Capítulo 1

261 10 2
                                    

Capítulo uno "El sabor de lo prohibido"

Sus enormes ojos marrones se encontraban cada vez más dilatados, podía ver su alma a través de ellos, no fue el sexo duro al que estaba acostumbrada, fue algo diferente sentía un tipo de conexión con él. El sonido de la campana que anunciaba la finalización del descanso y el pronto regreso de los alumnos a sus salones de clase, nos despertó del dulce sueño erótico en el que estábamos.

-Irina, terminaremos esto en otra ocasión- Dijo mi profesor de Historia, mientras retiraba su duro miembro de mi interior y lo escondía ágilmente entre sus bóxers azules.

-No, si consigo a alguien más que apague las ganas con las que me has dejado- Digo, mientras recojo mi brasier del piso de madera y lo abrocho por mi espalda.

-Eso lo veremos- Y jala mi largo cabello castaño que está recogido en una coleta alta, haciendo que retroceda mi cabeza justo a tiempo para darme un apasionado beso que encierra una promesa carnal.

Unos breves segundos me dan el tiempo suficiente para subirme las bragas rosa, acomodar mi blusa y falda, e ir a mi asiento en primera fila para escuchar la clase. Los alumnos comienzan a entrar.

-BIENVENIDOS ALUMNOS Y ALUMNAS A UN NUEVO AÑO ESCOLAR!, mi nombre es Ethan y seré su profesor de Historia este año.

Ese ha sido el mejor recibimiento que he tenido a un año escolar, no puedo esperar a lo que me espera, incluso me dan ganas de venir a la escuela pero no precisamente para aburrirme en clase tras clase.

Mientras la clase continúa, me imagino a mí misma recostada en ese escritorio de metal en distintas posiciones mientras Ethan suelta gemidos llenos de placer y pasión. Tomo un lápiz de mi mochila y lo muerdo, deslizo una mano debajo de mi falda y abro las piernas para dar una majestuosa vista de la que sólo mi guapo profesor puede disfrutar, esa es una de las ventajas de sentarse en primera fila, no hay nadie a mi alrededor. Ethan desvía la mirada hacia mí y se paraliza un momento perdiendo la concentración, miro su entrepierna y veo la creciente erección que cada vez es más evidente. Amo el efecto que tengo sobre él, el infernal timbre de salida salva a Ethan antes de que alguien viera lo que producí.

Espero que todos los alumnos y alumnas salgan, y una vez más sólo somos él y yo.

-Muchas Gracias, profesor por la entretenida clase que nos acaba de dar, espero que este año lectivo sea muy largo para disfrutar de su compañía.- Digo mientras me inclino en su escritorio para darle una mejor vista de mis senos.

- Haré lo posible para seguir manteniendo el entretenimiento en mis clases, señorita Castilla. Y para que vea lo comprometido que estoy con su causa, le ofrezco unas clases de Historia privadas en mi casa, ya sabe para que no repruebe mi materia.

-Le aseguro que pasaré con excelencia.

-Entonces aceptas? Mi esposa trabaja en las tardes así que no habrá problema.

-Lo pensaré, es hora de irme.- Me levanto y recojo mi mochila del piso, doy un paso hacia delante pero él me detiene, toma mi mano y la dirige a su entrepierna la cual duplica su tamaño al sentir el calor de mi tacto.

- Me vas a dejar así?

-Sí

-Ni una pequeña muestra de cariño antes de que te vayas?

-No

Retiro mi mano y camino hasta la salida, me detengo en el umbral de la puerta antes de salir y en un arrebato de provocación introduzco un dedo en mi interior, lo muevo lentamente para finalmente sacarlo y meterlo en mi boca, mientras siento la intensa mirada de Ethan queriéndome devorar. Y salgo de mi salón de clase. Amo dejar con las ganas a mis hombres, eso aumenta sus expectativas, sus ganas, mi recuerdo no los deja concentrarse, no pueden dejar de pensar en mi cuerpo desnudo y eso me encanta. Camino por el largo pasillo de mi escuela Harristhong.

Todos los alumnos y alumnas dirigen su mirada hacia mí mientras voy caminando, ellos me miran con absoluto deseo y ellas me matan con la mirada, envidia.

Llego hasta el estacionamiento, y abro mi auto un Audi Sabat Rojo.

-Hola preciosa, que grandiosa noche, verdad?

-Lo cierto es que no la pasé tan bien.

-Disculpa? Todas mis amantes me han dicho que soy el mejor- la irritante voz de Martín casi destruye mis tímpanos. Me acosté con este chico anoche, es que estaba aburrida. Y según él se mataba con tal de poseerme.

-Pues te han mentido, cariño. Conozco vibradores que lo hacen mejor que tú. Ahora si me disculpas tengo asuntos pendientes que requieren mi atención.

-Puta

Me doy vuelta para quedar frente con frente con este grandísimo imbécil. No me importa si ante los ojos de estos estúpidos soy una puta no es su deber decírmelo, yo sé quien soy, y ellos no son nadie para decírmelo. Me acerco lentamente, estoy a milímetros de la boca de Martín, nuestro aliento se mezcla, el cierra sus ojos esperando que lo bese, pero bajo rápidamente mis manos y atrapo sus bolas, comienzo a apretarlas, él abre sus ojos, consciente del dolor que le estoy provocando, no pienso detenerme y cada vez aprieto más duro, hasta que grita.

-Suéltame.

-Pídeme disculpas

-No

-OK- Y aprieto con todas mis fuerzas, para dejarlo estéril, le haría un bien a la humanidad.

-Perdón, ahora suéltame, te lo suplico

Dejo caer mis manos, antes de que Martín caiga al piso de rodillas ante mi.

-Espero que hayas aprendido la lección, cariño. Ahora aléjate antes de que te deje sin la posibilidad de procrear.

Subo a mi auto y salgo disparada de aquel lugar. Me estresaba que esta clase de tipos buenos se creyeran los amos y dueños del universo, cuando no son más que vagabundos ante mi.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Esta es una nueva y erótica aventura que voy a tomar, será un poco arriesgado pero tengo que hacerlo. Gracias por leer <3 <3

Diario de una TentaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora