Hola, me llamo Kaetlin, pero todo me dicen Kate, mi vida es el ballet, esa es mi pasión y es un camino largo donde se derramó sangre, sudor y lágrimas para llegar donde estoy ahora.
Me eh encontrado en momentos donde eh recibido pocos aplausos.
Déjenme decirles que esos seres espigados, aparentemente frágiles, de cutis de porcelana y cuello de cisne, esconden tras de sí un historial de sacrificios y trabajo duro. El ballet tiene su propio idioma y hablarlo con el cuerpo no es nada sencillo.
Yo con mucho, mucho dolor eh aprendido a hablarlo fluidamente.
Ahora les contaré cómo pasé de ser patito feo en el ballet, a ser el cisne majestuoso que todos aclaman en el escenario.
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Maté a un Ángel
Romans"Sería un cobarde si no sintiera tus lágrimas en cada paso" -Austin