Assassins Au 2 [Kevedd]

Capitulo 4

El video me hizo recordar al fic aparte es como muy parecido jeje y la musica es buena. Pd, reproduscan la musica cuando esten leyendo.

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Se arrastraba en el suelo de asfalto, las lagrimas de su rostro aun estaban húmedas, después de tanto caminar y casi sin comida ni agua.

Las nubes de tormenta comenzaban a dar su cántico, sus truenos resonaban y amenazantes dejaban caer las gotas de agua que rozaban con su rostro. Trato de levantarse cayendo algunas veces, su cuerpo débil ya casi estaba desecho, sus ropas rasgadas y sus heridas apenas si quiera comenzaban a sanar.

El camino por una ciudad fuera de control no es fácil para nadie, al igual que para él que se arrastraba hasta lo que parecía un edificio derruido y a punto de derrumbarse, sus piernas ya casi ni se movián de lo débil que estaba. La falta de comida lo afectaba, su boca seca por la falta de agua hasta el punto de ya casi morir de sed, ya no podía más, se desplomo en el suelo cansado y sin esperanzas. Su rostro se desplomo contra el pavimento esperando lo peor, jamas penso que moriria de esta manera y sin poder disculparse con Eddward. Tan mal se sentía que las lagrimas no tardaron en llegar, se toco la mejilla con las ultimas fuerzas que le quedaban y sonrió con pena.

-Cuanto lo siento....- dijo hablando a la nada -Lamento....el no haber sido lo suficientemente fuerte...para protegerte... Eddward- pronuncio ese nombre, el nombre que tanto queria escuchar y gritar a los cuatro vientos que lo amaba, que lo deceaba queria ver esa sonrisa en su rostro y poder tocar su suave piel de porcelana delicada. Pero ya no podria verlo... si tan solo ubiera tenido la fuerza necesaria para hablarle y decirle lo que paso, pero no, se maldecia por no haberle dicho lo que sucedio con Marie, no queria darse por vencido pero ¿Que le quedaba? Absolutamente nada.

-Mierda... no puedo...morir asi- dijo a lo que se levantaba tambaleandose llegando a una columna de hierro que sostenia una pequeña parte de un edificio. Y hay fue cuando vio la entrada a otro infierno, las casas incendiadad, gritos de familias por todos lados, personas saqueando y peleando unas contra la otras; California, su antigua ciudad donde vivio su infancia y su vida amorosa. Al fin habia vuelto despúes de un año entero, arreglaria las cosas como debieron ser.

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Desperto con un susto, la entrada de su amigo lo alerto a despertar, despúes de un tiempo el no poder dormir le complicaba bastante. En barias ocaciones tubo que esfrentarse a ladrones o vandidos que querian sus pocas pertenensias, pudo defenderse en ocaciones y se maldecia a si mismo por matar a algunos de estos. Levanto la mirada algo adormilado, vio a su amigo que tenia una cara de panico en su rostro, por un momento penso que algo malo habria pasado pues Nath se le acerco agarrandolo de la muñeca forzandolo a pararse.

-Debemos movernos rapido- dijo a lo que tironeaba el brazo de Kevin que no entendia nada en lo absoluto.

-¿De que hablas? ¿Sucedio algo?- pregunto Kevin a lo que era tironeado fuera de la carpa de enfermeria.

-Doble D acaba de llegar y necesito esconderte lo más rapido pisible- en eso solo salio corriendo sujetando la mano de Kevin con fuerza para arrastrarlo contra su voluntad. Kevin sabia perfectamente que ya nada era lo mismo pero no queria quedarse como un perro con la cola entre las patas, se solto del forzoso agarre de Nath de un tiron dejando sorprendido a su amigo peliagua que solo lo abservaba preocupado.

-No voy a escapar nunca más-

-¿Es que no lo entiendes?- grito Nath a lo que pronto bajo la voz por no querer alarmar a las personas -Doble D podria matarte si sabe que estas aqui y peor sera para mi, me considerara un traidor- dijo a lo que se sujetaba los cabellos verde agua con desesperación.