Welcome to the Planet

Capítulo 2

Clark's POV

Me despierto sobresaltado y me doy cuenta de que estoy completamente empapado a causa del sudor. Una vez más, las pesadillas interrumpen mi supuesto sueño reparador. Las imágenes de Zod no paran de repetirse en mi cabeza, y el sonido de su cuello romperse me provoca escalofríos. Pero, para variar, hoy ha aparecido ella a mi lado, consolándome.

Realmente la echaba de menos.

Consciente de que me va a resultar imposible volver a dormir, me levanto de la cama y me dispongo a salir a correr como cada madrugada. Con suerte amanecerá pronto y podré disfrutar de las vistas. Cojo una camiseta vieja, me pongo las deportivas y salgo a las oscuras calles de Metrópolis.

Es algo que de verdad me relaja, y sin embargo, hoy no consigo descansar la mente: Lois ocupa cada uno de mis pensamientos. Jamás me había sentido así, tal y como me siento con ella. Desde que la encontré siguiéndome en aquella nave, sé que es alguien especial. Simplemente no se puede comparar con nadie que haya conocido hasta ahora. Es valiente, atrevida, independiente e increíblemente hermosa. Se hace valer, no acepta un no por respuesta; y aunque no lo muestra demasiado, tiene una enorme sensibilidad. Es, sin duda, una mujer magnífica.

Nunca he sido demasiado popular. Y no solo por mi timidez; siempre he sabido que era diferente, incluso antes de llegar a desarrollar mis habilidades. Cuando te sientes tan solo, aprendes a vivir con ello y a mirar a tu alrededor de una forma distinta, mucho más minuciosa e inteligente. Y puedo decir que, gracias a eso, tengo una gran capacidad de observación que me permite calar a las personas rápidamente. Sin embargo, con ella es distinto; es verdad que es como un libro abierto y su carácter fuerte salta a la vista, pero eso no quita que desee saber mucho más de ella, porque algo me dice que todavía me falta mucho por conocer y que vale la pena descubrir cada pequeño detalle que la rodea. Siento que Lois es un misterio que necesito resolver.

Poco a poco veo cómo el horizonte empieza a brillar y la luz del sol baña el cielo de un hermoso abanico de colores. Llego a la bahía y contemplo el paisaje que tengo enfrente. Siento cómo esa agradable calidez me llena de vida, y un día más, agradezco a mis padres donde quiera que estén por haberme dado la oportunidad de vivir trayéndome hasta este mundo que siempre consideraré mi verdadero hogar.

Me dejo invadir por los sonidos que me rodean, siempre controlando que no sea demasiado para mí. Me centro en el romper de las olas, el cantar de los pájaros y la respiración serena y adormilada de la mujer que sostiene mi corazón en sus manos.

Lois' POV

Abro los ojos lentamente, sin querer despegarme de la sensación de los labios de Clark sobre los míos. No puedo evitar acariciar mis labios con las yemas de los dedos, intentando no perder el tacto de su beso aunque no haya sido más que un efímero recuerdo abstracto que no ha ido más allá de la realidad de mi sueño.

Me levanto de la cama dispuesta a afrontar este nuevo día, con la certeza de que ahora todo va a ser diferente. Me doy una ducha rápida que me ayuda a despejar la mente, y mientras dejo que mi café matutino se vaya preparando, empiezo a vestirme y arreglarme para irme al trabajo. No tardo demasiado, por lo que en menos de media hora estoy conduciendo de camino a la oficina con mi bolso y mi termo como copilotos.

Antes de entrar en el edificio, me fijo en que la bicicleta de Clark está aparcada en el mismo sitio de ayer de forma que me resulta imposible saber si ha llegado ya, puesto que después de nuestra comida no volvió a recogerla y supongo que no lo hizo tampoco más tarde. Así, tomo el ascensor sintiendo mis nervios a flor de piel por verle y la vergüenza cruzar mi pecho ante tal sentimiento. Lane, solo es un hombre, supéralo.

"Un hombre que te ha salvado la vida en varias ocasiones, que besa como los dioses y que está tremendamente bueno."

Llego a mi planta y camino mirando a mi alrededor en dirección a mi mesa de trabajo. Me desilusiono un poco al no verlo por ninguna parte, así que después de saludar a un par de compañeros y charlar brevemente con Jenny, decido comenzar la jornada laboral y me siento en mi silla.

No han pasado ni cinco minutos cuando un susurro casi provoca que me atragante con el café.

- Buenos días, Lois – no necesito girarme para saber que es él y que está sonriendo. – No pretendía asustarte.

- Clark – le devuelvo la sonrisa en cuanto me recupero. – Espero que disfrutaras del partido de anoche con Steve.

- No estuvo mal, tuvimos una victoria merecida y fue divertido pasar el rato con él.

- Creo que mereces saber que pretendía usar esas entradas para ligar, espero que no intentara propasarse contigo en la primera cita – ambos estallamos en carcajadas.

- Tranquila, fue todo un caballero – dice dando un sorbo a su café de máquina cuando ya estamos más calmados.

- Por cierto, bonitas gafas.

- Oh, gracias; aunque sean pura decoración, me gusta que queden bien – me responde divertido bajando un poco la voz.

- Estoy segura de que tu disfraz será infalible. Nadie podrá reconocerte jamás con algo tan... elaborado... – no puedo evitar bromear, ya que me pareció muy curioso cuando se las vi puestas ayer. Por suerte, él no se lo toma en serio y se une a mis risas.

- Sabía que te burlarías de mis queridas gafas de pasta... ¡me siento ofendido!

Poco a poco la redacción se ha ido llenando y la mayoría de nuestros compañeros se dispone a empezar a trabajar. Es entonces cuando la puerta del despacho se abre y Perry aparece para dar comienzo a un día más en el Daily Planet.

- Buenos días a todos – las voces se van apagando hasta que solo se escucha la del jefe. – Por desgracia, acaban de informarme de que vamos a iniciar el día de forma poco agradable, así que les pido que se esfuercen cuanto puedan ya que no va a ser un día fácil para nadie.

Acto seguido, Perry enciende el televisor que se encuentra en medio de la sala para que todos podamos observar la noticia con nuestros propios ojos.

"Decenas de coches policiales están siendo movilizados y desplazados al lugar de los hechos para poder disponer de refuerzos en caso de actuación. Se han identificado trece rehenes en total y el conjunto criminal está formado por tres ladrones armados que tomaron el banco hace 35 minutos..."

Miro a mi alrededor, sin saber muy bien qué hacer ahora. Observo cómo todos miran preocupados la pantalla, seguro igual de impactados que yo. Clark frunce el ceño a mi lado, escuchando atento las palabras de la periodista mientras el caos empieza a reinar en la redacción y yo intento volver a concentrarme en la noticia.

"... amenazan con empezar a deshacerse de los rehenes en caso de que la policía no colabore con ellos. Se confirma que ha sido la voz de un niño la que han utilizado como prueba... "

Siento un intenso dolor en el pecho, y cuando vuelvo a apartar la mirada del televisor, me doy cuenta de que Clark ya no está a mi lado. Cuando me doy cuenta de por qué, empiezo a recobrar el aliento y sonrío.

Realmente lo echaba de menos.

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N/A:

¡Volví! Debía aclarar por dónde quería que fuera la historia, y ahora que he encauzado un poco todo, voy a ponerme a escribir de nuevo. Espero que os guste. ¡Gracias por leer, votar y comentar! <3