Capitulo 3| ¿Qué estás haciendo conmigo?

2.1K 106 24
                                    

Narra Vegeta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narra Vegeta.

Esto tiene que parar.

No puede ser posible.

Ni en sueños, con una mirada, o acciones le fuí infiel alguna vez a Bulma.
Ella es mi soporte, mi ayuda, mi confort, mi paz.

Me despojó de todo lo que alguna vez consideré importante, para enseñarme lo que realmente tenía valor en mi miserable vida.

Era mi mujer.

Mi todo.

Entonces...

—¿Por qué estoy pensando en tí?.

Kakaroto.

Tienes que joderme la existencia siempre.

Maldito.

—Amor —Bulma entra en nuestra habitación, con una charola de plata en la mano— ¿Despertaste?

Asiento y señalo un espacio vacío para que ella se acomode conmigo en la cama.

—Wiss llamó. Dijo que pasaría por tí y Goku en media hora —informa mi esposa. Lo último que necesito es escuchar ese nombre ahora mismo, necesito borrarlo de mi mente. Me concentro en la fricción, la poca tela que nos separa a ambos, las transparencias tan finas que viste Bulma por la mañana; siempre me provoca de este modo. Sabe que es mi desayuno favorito— tienes que levantarte rápido Vegeta. Date un baño, deprisa.

—Muero de hambre mujer —susurro en mi somnolencia. Ella señala la charola con comida que trajo para mí, preciona el utensilio picando un poco de fruta pero no dejo que acerque el tenedor en ningún momento— hambre de tí.

Aclaro.

Los dos compartimos esa mirada complice y no tarda mas de un segundo en arrojarse a horcajadas sobre mí. Aferro ambos brazos sujetando sus muslos, genero la presión adecuada para cargarla de camino al baño; nos ducharemos juntos. No pierde el tiempo, toma mis labios en uno de esos besos desesperados y primitivos que sabe que me gustan.

Su cabello corto recae un poco mas abajo de sus hombros, enredo una mano en las finas hebras y la apego más a mí atrayendo su cuello buscando invadir su cavidad.

La escucho gemir y suspirar contra mis labios.

Al parecer todos esos inmensurables roses y caricias nos jugaron una mala pasada. Bulma conduce una de sus manos a mi pantalón, ejerciendo una temeraria presión sobre el bulto que se formó dentro.

Suspiro, ella sonríe.

Con sus ojos azules persigue cada uno de mis movimientos viéndome en notable lujuria.

Abandono ese beso húmedo que sostenemos, para arrinconarla en la pared más cercana a unos cuantos pasos de la regadera. Mi mente se corrompe con la idea de hacerla mía bajo la ducha, con las gotas de água resbalando sobre su delicado cuerpo; sin importar los pensamientos que esta mañana me estaban atormentándo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 30, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

¿Me enamoré de mi enemigo? | ResubiendoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora