A Través De Cartas

Capítulo 3

Génesis se da un rápido baño y se pone de nuevo su vestido, no quería que Tony le llevara ropa nueva, lo único que quería era marcharse de esa casa lo más rápido posible aunque algo que le digiera que se debía quedar, quizás esta era una señal de Peggy.

Luego de pensarlo un rato y considerar sus posibilidades decidió que lo mejor sería marcharse lo antes posible, corrió lo más rápido que pudo hacia la entrada y salió de la casa.

Al salir de la casa se encontró con un cielo gris y nublado, sin duda iba a llover, comenzó a llamar a una línea de taxi que conocía pero no le atendían. De un momento a otro comenzó a llover de una forma inimaginable, sin pensarlo salió corriendo para encontrar un lugar en el cual escampar la lluvia, conforme corría comenzó a escuchar un auto que se acercaba cada vez más hacia donde ella estaba, volteo con la esperanza de que fuera un taxi pero se encontró con la mirada de Tony.

-Hey ¿Te llevo? -Pregunto con tono seductor conforme bajaba la ventana del auto.

-No gracias -En esos momentos se sentía tan avergonzada, lo menos que quería era mirarlo a los ojos.

-Ven, sube -Su auto comenzó andar despacio, esperaba una respuesta y no aceptaría un no.

-Tony estoy completamente mojad-Rodo los ojos y continuo su caminata.

- ¿Y? -Freno el auto haciendo que Génesis se detuviera e seco.

-Que te mojaría todo el auto -

Siguió caminando pero esta vez acelero el paso intentando llegar a la línea de taxi que se encontraba a menos de una cuadra de donde estaba.

- ¿Y eso que importa? -Grita conforme se baja del auto y corre en su dirección.

-Entra al auto, llueve mucho -

Ordeno Génesis dándole a entender que no iría con él a ningún lado.

-Ya lo sé pero eso lo hará que te deje aquí, sola, mojándote -dice conforme levanta a Génesis sobre su hombro y la hace entrar al auto.

- ¿Sabes? No tengo tanto dinero como para pagarte la tapicería del auto -Su mirada bajo hacia donde estaba la de Tony y se dio cuenta de que estaba observado descaradamente sus senos. Maldijo en su interior por no llevar brasier aquel día.

-Veo que la lluvia delata a las mujeres que no llevan brasier -Rio mientras Génesis se tapaba avergonzada.

-No mires -dijo sonrojándose por la vergüenza.

-No tienes por qué avergonzarte, es una parte muy bonita de tu anatomía.

-Me quiero ir a mi casa -dijo volviendo el rostro hacia la ventana.

- ¿En dónde vives? -Al mirarla su cara era todo un poema.

-En una casa, con una puerta y cuatro ventanas -Rio por lo bajo-. No vivo muy lejos de aquí, como máximo a unas veinte cuadra.

-Dame la dirección exacta por favor.
Luego de que le diera la dirección acelero el auto y condujo por las calles de la ciudad, en menos de cinco minuto ya se encontraban frente a la casa de Génesis, estaba bajo y antes de entrar a la comodidad de su hogar se voltio y le regalo una encantadora sonrisa a Stark.

-Muchas gracias Tony, y... Por cierto, siento mucho el espectáculo de ayer-Grito antes de entrar a su casa.

Tony condujo en dirección a su casa, no se estaba sintiendo bien, lo único que hacía era darle vuelta a todo lo que le había dicho aquella bella mujer.

Al encontrase en el interior de su mansión se despojó de todas sus pertenencias y se metió en la ducha.
Mientras se relajaba con una ducha de agua caliente comenzó a escuchar las gotas de lluvia que caían con fuerza, puso música clásica que le ayudara aclarar sus pensamientos. ¿María no era su madre? Aquella pregunta estaba rondando en su mente desde que Génesis lo había dicho, no podría creer que aquello fuera cierto pero en su mirada podía intuir la sinceridad con la que afirmaba lo que desea.

-Tengo curiosidad por saber lo que me tiene que decir esa mujer -Salió de la ducha y sin pensarlo se vistió para volver a casa de Génesis, ella tendría que contarle todo. Él tenía que saber la verdad, la curiosidad lo estaba consumiendo por completo.

Aparco el auto frente a la casa donde había dejado a Génesis hace unas horas y se dispuso hacerle frente a la verdad, toco varias veces la puerta sin obtener una respuesta. Decepcionado de que nadie saliera a su encuentro se dispuso a marcharse de aquel lugar, estaba a punto de arrancar el auto cuando escucho que le tocaban la ventana del copiloto.

-Hola Tony -Su sonrisa era tan hermosa que no pudo evitar sonreír, salió del auto y se situó al lado de ella.

-Hola Génesis ¿Podemos hablar? -Génesis asiente y se dirigen junto hacia la entrada de la casa-. Muchas gracias.

Le echó un vistazo a toda la casa, era muy bonita. Todo en aquel lugar estaba limpio y muy bien arreglado, pudo notar que en la esquina derecha tenía una estantería repleta de libros.

-Ven -dice Génesis dirigiéndolo hacia un gran sillón rente al cual estaba una gran televisor-, ¿Quieres algo de beber?

-Sí, agua -Aquel comentario hiso que se acordara de lo que ella le había pedido la primera vez que se vieron.

-Espérame aquí -dice mientras desaparece de la estancia pero al rato vuelve aparecer con una bandeja de Cup Cake y dos vasos de leche.

-Gracias -dice al tomar el vaso junto de leche.

-Pensé que sería mejor tomar leche, por eso de la lluvia -Ríe nerviosa mientras se sienta-. ¿Te gusta la leche? Porque yo te la traje sin saber si te gustaba.

-Si me gusta y más en un día lluvioso como este -Toma un sorbo y voltea en dirección a Génesis.

- ¡Gracias a Dios! -Toma dos Cup Cake, uno para ella y el otro se lo entrega a Tony-. Dime de que quieres habar -Al pronunciar las palabras se da cuenta de que tiene la boca llena y se sonroja al instante-. Perdón -dice mostrándole una encantadora sonrisa.

-Lo de mi madre -Su mirada se torna triste, hasta ella podía notar que aquello le dolía- ¿María no es mi madre verdad? -Génesis se inmuto al instante, no sabía cómo responder aquella pregunta-. Dímelo Génesis -Stark la sujeta por los hombros lográndola sacar del trance en el que se encontraba.

-Tony no... No quiero lastimarte pero debes saber que María no es tu madre biológica. No deseo que te sientas mal, piensa que aunque no es tu madre de sangre fue capaz de darte todo el amor que necesitabas, ella estuvo para ti en cada momento de tu vida -Cuando termino de hablar se fijó en su mirada, podía notar la tristeza en sus ojos y por alguna razón aquello le rompió el corazón.

- ¿Cómo sabes eso? -La toma de las manos y con la mirada le suplica que le diga la verdad.

-Porque conocí a tu madre biológica, ella era mi mejor amiga -Levanta la cara de Tony conforme va pronunciado aquellas palabras.

- ¿Ella está viva? -En ese momento ya Tony tenía los ojos llenos de lagrimas.

-No Tony, ella murió hace dos meses.

- ¿Si murió hace poco porque nunca me busco para decirme la verdad? -Pregunta mirando a Génesis-. ¿Porque? -Grita levantándose de su asiento.

-Tony cálmate, sé que todo esto es difícil -Se levanta y abraza a Tony, él no se niega y apoya la cabeza en su hombre mientras una lagrima se le escapa una lagrima.

-Ayúdame, necesito saberlo todo -dice entre sorollós

-Te lo contare todo Tony, pero será poco a poco, tal y como lo ha decidido tu madre.