La chica de cabello rojizo despertaba, al principio parecía despertar de un dulce sueños, pero poco a poco fue alterándose al notar que varías agujas le atravesaban la piel suministrándole algún sedante, seguramente.
Rápidamente, con la vista aún borrosa, se levantó de la camilla y liberó de las inyecciones que tenía en muñecas y antebrazos, y se arrancó los electrodos del pecho.Observó primero su ropa, puesto que era lo único que su vista alcanzaba a ver con nitidez.
Llevaba un pantalón negro elástico y una camisa de tiros del mismo color, pero ésta llevaba bordado el dibujo de una llama roja en la parte superior derecha.Cuando por fin sus ojos consiguieron enfocar vio que estaba en una habitación hospitalaria.
Después de fruncir el seño confundida, cogió un portapapeles de la mesa auxiliar que allí había:
Nombre: Adalia Peterson.
Edad: 15 años.
Lugar de nacimiento: Phoenix, Arizona.
Problemas fundamentales: sociopatía, cleptomanía y drogadependencia.
Elemento: fuego.Más que leer la hoja, se podría decir que visualizaba palabras sueltas, aunque no hacía falta fijarse mucho para saber que sabían demasiado de ella.
Sólo había una cosa que no era capaz de entender: ¿que significaba que su elemento fuera fuego?Ya sabía de que iba eso, pensó que sería algún hospital psiquiátrico que se ha ofrecido a ayudarla.
No sería la primera vez que le ocurría eso, ni la primera que escaparía de algún lugar así
Pero antes debía busca a algún cómplice al que luego traicionaría.Salió de la habitación para encontrarse en un pasillo con otras tres habitaciones.
En las puertas sólo había el nombre de un elemento y su símbolo, en su puerta ponía fuego y la misma llama que llevaba en la camisa.Tras deliberarlo un rato decidió entrar en la habitación de agua, por el simple motivo de que el agua vence al fuego, y digamos que le gustan los retos.
Al cruzar la puerta vio a una chica de pelo negro azabache y piel blanca, aún dormida.
La envidió un instante por su belleza, pero ese sentimiento se desvaneció rápidamente al ver que la chica abría sus ojos azul mar.- ¿Quién eres? - preguntó con una voz tan inocente como su cara.
- Adalia Peterson - sonrió.
- ¿Y dónde estoy? - se incorporó.En ese gesto Adalia pudo darse cuenta de que también tenía bordada una gota de agua en la camisa.
- Eso mismo me pregunto yo - dijo mirando a su alrededor -, pero sé que deberías quitarte esas vías.
- ¿Qué me están pinchando? - su tono cambió a uno un poco más alarmado.
- Creo que morfina, o algún otro tipo de cedante, quítatela y empezarás a enfocar y a tener pensamientos coherentes.Obedeció miestras miraba temerosa los ojos castaños de aquella chica que podría estar salvándole la vida.
Se levantó rápidamente ignorando los temblores de sus piernas.
- ¿Estás segura de que puedes caminar, así de repente? - arqueó las cejas
- Sí - hizo un gesto con la mano dando a entender que no se preocupara.Tocó el helado suelo con los pies desnudos y puso su peso en ellos.
Perdió la fuerza y le fallaron las rodillas callendo.- Con que podías caminar perfectamente, ¿eh? - dijo en tono de burla.
- Calla y ayudame a levantarme - extendió el brazo.Adalia agarró su delicada mano y de un empujón la volvió a poner de pie.
- Vaya, eres muy fuerte - estaba realmente asombrada.
- Y tú pesas muy poco, ¿no serás una de esas adolescentes obsesionadas con el peso?
- No, sólo que a veces se me olvida comer - puso los ojos en blanco.
- ¿Chica olvidadiza? - hizo como si estuviera pensando -, prefiero llamarte por tu nombre.
- Mereri, Mereri Lee.
- Pues vayámonos de aquí Mereri.Las dos chicas salieron al pasillo, pero encontraron a alguien inesperado.
Un hombre de unos cincuenta años, vestido de punta en blanco, pelo blanco y perilla canosa también, las miraba con una sonrisa en su boca.
- Hola Adalia - le estrecho la mano -, y hola Mereri - repitió la misma acción -. Estoy encantado de haberos podido conocer en persona por fin.
Las dos se miraron y pensaron exactamente lo mismo, pero fue Adalia quien preguntó.
- ¿A qué te refieres con en persona?
- Os lo explicaré todo en mi despacho, con los otros dos.Las dos chicas, algo confusas, lo acompañaron hasta su despacho.
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Éter #ROAWARDS2016
AzioneNombre: Adalia Peterson. Edad: 15 años. Lugar de nacimiento: Phoenix, Arizona. Problemas fundamentales: sociopatía, cleptomanía y drogadependencia. Elemento: fuego. ____________________________________ Nombre: Neyel Johnson. Edad: 15 años. Lugar de...