07

6.2K 325 2
                                    

Mientras la tía Clare conducía en dirección a la nueva escuela, Mae miraba atentamente por la ventana del auto mientras pensaba en la pluma negra que había encontrado en su habitación esa misma mañana.
-Sabes que puedes confiar en mí...¿Verdad?-. Haley se quedó observando a Mae con severa preocupación en su rostro tratando de que esta por lo menos despegara su pasiva mirada de la ventana del auto para poder responder su pregunta.
-Mae, si algo te pasa solo dímelo...- dijo nuevamente Haley sin recibir alguna respuesta por parte de su preocupante prima.
Al llegar a la entrada de la escuela, Mae fue la última en bajarse del auto. Aula 23, Mae entró en su respectiva aula, ahí una mujer de anteojos,cabello negro y corto y que usaba un vestido gris con la falda siete dedos arriba de la rodilla miraba pensativa una lista con diversos nombres... Nick Lancaster, Amelia Fox, Helen Morgan, leyó rápidamente Mae mientras caminaba frente al escritorio dirigiéndose a su asignado asiento.
Pocos minutos después la clase empieza. Un chico bastante guapo entra por la puerta del salón de clases y Mae voltea a verlo y no logra despegar su mirada de él...
-Buenas tardes señor Nick- dice la señora de los anteojos con una voz en modo de burla.
-Ya se habrá dado cuenta de que llegó once minutos después de la campana...¿Trae consigo un permiso para entrar?- pregunta la señora extendiendo la mano hacia adelante como si estuviera pidiendo algo.
-En realidad...no; no traigo un permiso conmigo y creo que eso no será un problema...claro...al menos de que usted, señorita Blanchard, quiera tener un problema con mi padre que, por cierto, es el vicerrector de la escuela- dijo el chico muy seguro de lo que estaba diciendo. Después de eso todas las chicas del aula suspiraron mientras miraban al chico con su codo apoyado en su respectivo banco y su cara apoyada sobre sus manos...todas excepto Mae, la cuál volteó sus ojos dejándolos completamente en blanco.
La clase continuó, la sr.Blanchard daba su discurso sobre la "Segunda Guerra Mundial" pero Mae no prestaba mucha atención a lo que decía, en lugar de eso dibujaba en una hoja en blanco de su cuaderno de historia un hombre con un ala blanca y un ala negra idéntico al demonio que la chica había conocido la noche anterior. Mae seguía dibujando cuando la señora Blanchard se acercó al banco de la chica y aclarando la voz dijo:
-Disculpe señorita Mae Henderson, espero que esté prestando atención a mi explicación ya que la semana que viene haré un examen sobre el tema de hoy- dijo la maestra mientras miraba a la chica y a su dibujo con una ceja levantada. Mae levantó la mirada y al ver a la sr.Blanchard parada con los brazos cruzados frente a ella ocultó rápidamente el dibujo en su banco.
-¡Entrégueme eso!-. La señora Blanchard tenía nuevamente la mano estirada en manera de estar pidiendo algo mientras toda la clase observaba la vergonzosa escena de la maestra y su alumna.
Mae decidió entregar el dibujo sin saber que su estúpida profesora lo levantaría con sus manos mostrándoselo a todos sus compañeros mientras estos reían a carcajadas:
-¿Esto es lo que hacía durante la clase?- preguntó la maestra mientras soltaba una pequeña risita.
-Una especie de hombre pájaro....mitad águila mitad cisne- decía la sr.Blanchard mientras seguía mostrando el dibujo a los compañeros de Mae que no paraban de reír...
-Es un demonio- dijo Mae en voz baja.
-¿Un qué?-preguntó la maestra mientras se sacaba la cera del oído.
-Un demonio-repitió Mae esta vez en voz más alta.
La maestra enseguida soltó una carcajada seguida por las carcajadas del resto de los alumnos. A Mae se le sonrojaron las mejillas por la vergüenza que le provocaba esa incómoda situación.
Así duró hasta que al fin sonó la campana para salir a descanso y la maestra le entregó nuevamente el dibujo a Mae. La chica tenía los ojos aguados y el odio hacia esa mujer la quemaba por dentro cuando el lindo chico de nombre Nick se acercó a donde ella estaba sentada:
-Es un lindo dibujo- dijo el chico mientras observaba a la tímida chica que no se atrevía aún a levantar la mirada.
El chico notó que la chica estaba enojada y deprimida así que tomó el asiento del banco de en frente y se sentó frente a ella, tomó el mentón de la chica para levantar su cabeza y lograr ver fijamente sus ojos...
-Tranquila...la señora Blanchard es una idiota-dijo Nick mientras sonreía y luego ambos soltaron una pequeña risa. Mae escuchó que dos chicos que estaban parados en la puerta del salón gritaban el nombre de Nick el cual al escucharlos se levantó tomando la mano de Mae para levantarla también y llevarla hasta el jardín de la escuela.
Al parecer ese dibujo no era del todo malo, no sólo había atraído burlas y bromas hacia ella si no que ahora gracias a ese dibujo Mae había logrado conquistar a un chico guapísimo (pensaba ella).

Mi novio, un demonio | original [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora