CAPITULO 2

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¿Acaso las luces de ese lugar no se apagaban nunca?

Estaba mirando el frio techo, mientras el ambiente a mi alrededor estaba vuelto mierda, tanto que prefería mirar fijo hacia la luz, para ver quien perdía primero, si yo cerraba los ojos, o ella se apagaba.

-Dan, ha sufrido un gran impacto, su cerebro aun no reacciona, es como si su corazón retomara su latido, pero el cerebro se reúsa a colaborar. Tiene un traumatismo en una gran parte del cerebro.

-¿Me está diciendo que mi hija quedara estúpida?

La luz no se rendía aun, pero mis ojos eran mucho más fuertes.

-Aun no lo sabemos, tenemos que hacerle unos estudios más, ella aun no habla con nadie, y grita cada 2 horas como si alguien le dijera que debe hacerlo

-Mi hija no está loca

Esta luz es un gran rival, opte por mirar hacia otro lado, en donde una señora de cabello negro hablaba con un señor de bata blanca en un rincón de la habitación.

-Nos está mirando- Respondió la señora una vez más

El señor giro su cabeza hacia mí y me sonrió

-Por favor déjeme verla, yo sé que ella me quiere ver- Dijo la señora desesperada, a punto de lágrimas. Yo aún no entendía que sucedía, ni porque estaba atada a tantas maquinas, no reconocía a nadie y estaba muy confundida, así que poniendo todo mi esfuerzo decidí sentarme sobre la cama en donde estaba acostada.

Un dolor se apodero de mi cuando trate de moverme y un grito ahogado que tenia reprimido se escuchó en toda la habitación.

-Señora por favor, tiene que colaborar- Dijo el hombre de bata blanca hacia la de cabello negro junto a dos mujeres tratando de que ella saliera de aquí.

-¡Hija, hija, por favor!

La señora salió a rastras junto a las 2 mujeres y el señor. Me quede en silencio hasta que segundos después regreso el señor junto a 2 más.

-Hola Dan, como te encuentras

¿Quién carajos era Dan?

Quise decir una palabra pero mi boca ni se inmuto.

-Tu madre me dijo que eras un poco tímida- una cálida sonrisa ilumino su rostro- Que pena, me presento. Soy el doctor, Theon Smith encargado de emergencias y recuperación. Estos dos son mis compañeros, Sam Clark encargado de revisiones y daños en gravedad y Dante Kahler psicólogo, psicriata ambos graduados de la universidad de Harvard.

No sé qué demonios hago aquí.

-Entiendo que por el momento estés un poco turbada, por todo lo que ha pasado, solo te haremos unas pequeñas revisiones.

No, no, no quería que me tocaran.

El doctor Theon se acercó hacia mí, no quería que me tocara por alguna razón, si moverme se me hacía difícil no me imagino su roce.

-No

No sé cómo salió esa palabra de mi boca, pero agradezco que él se alejara.

-Tranquila, soy tratare de acomodarte.

-No

De nuevo esa palabra, no sé cómo salía de mi boca.

-Theon, creo que es mejor dejarla así, debe estar alterada. La primera palabra que pronuncio después de su accidente fue "No".

¿Qué accidente?

-Dante, creo que es mejor que cierres la boca.

-Basta ambos, y largo de aquí, están alterando su pulso.

Dante y Sam se retiraron discutiendo, mientras Theon trataba de calmarme, pero solo lo estaba empeorando.

Quería articular una palabra, pero al parecer mi boca estaba obstinada a decir "No".

-Qué te parece si me retiro, y te calmas ¿Vale?

Theon se dirigió hacia la salida, pero no podía quitarme de la cabeza la palabra accidente, y los dolores que tenía por todo el cuerpo. Justo cuando Theon abrió la puerta apareció el chico de ojos azules. Creí que si mi pulso estaba acelerado, ahora mismo iba a estallar.

-¡Déjenme, alto! Ella merece la verdad. ¡Dan, Dan!

Quería gritarle que tenía por decirme, mi pulso estaba a mil y no me importaba cuanto me doliera el cuerpo, tenía que llegar hasta él y escucharlo. Las maquinas empezaron a hacer un ruido muy irritante, y con toda la fuerza del mundo, me levante de mi cama y me arranque los cables que estaban atados a mí. El doctor Theon trataba de detener al chico con todas sus fuerzas mientras que llamaba a seguridad.

Cuando por fin estaba de pie, vi una pequeña sonrisa del chico hacia mí.

-Eso Dan, ven a mí.

Inmediatamente el oxígeno me falto, los de seguridad llegaron cargando el chico hacia fuera, no podía respirar, y me derrumbe en el suelo. No sabía que me estaba pasando. El doctor Theon corrió hacia mí, tratando de que reaccionara, mi vista se estaba nublando, y el oxígeno cada vez se hacía más necesario. El suelo de la habitación estaba tan frio.

-¡No los escuches Dan, solo quieren hacerte daño, no dejen que te toquen! ¡No creas nada de lo que te dicen!

Mis pulmones no resistieron más.

**************

Hey, como están.

Quisiera agradecerles por el apoyo, se que aun no entienden mucho, pero recuerden escribirme para aclarar las dudas.

Espero que les guste

-ERROR404

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