Bad Heroes - Larry (1era Temporada) EDITANDO

Capítulo 28

Niall

- Uno... Dos... Tres... ¡Corre! - Richard ordenó, presionando el botón del reloj en su muñeca, a fin de marcar el tiempo en el que yo corría.

Aceleré. Cada paso que daba, sentía el viento con más fuerza en mi rostro. No podía sentir más la fricción de mis pies con en suelo, y mi respiración estaba solo un poco más acelerada de lo normal.

- ¿Y? ¿Cuánto tiempo dio? - Pregunté, parando en la linea de llegada y pasando una mano en mi tupé, trayéndolo para el frente nuevamente

- Siete segundos. - Richard respondió.

- ¡WOW! - Exclamé. - ¿Di tres vueltas en esta pista gigante en solo siete segundos?

- Sí, con una velocidad de 300km/h.

- ¡Eso es genial! - Hablé, sonriendo.

- Sí, pero aún tenemos mío que entrenar. - Richard decía, haciendo anotaciones en su porta papeles. - En unos días, podrás dar 10 vueltas en tres segundos.

- ¿Hasta que velocidad puedo llegar? - Pregunté.

- Hasta la velocidad de la luz. - Él respondió. - ¿No recuerdas cuando dije que eres capaz hasta de viajar en el tiempo?

- ¡Cierto! ¡No me acordaba! - Hablé, sentándome en el suelo y desamarrando en cordón de las tenis.

- ¡Dios! Ya son las cinco de la tarde, ni me había dado cuenta... Me gusta mucho ser tu entrenador,  no veo al tiempo pasar.

Respondí con una sonrisa simpática, porque no tenía qué responder.

Nos quedamos en silencio, hasta que yo hubiese terminado de quitar mis tenis.

- Gracias por el entrenamiento, hasta mañana. - Hablé, levantándome y colocando los dedos dentro de las tenis, sujetándolas.

- ¡Hasta entonces! Nos vemos mañana, rubito. - Richard dijo, riendo y haciéndome rodar los ojos.

Yo caminaba sosteniendo el cuello de mi camiseta y soplando en dirección a mi pecho, no soportando mi piel pegajosa por debajo de la malla.

Pasé frente a un vidrio y me miré, asustándome por mi rostro tan rojo.

- ¡Hey, Niall! - Oí una voz ronca, me giré y di de cara con el rostro, también sudado, de Harry.

- ¡Hey, bro! - Hablé.

- Tomé una decisión un tanto difícil hoy... - Él dijo, acompañándome mientras yo caminaba.

- Hasta tengo miedo de saber. - Hablé.

- Hoy, durante el entrenamiento de la tarde, Louis me ignoró completamente. - Él decía, mirando al suelo. - Creo que él se en verdad se tomó en serio aquel asunto de "dar un tiempo".

- ¿Y entonces? - Pregunté.

- No aguantó este "tiempo" suyo. - Decía, haciendo besos con las manos. - Si lo del, su tiempo será eterno.

- ¿Qué pretendes hacer?

- Hoy, después de la cena, voy a conversar con él. - Giró el rostro y miró profundamente mis ojos. - Tenemos que aclarar esto de una vez por todas.

- Tienes razón. - Respondí. - Pero... ¿Qué vas a decir, exactamente?

- No lo sé aún... En el momento me las arreglo.

- Entonces, buena suerte. - Hablé, dando una palmadita en su espalda. - Voy a tomar otro baño ahora, me fui.

Salí caminando en dirección a mi cabina, y entré. Tirando mis tenis en cualquier rincón y sacándome la camiseta, tirándola sobre la cama.