.
La joven no articulaba palabra alguna, solo se lanzó en brazos de ________, y comenzó a llorar desconsoladamente.
A ________ se le partió el corazón verla así, aunque no era nada de ella, se había ganado todo su cariño.

-Nadie me quiere ______ -dijo entre llanto Rydel.

La verdad la entendía, la joven siempre estaba sola, dibujando, pintando...etc..jamás se juntaba con amigas en sus casas ni nada. Era obvio se sentía sola.

-No digas eso Rydel, muchas personas te amamos -consolaba ella.

Solo soy una empleadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora